En un momento en el que la música está perdiendo su poder comunicativo para caer de lleno en el entretenimiento, la Pasión según San Juan de Johann Sebastian Bach enciende de nuevo su capacidad para conectar al ser humano con lo que lo trasciende. Así define Weimar Arancibia, director de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), la potencia creativa de esta pieza litúrgica del compositor alemán.
El 16 de abril a las 20.00 en el Centro Sinfónico Nacional (Ayacucho 366, casi esquina Potosí), por primera vez cinco elencos diferentes— la OSN, el ensamble Alkymia, la Sociedad Coral Boliviana, el Coro Orfeón Voces Nuevas y el Ballet Oficial de Bolivia— tomarán el escenario para interpretar esta obra.
Las pasiones son un género orquestal que narra la pasión y muerte de Cristo según los relatan los evangelios. Éste, en particular, es uno de sus mejores ejemplos. Se estrenó por primera vez un Viernes Santo de 1724 y se ha hecho tradición interpretarlo en las fechas cercanas a Semana Santa, en iglesias y teatros de todo el mundo.
El ensamble Alkymia llega desde Francia para tocar en diferentes lugares del país y se unirá a la OSN en este concierto. “Es uno de los mejores ensambles profesionales dedicados a la música antigua. Y Mariana Delgadillo, su directora, es una música boliviana con mucho talento y profesionalismo”, dice Arancibia.
Uno de los aspectos innovadores de este espectáculo es la incorporación de escenas representadas por los bailarines y bailarinas del Ballet Oficial de Bolivia, liderados por César Paco.
“Es una obra muy sofisticada, que incorpora texto bíblico escrito por San Juan, y también corales y arias, que funcionan como paréntesis dentro del desarrollo del drama. En ellos vamos a escenificar las escenas que son relatadas, de forma que ningún detalle de la historia se pierda”.
Tanto los corales como las arias son espacios de reflexión y meditación que Bach incluyó en la obra. Son parte de la tradición luterana y algunos incluso fueron escritos por el mismo Lutero. Éstos le dan una pausa tanto narrativa como musical a la obra, en la que sobresale la belleza del lenguaje en que se narra.
Para que todos los asistentes puedan disfrutar tanto de la música como de la letra, se proyectará ésta en su lenguaje original, alemán, tanto como en español.
A estos tres elencos se suman los conjuntos corales de la Sociedad Coral Boliviana (SCB), dirigida por Mateo Barrientos y el Coro masculino Orfeón Voces Nuevas, al frente de Carlos Illanes. “El coro de la SCB está en proceso de profesionalización, es por eso que participar de este concierto es un reto que no podíamos dejar pasar. Es una gran oportunidad para ganar experiencia y ser parte de puestas en escena de gran nivel”, explica Barrientos, quien asumió el puesto de director hace ocho meses.
Para enfrentar este desafío artístico el coro femenino de cámara de la Sociedad Coral Boliviana estará acompañado por las voces masculinas del Coro Orfeón Voces Nuevas, quienes completan los requerimientos corales de la obra de J. S. Bach.
Esta puesta en escena, que se construye a partir de diferentes manifestaciones artísticas, pretende que el público se zambulla completamente en una de las narraciones más influyentes de la cultura universal. “Ésta es una historia que ha transformado a la humanidad, ha inspirado múltiples obras de arte y queremos acercar a la gente a la experiencia espiritual que implica, bien sean creyentes o no”, afirma Arancibia.