El 6 de diciembre, el ingeniero Joaquín Carlos Andrade Claros tomó una errada decisión política: despedir al exdirigente minero Édgar “Huracán” Ramírez de las funciones de director del Archivo Histórico de la Minería Nacional de la Corporación Minera de Bolivia. Paradojas de la historia: en 1985, la Comibol administrada por tecnócratas neoliberales decidió prescindir del Archivo minero, instruyendo su traslado a los Almacenes de esa empresa en la ciudad de El Alto, donde tiraron invaluables testimonios de 80 años de historia minera en el patio y decenas de turriles. Para ellos solo era basura.

El DS 21060 instruyó el cierre de operaciones de la Comibol con la trágica consecuencia de la debacle del movimiento minero y la destrucción de su memoria histórica, pues millones de expedientes, en los 37 centros mineros, fueron sepultados al colapsar los techos de sus archivos, expuestos a las inclemencias naturales, pasto de roedores y alimañas, vectores biodestructores o corroídos por la copajira.

La destrucción inminente de los archivos mineros cambió radicalmente cuando apareció en escena Édgar “Huracán” Ramírez, quien al ver el desastre convenció a un puñado de trabajadores mineros, todos como él, “q’epiris”, a enfrentar el desafío del rescate de la memoria minera, usando el escaso tiempo libre que tenían para poner bajo techo la memoria minera. Usaron madera desvencijada y calaminas descartadas para techar los patios interiores, fabricando galpones donde trasladaron con esfuerzo cientos de miles de expedientes mineros; construyeron 2.000 metros lineales de estantería con clavos de 80 años de antigüedad, a los que sacaron filo.

Providencialmente llegó el apoyo del presidente Carlos D. Mesa Gisbert, quien promulgó el DS 27490 que autorizó la creación del Archivo Histórico de la Minería Nacional. En 2005, Thomas Converse, Chief, Record Management Section (Jefe de Archivos) del Banco Interamericano de Desarrollo, en misión oficial en Bolivia, visitó el Archivo Minero y escribió en su reporte: “Si bien la Comibol no es parte del programa piloto de transparencia gubernamental, proporcionó valiosas lecciones que se aprendieron al reconstruir un sistema de archivo que se encontraba en un estado de colapso total. Allí utilizó al máximo al personal, materiales y espacio, para recrear un muy ordenado y vital archivo que se encontraba antes en un absoluto caos. Los archivos de la Comibol son una inspiración para los archivistas de todas partes donde se enfrentan a desafíos de todas clases”. En 2009 llegaron brigadistas internacionalistas de todo el mundo para apoyar las arduas labores de conservación preventiva y descripción de la memoria minera.

¿Quién es Édgar “Huracán” Ramírez? Es sobreviviente del Plan Cóndor, fue exiliado a Chile, Inglaterra y Holanda. En 1988, el maestro Juan Lechín, manifestó:

“Huracán es un muchacho con mucha capacidad, en segundo lugar ha demostrado honradez. Cuando la Comibol ofreció mil dólares por año de servicio y había un grupo de comunistas ahí que se hacían los honestos, aprovecharon eso y se retiraron con sumas de 18, 20 mil dólares, fuera de las indemnizaciones. Quiénes no se retiraron: Víctor López, que trabajó 40 años en las minas y Édgar que trabajó 20. Cuando le preguntaron por qué no hace lo mismo, 20 mil dólares para un obrero es mucha plata y 40 por supuesto mayor, ellos dijeron: hemos sido elegidos en congreso para defender a los trabajadores. Seguiremos”.

Su rechazo provocó la reacción del gobierno de esa época. Fue confinado en el Mutún, luego enviado como barrendero a la oficina de Tupiza y como q’epiri (cargador) a los almacenes de El Alto. En Tupiza encontró los saldos del Archivo de la Aramayo Franke, que alguien trató de destruir por fuego pensando que se trataba de basura inservible. Recuperó los expedientes y varios objetos y muebles y con ellos la Alcaldía de esa ciudad creó un Archivo-Museo. En 1986 empezó la reconstrucción del Archivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), que había sido destruido por la dictadura del Gral. Luis García Meza, propiciado por un convenio firmado por la FSTMB y el CEDOIN, “por medio del cual la FSTMB inició el trabajo de recuperar, sistematizar, proteger, catalogar su archivo histórico y crea condiciones de accesibilidad irrestricta”.

El Archivo Histórico de la Minería Nacional goza de reputación mundial. Desde la basura recuperó para la historia documentos que fueron inscritos en el Programa Memoria del Mundo de América Latina y el Caribe. Expertos del Comité Regional de América Latina y el Caribe y del Comité Asia-Pacífico del Programa Memoria del Mundo de la Unesco constataron los avances del Centro de Conservación de Papel en septiembre de 2019.

El 11 de diciembre, el Viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales calificó, en acto público, el despido como un error a tiempo de ordenar la restitución de Édgar Ramírez en sus funciones, hecho que dignifica al Gobierno de transición de la presidenta Jeanine Áñez.