De política y encuestas
‘Tu verdad aumentará en la medida que sepas escuchar la verdad de los otros’. (Martin Luther King)

Hace pocos días, una nota de ANF mencionaba ocho frentes políticos que ya se preparaban para las elecciones de 2014. Una cifra impresionante, porque la gran mayoría serían oposiciones al proyecto político del MAS, a pesar de lo desmejorada actualmente que está la oposición política (no me refiero a conflictos sociales) en Bolivia.
En la lista estarían: Convergencia Nacional, cuyo jefe de bancada en Diputados (Luis Felipe Dorado) inició reuniones departamentales tras la “unidad de todo el país”; ésa misma es la consigna de Unidad Nacional, cuyo líder Samuel Doria Medina ya empezó a formar una alianza con el exgobernador de Beni, Ernesto Suárez, para impedir la dispersión del voto (en las elecciones municipales en Sucre, UN retiró su candidato para concentrar el voto en el candidato con más posibilidades, triunfando la candidatura opositora). También de Convergencia Nacional son los senadores Bernard Gutiérrez, que proyecta unificar la oposición a través del “Diálogo Nacional Itinerante”, y Marcelo Antezana, con su nuevo partido Nueva Fuerza Federal. En el mismo objetivo está el líder del Movimiento Sin Miedo y exaliado del MAS, Juan del Granado.
Tras el mismo propósito aunque sin definir aún estarían el Movimiento Nacionalista Revolucionario y la intención de la Central Obrera Boliviana de conformar un partido político de los trabajadores. Y fuera aún de lides electorales queda Verdad y Democracia Social, de Rubén Costas, circunscritos a su reducto cruceño pero con significativa fuerza regional. Frente a todos ellos, el MAS ya empezó su actividad proselitista para la reelección del presidente Morales.
Pero, ¿qué piensan los electores? Los resultados de una encuesta elaborada en mayo por Ipsos Apoyo en áreas urbanas y rurales de todo el país da cuenta que, si las elecciones generales se realizaran de inmediato, el presidente Morales obtendría 33% de los votos válidos. Mientras que los otros posibles precandidatos: Samuel Doria Medina y Juan del Granado, a los que se agregan Rubén Costas y el expresidente Carlos Mesa, obtendría magros 14, 13, 9 y 8%, respectivamente. Según la encuesta, los votos nulos, blancos y las abstenciones serían 16% (aunque la sumatoria da 104%, supongo que las aproximaciones decimales hacen sobrepasar el lógico 100%).
Si bien, según esta encuesta (con más del 3% de error), el presidente Morales no sería reelegido en primera vuelta, la presunta coalición de los dispersos para la segunda vuelta sería un abanico de distanciados sólo reunidos coyunturalmente, que no ofrecería un proyecto político nacional alternativo al programa de gobierno del MAS.
Si la dividida oposición quiere ser una real alternativa en 2014, los nuevos proyectos de unidad deben acercarse entre sí y sumar más adhesiones. Si no, nunca lo harán frente a un presidente Morales que, datos también de Ipsos Apoyo, en abril tenía aún una aprobación de 48% a nivel nacional; y en política nada está dicho.