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Proyecto de Carta Orgánica de La Paz

Días atrás se publicó el Proyecto de la Carta Orgánica del municipio de La Paz. Nos llama la atención varios aspectos. En el Capítulo I, referida a disposiciones generales, se asigna el nombre de “Municipio de Nuestra Señora de La Paz”. ¿Cuál es la razón para optar por ese nombre? ¿Es una imitación a nuestra señora de París?

Los que habitamos en esta ciudad, ¿no tenemos derecho de ser consultados para decidir qué nombre llevar? ¿Por qué se ha prescindido del nombre de Chuqiyapu marka, la ciudad ancestral más antigua que La Paz? La Carta Orgánica pretende borrar formalmente a Chuqiyapu marka. ¿Cómo denominar a esta intención? Es muy simple, el colonialismo interno urbano.

Otro aspecto que se quiere formalizar son los símbolos autonómicos del departamento, como la bandera rojo punzó y verde esmeralda, el Himno a La Paz, la Tea de la Libertad, el Alimaña, el Choqueyapu, la Kantuta Roja, la Proclama de la Junta Tuitiva, la Chola Paceña y la Apacheta. También excluyeron a la wiphala. Hay que recordar que este símbolo fue gestado en Chuqiyapu marka por la juventud aymara y quechua indianista y katarista de los 80, quienes además iniciaron la celebración del Año Nuevo andino en Tiwanaku. ¿Por qué se quiere ignorar esta experiencia histórica simbólica?

¿Por qué simbolizar a la chola paceña, si su vestido fue impuesto por la colonización española? El vestir de la chola antigua, que se recrea hoy en las entradas folklóricas, es el atuendo de la chola patrona. Hoy las hijas de las cholas ya no usan ese vestir, porque saben que a pesar de la promoción de gente que aprendió a lucrar de esta actividad, siguen racializados y discriminados, y por lo tanto hay que dejar de usar ese vestido. Entonces, ¿para qué insistir en la chola como simbología?

No sé a quién se le ocurrió colocar a la Apacheta como representación paceña. ¿A qué apacheta se refiere? Es obvio que el Apu Jilllimani achachila debería ser nuestro gran símbolo; pero se optó por no hacerlo.

La Carta debería tener alguna consideración histórica mencionando a los grandes precursores de las ciudades de Chuqiyapu marka y La Paz, como Julián Apaza, Bartolina Sisa o Feliciano Espinoza, aquel aymara urbano de San Pedro que inició la lucha contra el sistema hacendatario y que luego fue reemplazado por Pablo Zarate Willka a fines del siglo XIX. ¿Por qué está ausente la lucha por las escuelas indígenas urbanas de Eduardo Leandro Nina Quispe de los años 20 ¿Cómo no reconocer a Santos Marka T’ula que vivió años en la ciudad buscando el reconocimiento de los derechos básicos de los indios aymaras y quechuas?

En el artículo 5, parágrafo II, se dice: “El castellano y el aymara son los idiomas oficiales del Municipio de Nuestra Señora de La Paz”. ¿Pero sólo el aymara? Chuqiyapu marka aglutinaba también a comunidades quechuas y hasta ahora existen nombres de barrios como Munaypata que es quechua; entonces, ¿por qué sólo lo aymara?

En los días de celebración oficial del 16 de julio nadie hizo uso de la palabra en el idioma aymara, como tampoco aparece escrito en la Carta Orgánica, ¿hay vergüenza de hacerlo? o ¿no se sabe o ya no se quiere saber del aymara? Khithinakatixa aymara saphita juttanxa, janiwa ukhamaki unch’uksnati aka jan wali lup’iwinaka, jan kusa irnaqawinakxa. Ma jach’a tataruwa jiskt’xa, kunatsa ukhama sasina. Jupax situwa, anuq’uxtaña jaqinakawa ukham luranukuski, situwa. Wakisispawa, walja kullakana, jilatanaka jiwasan lu’piwinakasampi qillqt’sna, ukhamatakpuniwa jiwasan amtasaxa ist’ataspaxa, ¿janich ukhamaxa?