Voces

Thursday 25 Apr 2024 | Actualizado a 09:16 AM

¿Y los aliados?

¿Evo Morales tiene verdaderos aliados o son socios que responden a ciertos intereses?

/ 30 de diciembre de 2012 / 04:07

El Gobierno tenía prevista la presencia de “varios” presidentes y jefes de Estado en los festejos del solsticio de verano, evento de vital importancia para el Ejecutivo y los pueblos indígenas del mundo. A los actos no llegó ninguno, incluso pese a que se confirmó su asistencia, por ejemplo, de Rafael Correa, aliado de Evo Morales.

¿Cómo tomó el Mandatario boliviano ese plantón? Pues con molestia, y se notó el 21 de diciembre, cuando se tenía previsto, según agenda oficial, discursos y actos junto a los ilustres visitantes a la Isla del Sol. Ese día, Morales emplazó a terminar con el capitalismo y dictó diez mandamientos que pretenden acabar con el modelo occidental y valorizar el socialismo y la defensa de la Madre Tierra.  Con paños fríos, es momento de lanzar una interrogante. ¿Evo Morales tiene verdaderos aliados o son simplemente socios que sólo responden a intereses políticos y económicos?

Digo esto porque el Gobierno organizó un evento —al que destinó un millón de dólares— de ‘limpia espiritual’ con un gran significado para los pueblos indígenas donde pensaba contar con la presencia de sus aliados, o por lo menos que ellos manden a autoridades jerárquicas. Como punto aparte destaco la organización, que tuvo algunos mínimos reparos, pero en conclusión se vivió una gran fiesta donde se preparó un acto especial que sirvió para emitir un mensaje de paz y unidad.

Nadie explicó la inasistencia de los invitados. Rafael Correa, mediante su embajador en La Paz, Ricardo Ulcuango, confirmó su participación. Cristina Fernández, mandataria argentina, delegó a su vicepresidente Amado Boudou para que participe de los actos. Este último incluso tenía una agenda de llegada al aeropuerto de El Alto, sin embargo, por razones “de agenda” no llegó a Bolivia.

Se comprende que Nicolás Maduro, vicepresidente de Venezuela, no haya asistido al solsticio por el estado de salud del mandatario Hugo Chávez.  El único representante de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), bloque al que pertenece Bolivia,  fue el vicepresidente de Nicaragua, Moisés Halleslevens, quien trajo un mensaje de unidad de Daniel Ortega. 

El canciller David Choquehuanca dijo que su despacho envió invitaciones a “todos los mandatarios del mundo”. Y con semejante mensaje por lo menos se esperaba —al menos el Gobierno se expresó así— la asistencia de dignatarios de la región. Bueno, con este plantón es hora de revisar para qué tipo de intereses están los aliados del Gobierno. Es claro que para eventos de trascendental importancia no lo son.

Temas Relacionados

Comparte y opina:

Luis Revilla: El wallaq’e se prepara con un pescado pequeño y gordito

Cuando tiene la oportunidad de escaparse del ruido, el Alcalde viaja al lago Titicaca y a los Yungas para distraerse. Su plato preferido es el chairo.

/ 7 de julio de 2013 / 04:03

Explica que el edificio de la Alcaldía de La Paz es una copia de la municipalidad de París. Mientras pasea por los salones del Palacio Consistorial, lamenta la falta de tiempo para agilizar su gestión pública. No es excusa —indica—, pero ésa es una de sus dificultades. Es fanático del fútbol y con orgullo dice que es de The Strongest. De niño admiraba al golero naturalizado Luis Galarza y por esta figura deportiva se convirtió en arquero. Para escapar del ruido recomienda visitar el lago Titicaca y Yungas.

Respira hondo, sonríe y junta sus manos como haciendo una oración. Se concentra y entre risas dice sentirse un alumno ante la entrevista. Así es, así nos hemos propuesto. Luis Revilla recuerda tiempos de colegio, hace un repaso a la historia paceña y también habla de política y su vida.

Dice que no era corcho, pero aclara que tampoco era un mal estudiante. Tiene buen diente, reconoce, y reivindica el chairo como el mejor plato paceño. Cae en la trampa, admite no conocer el ingrediente principal del wallaq’e, el qarachi, aunque dice que esa sopa se hace con un “pescado pequeño y gordito”. Atigrado de corazón, eso no lo duda, y su canción preferida es el tango Illimani (Néstor Portocarrero). Suspira.

Del colegio recuerda mucho. Le gustaba su profesora de Inglés y su primer beso fue con una chica llamada Iris. Su primer trago, en su graduación. Tropieza al no saber el segundo apellido de Pedro Domingo Murillo.

Reniega un poco: unas tostadas estaban en la mesa de la entrevista. Después del primer sorbo de su café con leche, exige una marraqueta, que usualmente compra en la calle Juan de la Riva. Le vuelve el semblante agradable.   Afirma que Evo Morales es un líder indígena indiscutible y reconoce que no tiene mucho contacto con Juan del Granado, por las diferentes funciones que ambos cumplen.

¿Y cómo anda de amores? Al final, abre más dudas sobre una supuesta relación con la presentadora de televisión y exmodelo Maricruz Rivera. Admite que habló con ella la noche antes del día de la entrevista, viernes, y al ser preguntado sobre si conquistó su corazón, calla y ter-mina la charla.        

— ¿Le han hecho alguna vez ping pong en una entrevista?

— Alguna vez, hermano.

— Esto va a parecer un examen. Vamos a probar su habilidad…

— A ver, un examen oral.

— ¿Qué paisaje paceño recuerda de su infancia?

— El tobogán enorme que había en el parque de los monos; enorme, ya no hay, de fierro…

— ¿Con qué se deslizaba?

— Con saquillos de yute café, era increíble, era fierro y si te enganchabas estabas frito.

— ¿Una canción paceña?

— El tango Illimani, a mi mamá le gusta mucho el tango.

— Una comida…

— Un buen chairo…

— ¿Dónde?

— En casa o en el “Merlan” (mercado Lanza).

— ¿Sabe prepararlo?

— No, no sé cocinar, pero mi madre cocina muy rico el chairo.

— Un personaje paceño…

— Andrés de Santa Cruz.

— Un dibujo animado…

— No es paceño, la Pantera Rosa.

— ¿Por qué?

— Porque tiene un humor particular, distinto, un poco negro.

— ¿A qué profesor detestaba en la escuela?

— No recuerdo detestar a ningún profesor.

— ¿Qué materia no le gustaba?

— Física.

— ¿Por qué?

— Nunca fui afecto a las materias exactas.

— La profesora que le gustaba…

— La de Inglés; ellas siempre son bonitas, ¿por qué será?

— ¿Era corcho?

— Nunca tuve desquites en Matemáticas o Física, pero si tenía excelentes notas en Historia, Ciencias Naturales; siempre fui más inclinado a las ciencias humanas. No era un wasquiri, nunca me aplacé ni tuve desquites.

— Su primer beso a los…

— Cuando estaba en colegio, pero  no era una chica de mi colegio…

— ¿Quién era?

— Una chica que se llama Iris.

— ¿Su primer trago?

— En la promoción, una cerveza, para festejar la graduación.

— Complete el lema: Los discordes en concordia…

— En paz y amor se juntaron y pueblo de paz fundaron, para perpetua memoria. Es el lema del escudo de La Paz. 

— En el escudo de La Paz, el león está a la izquierda, ¿cierto?

— No, derecha. (El león se encuentra a la izquierda).

— El segundo apellido de Pedro Domingo Murillo…

— No lo recuerdo, por alguna razón no lo recuerdo. (El segundo apellido de Murillo es Carrasco).  

— Dicen que el monumento de la plaza Murillo es el de un torero español…

— Falso, no es verdad. Ésa es una vil mentira. 

— ¿Quién cree que fue el mejor alcalde de La Paz?

— Difícil, varios, cada uno en su tiempo…

— ¿Los puede citar?

— (Armando) Escóbar Uría, dicen que era un hombre trabajador; Mario Mercado y Juan del Granado en el último tiempo, sin ninguna duda. 

— ¿Le suena La tía Julia y el escribidor?

— Sí, un libro de Mario Vargas Llosa. 

— ¿Sabía que el ‘escribidor’ estaba inspirado en Raúl Salmón de la Barra?

— No lo sabía, cada día se aprende una cosa nueva.  

— ¿Dónde queda la calle Javier del Granado?

— Es una avenida en Achumani.

— ¿Dónde se come el mejor fricasé en La Paz?

— En las Rieles de la Buenos Aires o en el Rincón Taraco de la avenida Tejada Sorzano; chicharrón, en Los Adobes de Irpavi, para mi gusto.

— ¿Adónde, en las provincias, viaja usualmente?

— No muy lejos, me gustaría ir más lejos, pero (voy) al lago Titicaca, a los Yungas o Río Abajo.

— ¿Es devoto de la Virgen de Copacabana?

— Sí, creo en ella.

— ¿Cuándo fue a rezarle la última vez?

— No rezo mucho, pero cada vez que voy a Copacabana le prendo velas.

— ¿Cuál es la extensión del Puente de las Américas?

— Unos 200 metros.

— ¿A cuántos metros sobre el nivel del mar está Coroico?

— Calculo que estará a 2.000 metros sobre el nivel del mar, o quizá un poco más abajo.

— ¿San Buenaventura produce ya azúcar?

— No, aún no.

— ¿El presupuesto 2013 de la Alcaldía de La Paz?

— 1.900 millones de bolivianos.

— Tres obras estrella de 2013…

— El La Paz Bus, Barrios de Verdad y nuevos puentes para la ciudad.

— Alfonso Zabala es…

— Un compositor afroboliviano.

— Jaime Saenz es…

— Poeta y escritor paceño.

— Imágenes paceñas lo escribió…

— Jaime Saenz Guzmán.

— ¿Luis Iriondo jugó en Bolívar?

— No, en el poderoso Tigre.

— Ramiro Castillo nació en…

— Coripata.

— ¿Por qué stronguista y no bolivarista?

— Es una tradición familiar…

— ¿Iba a los partidos del Tigre?

— Iba con mi padre, a la curva sur.

— ¿Algún jugador que recuerde?

— Luis Galarza.

— ¿Con qué pescado es rico el wallaq’e?

— No lo sé, comí wallaq’e y es un pescadito pequeño y gordito, pero no recuerdo qué se llama. (Se prepara el wallaq’e con el qarachi). 

— ¿Dónde compra marraqueta?

— En la Juan de la Riva, frente a la Facultad de Derecho.

— En tres palabras, el paceño es…

— Trabajador, solidario y justiciero.

— ¿Leyó La Política de Aristóteles?

— En la universidad, hace años.

— ¿Se considera un animal político?

— No, pero me considero alguien que admira la política. Ser un animal político es ser alguien que podría dejar todo por la política, incluso vender a su madre.

— ¿Sigue cabreado?

— Sí, de alguna manera…

— ¿Por qué?

— Por el desperdicio de recursos, de tiempo, de oportunidades que tiene el país. Eso no me gusta.

— ¿Cada cuánto tiempo habla con Juan del Granado?

— No sé, hay semanas que no hablamos y hay otras veces que hablamos dos o tres veces en una semana, dependiendo, él es el principal dirigente del Movimiento Sin Miedo (MSM) y yo el segundo. Así que hay cosas que tenemos que conversar, pero hay veces que no conversamos por mucho tiempo.

— ¿Cuánto lo conoce? ¿Mucho, poco, nada?

— Mucho. Lo conozco desde 1992, cerca de 20 años.

— Después de Juan del Granado, ¿el líder es Revilla?

— Lo dirá la gente.

— ¿Cómo concibe a Evo Morales?

— Un líder indiscutible de nuestros pueblos originarios, en lo político; y en lo personal, creo que es un hombre que tiene profundos valores, pero es un hombre terriblemente desconfiado.

— ¿Así se puede coordinar labores con él?

— Creo que el Gobierno ha madurado un poquito y entendió que no necesita perseguir a los que piensan distinto. Se puede trabajar con gente que piensa distinto para el beneficio de un pueblo.

— ¿Es partícipe de un análisis de reencauzar una alianza con el MAS?

— No, porque asumimos que nuestras diferencias con el Movimiento Al Socialismo (MAS) son importantes para la democracia, no necesitamos estar todos en la misma bolsa para hacer cosas, así tengamos algunas coincidencias y muchas diferencias. Si hay algo en que no creemos en el MSM es en los partidos únicos o que todos tengamos que pensar de una misma manera. Nuestro papel es representar a quienes desde un campo progresista, de izquierda,     no comparten con el MAS.

— ¿La ideología de izquierda es la mejor alternativa en los gobiernos?

— La izquierda es una concepción política y filosófica, y con esa concepción la izquierda cometió enormes derrotas, pero con esa misma concepción hay muchos países que lograron superar brechas de desigualdad. Entonces, no es un problema de que la izquierda sea la salvación, es un problema de quién ejerce poder en el Estado bajo preceptos  de izquierda; no es muy de izquierda perseguir opositores. No basta autocalificarse de izquierda.    

— ¿Cómo concibe a Rubén Costas?

— Lo conozco, tuve varias oportunidades de tratar con él. Como persona tengo un buen concepto de él. Tengo más dudas respecto a sus  convicciones políticas. 

— Samuel Doria Medina…

— Es un empresario exitoso que desde hace tiempo quiere ocupar un espacio político importante.

— ¿Era inevitable hacer una alianza con Unidad Nacional (UN) en el Concejo Municipal de La Paz?

— No era inevitable, pero necesario…

— ¿Cómo explica eso?

— Era mejor así, porque el trabajar juntos en beneficio de la gestión y no tener que estar enfrentándonos nos da más tiempo para ocuparnos de la gestión misma y no de los conflictos políticos.

— ¿Es Omar Rocha la piedra en el zapato?

— No, no veo a Rocha como la piedra en el zapato; él tiene sus propios objetivos y sus propias perspectivas.

— ¿Le suena Maricruz Rivera?

— Me suena Maricruz.

— ¿La conoce?

— Sí.

— ¿Cuándo habló la última vez con ella?

— Anoche (jueves).

— ¿Qué le dijo?

— Le pregunte cómo estaba.

Perfil

Nombre: Luis Revilla  Herrero

Nació: 22-04-1972

Profesión: Abogado

Cargo: Alcalde de la ciudad de     La Paz

Carrera

Abogado de profesión. Estudió en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA). Se unió al Movimiento Sin Miedo (MSM) en la década del 90. Cuando Juan del Granado fue electo alcalde de La Paz, Revilla fue elegido concejal. Luego fue presidente del Concejo Municipal y en 2010 venció a Elizabeth Salguero, candidata del Movimiento Al Socialismo (MAS), en las urnas. Hoy es el burgomaestre paceño.

Comparte y opina:

Luis Revilla: El wallaq’e se prepara con un pescado pequeño y gordito

Cuando tiene la oportunidad de escaparse del ruido, el Alcalde viaja al lago Titicaca y a los Yungas para distraerse. Su plato preferido es el chairo.

/ 7 de julio de 2013 / 04:03

Explica que el edificio de la Alcaldía de La Paz es una copia de la municipalidad de París. Mientras pasea por los salones del Palacio Consistorial, lamenta la falta de tiempo para agilizar su gestión pública. No es excusa —indica—, pero ésa es una de sus dificultades. Es fanático del fútbol y con orgullo dice que es de The Strongest. De niño admiraba al golero naturalizado Luis Galarza y por esta figura deportiva se convirtió en arquero. Para escapar del ruido recomienda visitar el lago Titicaca y Yungas.

Respira hondo, sonríe y junta sus manos como haciendo una oración. Se concentra y entre risas dice sentirse un alumno ante la entrevista. Así es, así nos hemos propuesto. Luis Revilla recuerda tiempos de colegio, hace un repaso a la historia paceña y también habla de política y su vida.

Dice que no era corcho, pero aclara que tampoco era un mal estudiante. Tiene buen diente, reconoce, y reivindica el chairo como el mejor plato paceño. Cae en la trampa, admite no conocer el ingrediente principal del wallaq’e, el qarachi, aunque dice que esa sopa se hace con un “pescado pequeño y gordito”. Atigrado de corazón, eso no lo duda, y su canción preferida es el tango Illimani (Néstor Portocarrero). Suspira.

Del colegio recuerda mucho. Le gustaba su profesora de Inglés y su primer beso fue con una chica llamada Iris. Su primer trago, en su graduación. Tropieza al no saber el segundo apellido de Pedro Domingo Murillo.

Reniega un poco: unas tostadas estaban en la mesa de la entrevista. Después del primer sorbo de su café con leche, exige una marraqueta, que usualmente compra en la calle Juan de la Riva. Le vuelve el semblante agradable.   Afirma que Evo Morales es un líder indígena indiscutible y reconoce que no tiene mucho contacto con Juan del Granado, por las diferentes funciones que ambos cumplen.

¿Y cómo anda de amores? Al final, abre más dudas sobre una supuesta relación con la presentadora de televisión y exmodelo Maricruz Rivera. Admite que habló con ella la noche antes del día de la entrevista, viernes, y al ser preguntado sobre si conquistó su corazón, calla y ter-mina la charla.        

— ¿Le han hecho alguna vez ping pong en una entrevista?

— Alguna vez, hermano.

— Esto va a parecer un examen. Vamos a probar su habilidad…

— A ver, un examen oral.

— ¿Qué paisaje paceño recuerda de su infancia?

— El tobogán enorme que había en el parque de los monos; enorme, ya no hay, de fierro…

— ¿Con qué se deslizaba?

— Con saquillos de yute café, era increíble, era fierro y si te enganchabas estabas frito.

— ¿Una canción paceña?

— El tango Illimani, a mi mamá le gusta mucho el tango.

— Una comida…

— Un buen chairo…

— ¿Dónde?

— En casa o en el “Merlan” (mercado Lanza).

— ¿Sabe prepararlo?

— No, no sé cocinar, pero mi madre cocina muy rico el chairo.

— Un personaje paceño…

— Andrés de Santa Cruz.

— Un dibujo animado…

— No es paceño, la Pantera Rosa.

— ¿Por qué?

— Porque tiene un humor particular, distinto, un poco negro.

— ¿A qué profesor detestaba en la escuela?

— No recuerdo detestar a ningún profesor.

— ¿Qué materia no le gustaba?

— Física.

— ¿Por qué?

— Nunca fui afecto a las materias exactas.

— La profesora que le gustaba…

— La de Inglés; ellas siempre son bonitas, ¿por qué será?

— ¿Era corcho?

— Nunca tuve desquites en Matemáticas o Física, pero si tenía excelentes notas en Historia, Ciencias Naturales; siempre fui más inclinado a las ciencias humanas. No era un wasquiri, nunca me aplacé ni tuve desquites.

— Su primer beso a los…

— Cuando estaba en colegio, pero  no era una chica de mi colegio…

— ¿Quién era?

— Una chica que se llama Iris.

— ¿Su primer trago?

— En la promoción, una cerveza, para festejar la graduación.

— Complete el lema: Los discordes en concordia…

— En paz y amor se juntaron y pueblo de paz fundaron, para perpetua memoria. Es el lema del escudo de La Paz. 

— En el escudo de La Paz, el león está a la izquierda, ¿cierto?

— No, derecha. (El león se encuentra a la izquierda).

— El segundo apellido de Pedro Domingo Murillo…

— No lo recuerdo, por alguna razón no lo recuerdo. (El segundo apellido de Murillo es Carrasco).  

— Dicen que el monumento de la plaza Murillo es el de un torero español…

— Falso, no es verdad. Ésa es una vil mentira. 

— ¿Quién cree que fue el mejor alcalde de La Paz?

— Difícil, varios, cada uno en su tiempo…

— ¿Los puede citar?

— (Armando) Escóbar Uría, dicen que era un hombre trabajador; Mario Mercado y Juan del Granado en el último tiempo, sin ninguna duda. 

— ¿Le suena La tía Julia y el escribidor?

— Sí, un libro de Mario Vargas Llosa. 

— ¿Sabía que el ‘escribidor’ estaba inspirado en Raúl Salmón de la Barra?

— No lo sabía, cada día se aprende una cosa nueva.  

— ¿Dónde queda la calle Javier del Granado?

— Es una avenida en Achumani.

— ¿Dónde se come el mejor fricasé en La Paz?

— En las Rieles de la Buenos Aires o en el Rincón Taraco de la avenida Tejada Sorzano; chicharrón, en Los Adobes de Irpavi, para mi gusto.

— ¿Adónde, en las provincias, viaja usualmente?

— No muy lejos, me gustaría ir más lejos, pero (voy) al lago Titicaca, a los Yungas o Río Abajo.

— ¿Es devoto de la Virgen de Copacabana?

— Sí, creo en ella.

— ¿Cuándo fue a rezarle la última vez?

— No rezo mucho, pero cada vez que voy a Copacabana le prendo velas.

— ¿Cuál es la extensión del Puente de las Américas?

— Unos 200 metros.

— ¿A cuántos metros sobre el nivel del mar está Coroico?

— Calculo que estará a 2.000 metros sobre el nivel del mar, o quizá un poco más abajo.

— ¿San Buenaventura produce ya azúcar?

— No, aún no.

— ¿El presupuesto 2013 de la Alcaldía de La Paz?

— 1.900 millones de bolivianos.

— Tres obras estrella de 2013…

— El La Paz Bus, Barrios de Verdad y nuevos puentes para la ciudad.

— Alfonso Zabala es…

— Un compositor afroboliviano.

— Jaime Saenz es…

— Poeta y escritor paceño.

— Imágenes paceñas lo escribió…

— Jaime Saenz Guzmán.

— ¿Luis Iriondo jugó en Bolívar?

— No, en el poderoso Tigre.

— Ramiro Castillo nació en…

— Coripata.

— ¿Por qué stronguista y no bolivarista?

— Es una tradición familiar…

— ¿Iba a los partidos del Tigre?

— Iba con mi padre, a la curva sur.

— ¿Algún jugador que recuerde?

— Luis Galarza.

— ¿Con qué pescado es rico el wallaq’e?

— No lo sé, comí wallaq’e y es un pescadito pequeño y gordito, pero no recuerdo qué se llama. (Se prepara el wallaq’e con el qarachi). 

— ¿Dónde compra marraqueta?

— En la Juan de la Riva, frente a la Facultad de Derecho.

— En tres palabras, el paceño es…

— Trabajador, solidario y justiciero.

— ¿Leyó La Política de Aristóteles?

— En la universidad, hace años.

— ¿Se considera un animal político?

— No, pero me considero alguien que admira la política. Ser un animal político es ser alguien que podría dejar todo por la política, incluso vender a su madre.

— ¿Sigue cabreado?

— Sí, de alguna manera…

— ¿Por qué?

— Por el desperdicio de recursos, de tiempo, de oportunidades que tiene el país. Eso no me gusta.

— ¿Cada cuánto tiempo habla con Juan del Granado?

— No sé, hay semanas que no hablamos y hay otras veces que hablamos dos o tres veces en una semana, dependiendo, él es el principal dirigente del Movimiento Sin Miedo (MSM) y yo el segundo. Así que hay cosas que tenemos que conversar, pero hay veces que no conversamos por mucho tiempo.

— ¿Cuánto lo conoce? ¿Mucho, poco, nada?

— Mucho. Lo conozco desde 1992, cerca de 20 años.

— Después de Juan del Granado, ¿el líder es Revilla?

— Lo dirá la gente.

— ¿Cómo concibe a Evo Morales?

— Un líder indiscutible de nuestros pueblos originarios, en lo político; y en lo personal, creo que es un hombre que tiene profundos valores, pero es un hombre terriblemente desconfiado.

— ¿Así se puede coordinar labores con él?

— Creo que el Gobierno ha madurado un poquito y entendió que no necesita perseguir a los que piensan distinto. Se puede trabajar con gente que piensa distinto para el beneficio de un pueblo.

— ¿Es partícipe de un análisis de reencauzar una alianza con el MAS?

— No, porque asumimos que nuestras diferencias con el Movimiento Al Socialismo (MAS) son importantes para la democracia, no necesitamos estar todos en la misma bolsa para hacer cosas, así tengamos algunas coincidencias y muchas diferencias. Si hay algo en que no creemos en el MSM es en los partidos únicos o que todos tengamos que pensar de una misma manera. Nuestro papel es representar a quienes desde un campo progresista, de izquierda,     no comparten con el MAS.

— ¿La ideología de izquierda es la mejor alternativa en los gobiernos?

— La izquierda es una concepción política y filosófica, y con esa concepción la izquierda cometió enormes derrotas, pero con esa misma concepción hay muchos países que lograron superar brechas de desigualdad. Entonces, no es un problema de que la izquierda sea la salvación, es un problema de quién ejerce poder en el Estado bajo preceptos  de izquierda; no es muy de izquierda perseguir opositores. No basta autocalificarse de izquierda.    

— ¿Cómo concibe a Rubén Costas?

— Lo conozco, tuve varias oportunidades de tratar con él. Como persona tengo un buen concepto de él. Tengo más dudas respecto a sus  convicciones políticas. 

— Samuel Doria Medina…

— Es un empresario exitoso que desde hace tiempo quiere ocupar un espacio político importante.

— ¿Era inevitable hacer una alianza con Unidad Nacional (UN) en el Concejo Municipal de La Paz?

— No era inevitable, pero necesario…

— ¿Cómo explica eso?

— Era mejor así, porque el trabajar juntos en beneficio de la gestión y no tener que estar enfrentándonos nos da más tiempo para ocuparnos de la gestión misma y no de los conflictos políticos.

— ¿Es Omar Rocha la piedra en el zapato?

— No, no veo a Rocha como la piedra en el zapato; él tiene sus propios objetivos y sus propias perspectivas.

— ¿Le suena Maricruz Rivera?

— Me suena Maricruz.

— ¿La conoce?

— Sí.

— ¿Cuándo habló la última vez con ella?

— Anoche (jueves).

— ¿Qué le dijo?

— Le pregunte cómo estaba.

Perfil

Nombre: Luis Revilla  Herrero

Nació: 22-04-1972

Profesión: Abogado

Cargo: Alcalde de la ciudad de     La Paz

Carrera

Abogado de profesión. Estudió en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA). Se unió al Movimiento Sin Miedo (MSM) en la década del 90. Cuando Juan del Granado fue electo alcalde de La Paz, Revilla fue elegido concejal. Luego fue presidente del Concejo Municipal y en 2010 venció a Elizabeth Salguero, candidata del Movimiento Al Socialismo (MAS), en las urnas. Hoy es el burgomaestre paceño.

Comparte y opina:

Rebeca Delgado: Creemos en el liderazgo de Evo; la cúpula que lo rodea es la inorgánica

Quiere terminar su mandato como diputada del MAS hasta 2014 y subraya que su error fue cuestionar al entorno que rodea al presidente Evo Morales.

/ 23 de junio de 2013 / 04:03

Recuerda que conoció a Evo Morales en la década de los 90, cuando defendió a los cocaleros. Hoy, señala que el Presidente mantiene su ideología y lucha política; sin embargo, denuncia que su entorno lo ha aislado de los sectores sociales y que le transmite información tergiversada e insuficiente. Actualmente atraviesa un momento difícil en el Movimiento Al Socialismo (MAS): perdió la confianza del Jefe del Estado y se encuentra enfrentada con el vicepresidente Álvaro García Linera.

Hace ocho meses era una de las personas más cercanas al presidente Evo Morales y con más poder en el Movimiento Al Socialismo (MAS). Hoy, todo esto cambió. Rebeca Delgado asegura que los roces y diferencias con el vicepresidente Álvaro García Linera y el ministro de Gobierno, Carlos Romero, por observar el proyecto de Ley de Extinción de Dominio de Bienes a favor del Estado, en noviembre de 2012, le pasaron factura. 

La diputada se reunió el miércoles 12 con su bancada y el Vicepresidente para limar asperezas; la intención quedó nula. Una semana después la acusaron de tráfico de influencias en el Órgano Judicial y anunció juicios. Se acercó a disidentes del oficialismo, lo que también le trajo críticas. Eso sí, afirma que continúa confiando en el liderazgo de Morales y que los “inorgánicos” están en la cúpula que lo rodea.   

— ¿Éste es el momento más difícil en su carrera política?

— No, el más difícil fue lo que viví en La Glorieta (Sucre), en 2007, en un cuartel militar donde aprobamos en grande la Constitución. O sea, para mí, el momento político más fuerte y de prueba de compromiso político fue en la Asamblea Constituyente.

— ¿Cómo califica este momento?

— Lo califico como un conflicto innecesario, desproporcionado, que no debía haberse generado porque lo que se necesitaba era que se entienda lo que queríamos hacer varios asambleístas, exconstituyentes, dirigentes de organizaciones. Básicamente, era fortalecer la democracia interna en el MAS; aunque eso no se entendió.

— ¿Cómo ingresó al MAS?

— Ingresé en 2006. Siempre me de-sempeñé en el ámbito institucional. Son más de 15 años como servidora pública: trabajé en derechos humanos, fui juez, defensora pública, vocal de la ex Corte Departamental Electoral de Cochabamba, funcionaria de la Defensoría del Pueblo, es decir, mi trabajo siempre fue institucional y académico. A finales de 2005, organizaciones de mujeres plantearon mi nombre para ir como candidata para la Asamblea Constituyente. Mi reunión con el MAS fue en la Casa Campestre de Cochabamba; como candidata, la invitación que me hizo Evo Morales fue a través de estas organizaciones de mujeres.

— ¿Desde cuándo conoce a Evo Morales?

— Lo conocía cuando era dirigente cocalero en la década de los 90. Le cuento: una persona camuflada del Ministerio del Interior no quería que lo visite cuando (Morales) estaba detenido; le expliqué que él tenía derechos y logré verlo. No sé si esto lo supo algún día el Presidente, era un tiempo en el que no había defensa para los cocaleros, eran tiempos en los que todo era manejado por Carlos Sánchez Berzaín (exministro de Gonzalo Sánchez de Lozada), eran situaciones muy injustas para los cocaleros; incluso les fabricaban pruebas para vincularlos en casos de narcotráfico o de terrorismo. Así lo conocí a Morales y, por supuesto, mi admiración (hacia él fue) desde ese momento.  

— ¿Defendió a Evo Morales?

— Sí, cuando era coordinadora de Defensa Pública y me decían que era defensora de los cocaleros.

— ¿Constata diferencias entre el Evo Morales dirigente y el ahora Evo Morales presidente?

— La persona de lucha sigue siendo la misma: esa con ideología, con lucha política, que sufrió injusticias del sistema. En esencia, Evo Morales sigue siendo el mismo; sin embargo, creo que las cosas cambiaron cuando tuvo una centralización excesiva del poder. Fue cuando me referí a esa cúpula (que lo rodea), porque ahí fue cuando el Presidente ya no tuvo la misma relación de antes. Por ejemplo, diputados de la anterior gestión me comentaron que a sola llamada telefónica podían reunirse con él, y hay dirigentes que me dicen lo mismo; pero eso cambió, por seguridad me parece bien, aunque en determinado momento parece que está cercado, ya no es fácil acceder a él.

— ¿Y cuándo conoció al vicepresidente Álvaro García Linera?

— Cuando era candidata a diputada (2009). Lo conocí mucho menos, solamente sabía que tenía un grupo que era Comuna y que tenía mucha producción intelectual. Leía lo que escribía él y Raúl Prada (exconstituyente por el MAS). También fui defensora pública de todos los acusados del Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK) en Cochabamba y, así, conocía de la existencia de García. 

— ¿Desde cuándo tuvo una estrecha relación con García?

— Trabajé de manera cercana con él cuando era presidenta de la Cámara de Diputados (2012), después siempre fue una relación de trabajo, no cercana. El año pasado sí coordinaba con él todos los días…

— ¿Notó un cambio de actitud en el Vicepresidente?

— Yo creo que sigue siendo el mismo; seguramente donde hemos chocado es que yo no soy una persona transable y eso le debió incomodar…

— ¿El Vicepresidente trató de transar algún asunto con usted?

— Cuando creí que había una cosa que estaba mal, me plantó, como lo hice con el proyecto de Ley de Extinción de Dominio de Bienes a favor del Estado; me planté nomás y eso le debió incomodar…

— ¿Empezó ahí el conflicto?

— Sí, ahí empezó, porque antes teníamos una relación muy cordial y coordinaba todo, todas las leyes que entraban (a la Cámara Baja) las coordinaba con él; las observaba y él me decía cómo modificarlas. Las diferencias existieron cuando las cosas que se informaban parece que no llegaban tal cual como sucedían al presidente Morales; y él se enojó por mi actitud de dar a conocer la inconstitucionalidad del proyecto de Ley de Extinción de Dominio, pero lo hice porque era la única salida, si no me tenía que callar.

— ¿Hubo presiones para aprobar ese proyecto de ley?

— El Vicepresidente me llamó noche antes del feriado de Todos Santos (1 de noviembre) y me dijo: “Convoque (a sesión en la Cámara de Diputados) y antes del feriado aprueban y se van”. Le dije que no iba a aprobar la ley.

— ¿Tuvo siempre ese pensamiento crítico?

— Siempre tuve actitudes críticas, no sólo ahora. Cuando era juez no dejaba que me ordenen, incluso para liberar a algunas personas; fui siempre contestaría, nunca dejé que me presionen…

— ¿Su carácter no cambió?

— Mi carácter es el mismo, hay gente que me conoce y corrobora que siempre fui así. Nunca acepté manipulación política cuando era juez y cuando era defensora pública, también existía manipulación. No obedecía las instrucciones de Sánchez Berzaín cuando yo defendía a los cocaleros, entre ellos Evo Morales.

— Usted comenzó su carrera política cuando el MAS llegó al poder en 2006. ¿Cree que se están cumpliendo los lineamientos ideológicos y políticos del programa de gestión?

— Se han iniciado, eso es indudable. Lo importante fue la voluntad política de cambiar la Constitución, se ganó algo que en tantos años de vida republicana no se pudo hacer. En la oferta electoral habían cosas que se fueron cumpliendo, como la Asamblea Constituyente y la nacionalización de los hidrocarburos; pero siento que el debate constituyente no fue conocido y faltó compartirlo a muchas instancias, como al gabinete por ejemplo. Falta reorientar el debate constitucional y también debatir el Vivir Bien. Entonces tenemos que reorientar varias cosas, éste es el trabajo que quiero hacer…

— ¿Con el MAS o lejos del MAS?

— Por supuesto que con el MAS. Ahora el MAS ha dejado que otras personas se adueñen de esto (reorientar el proceso de cambio). Las cosas se construyen de abajo hacia arriba y las organizaciones sociales y el instrumento político deberían frenar a la gente que está usurpando el poder. Se debe promover el debate.

— Luego de estas diferencias, ¿logró hablar con el Presidente?

— Debí hablar dos veces con él después de esto, en reuniones de bancada; pero ya había una mala predisposición de parte del Jefe del Estado para entender algunas cosas. Ya no le llega información tal como debería llegarle, ahí hay cosas que se aumentan, cosas apresuradas…

— ¿Ese fue el último contacto con Evo Morales?

— Si, cuando era presidenta (de la Cámara Baja). Después ya como diputada de base, no tengo necesidad de coordinar con los jefes.

— ¿Los acercamientos que tuvo con disidentes del MAS, como Raúl Prada, tienen algún fin electoral?

— No, para nada. Empezamos esto hace cuatro semanas y para que no digan que estas reuniones son de conspiración, las hice públicas.

— ¿Quiénes están en ese grupo?

— La primera reunión fue en Achocalla (La Paz) y Raúl Prada, otros exconstituyentes, dirigentes sindicales de Santa Cruz, de la etnia de los mosetenes, asambleístas de la Cámara de Diputados. Hice esto público para evitar que llegue mal la información. Nuestra reunión fue pública y, a partir de ahí, hubo comunicaciones con Álex Contreras (exvocero gubernamental), Alejandro Almaraz (exviceministro); no hubo reuniones.

— ¿Comulga con el pensamiento de estos disidentes del MAS?

— Coincidimos en temas que son interesantes para el reforzamiento de la ideología política del MAS; entonces, decidimos reunirnos.

— ¿Lo hicieron?

— Estaba prevista la reunión para el anterior viernes (14 de junio), pero con todos los improperios y calificativos ya me desvinculé, no sé en qué quedaron. No considero traidoras a estas personas, se debería buscar un espacio para escucharlas.

— Raúl Prada convoca a hacer una ‘revolución en las calles’, ¿comparte esa posición?

— Desde el punto de vista ideológico, pero tendrá que hablar con él. Entiendo que hay que recuperar la movilización popular, comparto eso porque no surgimos de un grupo de élite, venimos de las organizaciones sociales.

— ¿En estas reuniones se habló de Evo Morales?

— Sí, (los disidentes) decían que creen en el liderazgo de Morales y que en el ámbito político —y le digo en los términos que se dijo— están enamorados del Presidente, pero también creemos que hay cosas que hay que reforzar por el bien del proceso.

— ¿Cómo puede acabar este gobierno si persisten estos conflictos?

— El presidente Evo Morales es el intelectual, yo que he trabajado con él confío mucho en su tino político. Él es quien tiene todo el tino político para continuar este proceso. Pero, lo que siento es que el Mandatario recibe insuficiente información y por eso los conflictos crecen, y eso daña al proceso de cambio y a la misma imagen del Presidente. Entonces, esa cúpula (que lo rodea) es la inorgánica, no nosotros, ellos (los de la cúpula) están dando mala información…

— ¿Quiénes conforman la cúpula?

— Lo dije y ahora se molestan, pero es el entorno del Presidente. Ellos son los inorgánicos, hacen las cosas como les parece, magnifican problemas y dan mala información al Jefe del Estado. Cuestioné a esa cúpula y se me cayó el mundo, sólo falta que se inventen que soy agente de la CIA.

— ¿Su futuro está en el MAS?

— Lo que veo es lo inmediato. Voy a terminar mi mandato dentro del MAS hasta fines de 2014. En ningún momento se pidió mi curul de asambleísta, sólamente hay voces intolerantes y apresuradas. Incluso señalan que quiero ser candidata para vicepresidente y eso es falso.

Perfil

Nombre: Rebeca Delgado Burgoa

Nació: 01-06-1966

Profesión: Abogada

Cargo: Diputada nacional

Carrera

Fue juez, parte de la representación del Defensor del Pueblo en Cochabamba y vocal de la ex Corte Departamental Electoral. En 2006 fue constituyente del MAS y en 2008, viceministra de Coordinación Gubernamental. Luego fue elegida diputada y en 2012 llegó a la Presidencia de la Cámara de Diputados.

Comparte y opina:

Rebeca Delgado: Creemos en el liderazgo de Evo; la cúpula que lo rodea es la inorgánica

Quiere terminar su mandato como diputada del MAS hasta 2014 y subraya que su error fue cuestionar al entorno que rodea al presidente Evo Morales.

/ 23 de junio de 2013 / 04:03

Recuerda que conoció a Evo Morales en la década de los 90, cuando defendió a los cocaleros. Hoy, señala que el Presidente mantiene su ideología y lucha política; sin embargo, denuncia que su entorno lo ha aislado de los sectores sociales y que le transmite información tergiversada e insuficiente. Actualmente atraviesa un momento difícil en el Movimiento Al Socialismo (MAS): perdió la confianza del Jefe del Estado y se encuentra enfrentada con el vicepresidente Álvaro García Linera.

Hace ocho meses era una de las personas más cercanas al presidente Evo Morales y con más poder en el Movimiento Al Socialismo (MAS). Hoy, todo esto cambió. Rebeca Delgado asegura que los roces y diferencias con el vicepresidente Álvaro García Linera y el ministro de Gobierno, Carlos Romero, por observar el proyecto de Ley de Extinción de Dominio de Bienes a favor del Estado, en noviembre de 2012, le pasaron factura. 

La diputada se reunió el miércoles 12 con su bancada y el Vicepresidente para limar asperezas; la intención quedó nula. Una semana después la acusaron de tráfico de influencias en el Órgano Judicial y anunció juicios. Se acercó a disidentes del oficialismo, lo que también le trajo críticas. Eso sí, afirma que continúa confiando en el liderazgo de Morales y que los “inorgánicos” están en la cúpula que lo rodea.   

— ¿Éste es el momento más difícil en su carrera política?

— No, el más difícil fue lo que viví en La Glorieta (Sucre), en 2007, en un cuartel militar donde aprobamos en grande la Constitución. O sea, para mí, el momento político más fuerte y de prueba de compromiso político fue en la Asamblea Constituyente.

— ¿Cómo califica este momento?

— Lo califico como un conflicto innecesario, desproporcionado, que no debía haberse generado porque lo que se necesitaba era que se entienda lo que queríamos hacer varios asambleístas, exconstituyentes, dirigentes de organizaciones. Básicamente, era fortalecer la democracia interna en el MAS; aunque eso no se entendió.

— ¿Cómo ingresó al MAS?

— Ingresé en 2006. Siempre me de-sempeñé en el ámbito institucional. Son más de 15 años como servidora pública: trabajé en derechos humanos, fui juez, defensora pública, vocal de la ex Corte Departamental Electoral de Cochabamba, funcionaria de la Defensoría del Pueblo, es decir, mi trabajo siempre fue institucional y académico. A finales de 2005, organizaciones de mujeres plantearon mi nombre para ir como candidata para la Asamblea Constituyente. Mi reunión con el MAS fue en la Casa Campestre de Cochabamba; como candidata, la invitación que me hizo Evo Morales fue a través de estas organizaciones de mujeres.

— ¿Desde cuándo conoce a Evo Morales?

— Lo conocía cuando era dirigente cocalero en la década de los 90. Le cuento: una persona camuflada del Ministerio del Interior no quería que lo visite cuando (Morales) estaba detenido; le expliqué que él tenía derechos y logré verlo. No sé si esto lo supo algún día el Presidente, era un tiempo en el que no había defensa para los cocaleros, eran tiempos en los que todo era manejado por Carlos Sánchez Berzaín (exministro de Gonzalo Sánchez de Lozada), eran situaciones muy injustas para los cocaleros; incluso les fabricaban pruebas para vincularlos en casos de narcotráfico o de terrorismo. Así lo conocí a Morales y, por supuesto, mi admiración (hacia él fue) desde ese momento.  

— ¿Defendió a Evo Morales?

— Sí, cuando era coordinadora de Defensa Pública y me decían que era defensora de los cocaleros.

— ¿Constata diferencias entre el Evo Morales dirigente y el ahora Evo Morales presidente?

— La persona de lucha sigue siendo la misma: esa con ideología, con lucha política, que sufrió injusticias del sistema. En esencia, Evo Morales sigue siendo el mismo; sin embargo, creo que las cosas cambiaron cuando tuvo una centralización excesiva del poder. Fue cuando me referí a esa cúpula (que lo rodea), porque ahí fue cuando el Presidente ya no tuvo la misma relación de antes. Por ejemplo, diputados de la anterior gestión me comentaron que a sola llamada telefónica podían reunirse con él, y hay dirigentes que me dicen lo mismo; pero eso cambió, por seguridad me parece bien, aunque en determinado momento parece que está cercado, ya no es fácil acceder a él.

— ¿Y cuándo conoció al vicepresidente Álvaro García Linera?

— Cuando era candidata a diputada (2009). Lo conocí mucho menos, solamente sabía que tenía un grupo que era Comuna y que tenía mucha producción intelectual. Leía lo que escribía él y Raúl Prada (exconstituyente por el MAS). También fui defensora pública de todos los acusados del Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK) en Cochabamba y, así, conocía de la existencia de García. 

— ¿Desde cuándo tuvo una estrecha relación con García?

— Trabajé de manera cercana con él cuando era presidenta de la Cámara de Diputados (2012), después siempre fue una relación de trabajo, no cercana. El año pasado sí coordinaba con él todos los días…

— ¿Notó un cambio de actitud en el Vicepresidente?

— Yo creo que sigue siendo el mismo; seguramente donde hemos chocado es que yo no soy una persona transable y eso le debió incomodar…

— ¿El Vicepresidente trató de transar algún asunto con usted?

— Cuando creí que había una cosa que estaba mal, me plantó, como lo hice con el proyecto de Ley de Extinción de Dominio de Bienes a favor del Estado; me planté nomás y eso le debió incomodar…

— ¿Empezó ahí el conflicto?

— Sí, ahí empezó, porque antes teníamos una relación muy cordial y coordinaba todo, todas las leyes que entraban (a la Cámara Baja) las coordinaba con él; las observaba y él me decía cómo modificarlas. Las diferencias existieron cuando las cosas que se informaban parece que no llegaban tal cual como sucedían al presidente Morales; y él se enojó por mi actitud de dar a conocer la inconstitucionalidad del proyecto de Ley de Extinción de Dominio, pero lo hice porque era la única salida, si no me tenía que callar.

— ¿Hubo presiones para aprobar ese proyecto de ley?

— El Vicepresidente me llamó noche antes del feriado de Todos Santos (1 de noviembre) y me dijo: “Convoque (a sesión en la Cámara de Diputados) y antes del feriado aprueban y se van”. Le dije que no iba a aprobar la ley.

— ¿Tuvo siempre ese pensamiento crítico?

— Siempre tuve actitudes críticas, no sólo ahora. Cuando era juez no dejaba que me ordenen, incluso para liberar a algunas personas; fui siempre contestaría, nunca dejé que me presionen…

— ¿Su carácter no cambió?

— Mi carácter es el mismo, hay gente que me conoce y corrobora que siempre fui así. Nunca acepté manipulación política cuando era juez y cuando era defensora pública, también existía manipulación. No obedecía las instrucciones de Sánchez Berzaín cuando yo defendía a los cocaleros, entre ellos Evo Morales.

— Usted comenzó su carrera política cuando el MAS llegó al poder en 2006. ¿Cree que se están cumpliendo los lineamientos ideológicos y políticos del programa de gestión?

— Se han iniciado, eso es indudable. Lo importante fue la voluntad política de cambiar la Constitución, se ganó algo que en tantos años de vida republicana no se pudo hacer. En la oferta electoral habían cosas que se fueron cumpliendo, como la Asamblea Constituyente y la nacionalización de los hidrocarburos; pero siento que el debate constituyente no fue conocido y faltó compartirlo a muchas instancias, como al gabinete por ejemplo. Falta reorientar el debate constitucional y también debatir el Vivir Bien. Entonces tenemos que reorientar varias cosas, éste es el trabajo que quiero hacer…

— ¿Con el MAS o lejos del MAS?

— Por supuesto que con el MAS. Ahora el MAS ha dejado que otras personas se adueñen de esto (reorientar el proceso de cambio). Las cosas se construyen de abajo hacia arriba y las organizaciones sociales y el instrumento político deberían frenar a la gente que está usurpando el poder. Se debe promover el debate.

— Luego de estas diferencias, ¿logró hablar con el Presidente?

— Debí hablar dos veces con él después de esto, en reuniones de bancada; pero ya había una mala predisposición de parte del Jefe del Estado para entender algunas cosas. Ya no le llega información tal como debería llegarle, ahí hay cosas que se aumentan, cosas apresuradas…

— ¿Ese fue el último contacto con Evo Morales?

— Si, cuando era presidenta (de la Cámara Baja). Después ya como diputada de base, no tengo necesidad de coordinar con los jefes.

— ¿Los acercamientos que tuvo con disidentes del MAS, como Raúl Prada, tienen algún fin electoral?

— No, para nada. Empezamos esto hace cuatro semanas y para que no digan que estas reuniones son de conspiración, las hice públicas.

— ¿Quiénes están en ese grupo?

— La primera reunión fue en Achocalla (La Paz) y Raúl Prada, otros exconstituyentes, dirigentes sindicales de Santa Cruz, de la etnia de los mosetenes, asambleístas de la Cámara de Diputados. Hice esto público para evitar que llegue mal la información. Nuestra reunión fue pública y, a partir de ahí, hubo comunicaciones con Álex Contreras (exvocero gubernamental), Alejandro Almaraz (exviceministro); no hubo reuniones.

— ¿Comulga con el pensamiento de estos disidentes del MAS?

— Coincidimos en temas que son interesantes para el reforzamiento de la ideología política del MAS; entonces, decidimos reunirnos.

— ¿Lo hicieron?

— Estaba prevista la reunión para el anterior viernes (14 de junio), pero con todos los improperios y calificativos ya me desvinculé, no sé en qué quedaron. No considero traidoras a estas personas, se debería buscar un espacio para escucharlas.

— Raúl Prada convoca a hacer una ‘revolución en las calles’, ¿comparte esa posición?

— Desde el punto de vista ideológico, pero tendrá que hablar con él. Entiendo que hay que recuperar la movilización popular, comparto eso porque no surgimos de un grupo de élite, venimos de las organizaciones sociales.

— ¿En estas reuniones se habló de Evo Morales?

— Sí, (los disidentes) decían que creen en el liderazgo de Morales y que en el ámbito político —y le digo en los términos que se dijo— están enamorados del Presidente, pero también creemos que hay cosas que hay que reforzar por el bien del proceso.

— ¿Cómo puede acabar este gobierno si persisten estos conflictos?

— El presidente Evo Morales es el intelectual, yo que he trabajado con él confío mucho en su tino político. Él es quien tiene todo el tino político para continuar este proceso. Pero, lo que siento es que el Mandatario recibe insuficiente información y por eso los conflictos crecen, y eso daña al proceso de cambio y a la misma imagen del Presidente. Entonces, esa cúpula (que lo rodea) es la inorgánica, no nosotros, ellos (los de la cúpula) están dando mala información…

— ¿Quiénes conforman la cúpula?

— Lo dije y ahora se molestan, pero es el entorno del Presidente. Ellos son los inorgánicos, hacen las cosas como les parece, magnifican problemas y dan mala información al Jefe del Estado. Cuestioné a esa cúpula y se me cayó el mundo, sólo falta que se inventen que soy agente de la CIA.

— ¿Su futuro está en el MAS?

— Lo que veo es lo inmediato. Voy a terminar mi mandato dentro del MAS hasta fines de 2014. En ningún momento se pidió mi curul de asambleísta, sólamente hay voces intolerantes y apresuradas. Incluso señalan que quiero ser candidata para vicepresidente y eso es falso.

Perfil

Nombre: Rebeca Delgado Burgoa

Nació: 01-06-1966

Profesión: Abogada

Cargo: Diputada nacional

Carrera

Fue juez, parte de la representación del Defensor del Pueblo en Cochabamba y vocal de la ex Corte Departamental Electoral. En 2006 fue constituyente del MAS y en 2008, viceministra de Coordinación Gubernamental. Luego fue elegida diputada y en 2012 llegó a la Presidencia de la Cámara de Diputados.

Comparte y opina:

César Navarro: La oposición se subirá al tren de la Agenda Patriótica

César Navarro es el representante presidencial de la Agenda Patriótica. Dentro de sus principales retos quiere construir un diálogo sin condiciones con todos los sectores.

/ 9 de junio de 2013 / 04:03

Dice que aparentemente su nuevo cargo vendría a ser como el de un superministro, pero considera que su función debe ir más allá, ya que quiere instaurar un escenario de diálogo con todos los sectores para la construcción de la Agenda Patriótica 2025. Navarro aclara que su función no será levantar demandas, sino planificar políticas públicas a largo plazo. Uno de sus deseos, entre varios, es ver a Bolivia en su Bicentenario con la meta cumplida de   haber universalizado los servicios básicos.

Su principal reto es construir el diálogo entre Estado y sectores sindicales, sociales, políticos, empresariales y académicos para la construcción de la Agenda Patriótica 2025. No quiere excluir a nadie. Piensa que la oposición puede ser un aporte, ya que no puede objetar proyectos de nacionalización o industrialización de materias primas, por ejemplo. Se acercará a ellos, promete, incluso ya programó una reunión con el gobernador Rubén Costas, a quien lo llama amigo.

César Navarro se imagina 2025 con una Bolivia, entre otras ilusiones, que tenga la capacidad de consumir lo que produce y que cuente con todos los servicios básicos. El reto que asume viene directamente de una instrucción del presidente Evo Morales.   

— ¿Cómo se animó a asumir este nuevo reto?

— La revolución es una permanente construcción, y los que estamos en estos escenarios públicos, que definen la consolidación de un proceso revolucionario, tenemos cada día el mismo o nuevos desafíos. Por lo tanto, los que tenemos convicción y compromiso estamos en esa línea de asumir retos nuevos, pero que sean retos que consoliden todo un proceso revolucionario. 

— ¿Lo animó Evo Morales?

— Fue una propuesta (del Presidente) que la hizo directamente en el gabinete. Puso a consideración del gabinete y se tomó esa decisión. Entonces, es más o menos como esa práctica permanentemente: ir tomando decisiones en función de visiones largas, y el Presidente tiene esa característica.

— ¿Su cargo es algo similar a un superministro?

— Aparentemente, sí; pero en los hechos lo que nos está planteando la representación presidencial es ver cómo tenemos la capacidad de construir un diálogo plural con la sociedad civil en forma conjunta, y no sólo con los sectores sindicales y sociales, sino también con grupos académicos, intelectuales y sectores de clase media. Es decir, cómo hacemos que el diálogo entre el Estado y la sociedad dé un fruto de largo plazo, y ese fruto es la Agenda Patriótica.  

— ¿Este proyecto es comparable con un plan de gobierno?

— No, supera en todo a un plan gubernamental…

— ¿Por qué?

— Esto busca constituirse en una política pública de carácter estatal. Si nosotros vamos a lograr acuerdos con los actores municipales, alcaldes, concejales, dirigentes, vas a cambiar y cambiar a alcaldes y concejales en abril de 2015, y en junio ya tienes otras autoridades. Entonces, estas autoridades electas tienen que seguir la línea que estamos marcando en 2013; no puede haber autoridad política que descubra la pólvora o reinvente el agua en su gestión. Lo que hacemos es definir un norte al que queremos arribar y en ese norte ver cómo concurriremos las instituciones públicas. 

— ¿Cómo?

— Para el cumplimiento de los 13 pilares de la Agenda Patriótica hacen falta recursos económicos, y esos recursos están en las instituciones públicas, y las entidades públicas tienen que tener partidas presupuestarias para cumplir estos logros. Nuestros niveles de responsabilidad serán diferentes en los ámbitos nacional, departamental y municipal; lo que sí nos obliga es que concurrentemente el Estado tiene que definir sus recursos públicos para materializar la Agenda Patriótica 2015. Eso es vital. 

— ¿Cuál es la estrategia del Gobierno para desvincular este proyecto del proceso electoral de 2014?

— Al año ya se empieza a aplicar la Agenda Patriótica. Primero, nunca tenemos que —y es lo que dice Evo Morales— pensar en las futuras elecciones, sino hay que pensar en las futuras generaciones. La visión es el Estado y no es el Gobierno…

— Para el MAS, ¿qué viene a ser el Gobierno?

— Es la disputa coyuntural electoral, pero el Estado es el norte estratégico que cualquier líder político debe buscar. Se plantea una política estructural de largo plazo; en cambio, la oposición piensa en el día y en la elección, no piensa en el Estado.

— ¿Tiene planeado reunirse con Rubén Costas?

— Sí, lo haremos. Es más, ya nos reunimos con la Unión Europea y varios sectores sociales. Además, se tiene confirmada la cita con la Central Obrera Boliviana (COB). Estamos en esta primera etapa de reuniones con las principales autoridades nacionales, desde julio visitaremos los departamentos y nos reuniremos con sus autoridades políticas y sociales.

— ¿Qué tan diferente puede ser una reunión con Edmundo Novillo y otra con Rubén Costas?

— Va a tener sus peculiaridades, porque con unos comulgamos ideológicamente y con otros estamos enfrentados políticamente. De hecho, tengo una amistad con Costas, estuvimos juntos en reuniones en Berlín, tenemos un nivel de amistad, pero en este tipo de conversaciones lo que prima son las identidades ideológicas. Lo que no puede existir es subordinar el interés colectivo de la patria a un interés individual.

— ¿Cómo puede aportar la oposición a este proyecto?

— No hay una oposición estructural a los 13 puntos de la Agenda. Le doy un ejemplo: cuando me reuní con la Federación de Asociaciones Municipales (FAM), estaba el alcalde de Sucre, Moisés Torres. Él dijo que está de acuerdo con la Agenda y pidió una reunión para estudiar los ejes.

— ¿Se puede convencer a la oposición para que se suba al tren?

— Se va a subir, se está consolidando una razón estatal, y digo consolidando porque la oposición o no tiene capacidad o entendió que no puede oponerse a la nacionalización y la industrialización. No existe un solo político que se oponga a estos pasos, porque estos proyectos se constituyeron en una razón de Estado y, por lo tanto, en una razón social y política. En varias áreas encontramos lo mismo, y eso implica que las políticas que utilizamos como Gobierno se están consolidando y constituyendo en políticas públicas de largo plazo. Eso pasará también con los 13 pilares de la Agenda; de la crítica y la descalificación tienen que pasar a la participación; si ellos no participan, la sociedad participará…

— ¿Para el Gobierno es importante que la oposición participe?

— Sí, es muy importante que participen. Es más, la Unión Europea nos recomendó que podamos tener un diálogo con la oposición; lo vamos a tener, no vamos a negarlo, pero ese diálogo tiene que ser altamente propositivo y fundamental. Por ejemplo, Samuel Doria Medina tiene que entender que él no es el Estado, no es la sociedad, y él no es la razón y la verdad; él es parte de una realidad política y tiene que modificar la lógica de comportamiento, y si modifica su lógica de comportamiento puede constituirse en la propia alternativa de la oposición.

— ¿Cómo se imagina a César Navarro en 2025?

— Me imagino en una Bolivia que sea el garante alimentario, que tengamos la capacidad de consumir lo que producimos. Me imagino en una Bolivia donde hayamos logrado superar nuestras taras internas, que implica colonialismo y racismo, y podamos vernos como iguales. Me imagino en una Bolivia libre de contaminación. Me imagino en una Bolivia que tenga la capacidad suficiente de desarrollar su vida pública, privada, urbana, rural, y ése es un desafío grande. Me imagino en una Bolivia donde todos los bolivianos puedan acceder a todos los servicios básicos. Me imagino en una Bolivia donde un estudiante saque su computadora y tenga acceso a internet.

— ¿Evo Morales quiere lo mismo?

— Evo Morales es mucho más visionario. La visión del Presidente de 2025 la planteó este año y la pensó hace varios años. Yo creo que Evo Morales, de aquí a unos cinco años, irá planteando 2030. Es un hombre visionario. 

— ¿Qué pasaría si un gobierno de derecha llega al poder? ¿La Agenda Patriótica se la puede desechar?

— El primer momento es la construcción de la Agenda Patriótica; un segundo momento es la implementación de ésta. Estos dos momentos tienen que ver con un principio fundamental: la apropiación de la sociedad de su Agenda. No es la Agenda de Evo Morales; independientemente de que cambiemos Presidente o Vicepresidente, la Agenda tiene que ir, porque tiene un valor de apropiación de la sociedad.

Perfil

Nombre: César Navarro Miranda

Nació: 08-07-1967

Cargo: Representante presidencial para la Agenda Patriótica

Carrera

Se incorporó al Movimiento Al Socialismo (MAS) en 2000, cuando fue delegado político del oficialismo en Potosí. Antes, fue dirigente universitario y activista por los derechos humanos. Luego, en las elecciones de 2002 salió elegido diputado. En 2010 perdió las justas municipales en Potosí y después fue designado viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales.

Éste no es el último paso para consolidar la Constitución

— ¿Qué es la Agenda Patriótica?

— Es un diálogo que devuelve la condición de sujeto político constituyente a la sociedad civil. El sujeto político constituyente de 2003 era el que interpelaba al Estado y demandaba Asamblea Constituyente, el sujeto político constituyente de 2006 a  2008 era el que demandaba el cumplimiento de la Asamblea Constituyente y la aprobación de la Constitución. Entonces, el sujeto político que construye su historia va modificando su norte en función de lo que va avanzando y lo que va logrando; en cambio, ese sujeto político que luchó por aprobar la Constitución hoy tiene que luchar por la materialización de la Constitución. Por lo tanto, la Agenda no es más que instaurar e institucionalizar ese diálogo horizontal entre la sociedad y Estado…

— ¿Éste sería el último paso para consolidar la Constitución?

— No es el último paso, creo que es la institucionalización de una democracia comunitaria-participativa. La democracia no se puede limitar a tener elecciones o referendos, sino a tener niveles de diálogo permanentes entre el Estado y la sociedad. Esto parte de ese diálogo, que nos plantea discutir sobre elementos claros y concretos; diálogo en algo posible y material. Por ejemplo, ¿cómo garantizar que 10 millones de bolivianos tengan todos los servicios básicos?  O ¿cómo garantizar la seguridad alimentaria? Y para lograr esos resultados, vamos a dialogar. 

— Toda política pública tiene una base ideológica. ¿Cuál es la base de la Agenda Patriótica 2025?

— Sobre la base del artículo 1 de la Constitución, nos define como un Estado Plurinacional Comunitario, nos dice que nuestro Estado, nuestra sociedad y nuestra economía, están basados en el pluralismo. Cuando hablamos de consolidar la seguridad alimentaria, hablamos de economía plural; cuando hablamos de industrialización, hablamos de consolidar la economía estratégica; cuando hablamos de dar un valor a nuestras fiestas, a nuestra Madre Tierra, hablamos de sociedad y cultura. 

— ¿Qué tan importante es el apoyo de todos los sectores a la Agenda?

—  Cada uno aportará en función de su propia peculiaridad. Me reuní con fabriles y estamos construyendo un eje temático para discutir entre Estado, trabajadores y empresarios; será un primer encuentro productivo tripartito. Eso nos demuestra que nos faltó escenarios de actores que tienen un mismo fin.

Comparte y opina:

Últimas Noticias