La Ley de Pensiones ha sido elaborada con la participación de la anterior dirección cobista a la cabeza de Pedro Montes, pero con el beneplácito de muchos de los actuales dirigentes. No obstante, el actual secretario ejecutivo de la COB, Juan Carlos Trujillo, echa al traste todo lo avanzado y retoma el tema, pero no desde un ángulo obrerista, sino como parte de un plan electoral 2014.
I. Tal como veo el asunto jubilatorio, llego a la conclusión de que la Ley de Pensiones que tenemos en Bolivia es un paso más en la construcción del socialismo. Claro, la ley privilegia el trabajo en su forma solidaria y no en su forma individual, privilegia la solidaridad y no el individualismo.
Si tenemos que convertir a la propiedad social en el marco ideológico de la sociedad, igualmente tenemos la obligación de convertir el trabajo en un acto de solidaridad y no de individualidad, tal como lo hace el capitalismo. Por ello es que propiedad social no puede separarse de trabajo solidario. Éstos son los componentes que hacen a la construcción del socialismo; de hecho son el caparazón ideológico que dan sentido al mundo social y al campo político en construcción.
Más allá de las escaramuzas técnicas, es bastante simple darse cuenta de que si los mineros se llevan todos los ahorros de los bolivianos, de aquí a 20 años no tendremos fondo solidario ni sistema de pensiones.
II. Nada tiene de extraño en la historia del movimiento sindical boliviano que los mineros tomen las carreteras y usen dinamita para sostener la fuerza de un bloqueo. Históricamente, el movimiento obrero ha empleado dinamitas para avanzar en la conquista de sus derechos, pues era la única arma frente a la fuerza de la represión policial o militar de las dictaduras y de las democraduras neoliberales. Así que la dinamita no me asusta, me preocupa el rumbo ideológico de la movilización, me preocupa el electoralismo cobista.
Vamos a los dichos y los hechos. Jaime Solares dice —alegremente— que “los trabajadores deben tomar los ministerios”. Los mineros hacen “volar” un puente en Caihuasi para mostrar su fuerza a la Policía. Los mineros “queman pastizales en el campo” para mostrar su fuerza a los campesinos, quienes son considerados el sostén político del MAS. Jaime Solares, periodistas de la radio Erbol y la diputada de oposición Norma Piérola hablan de “un muerto” en Caihuasi. Estas cuatro acciones nos configuran un panorama estratégico; no estamos hablando de la jubilación, estamos hablando de las elecciones y de una conspiración en curso.
Qué significa tomar los ministerios, acaso no fue ese el camino de la nación camba en 2008, tomar instituciones públicas. Demasiada casualidad y parecido, entre uno y otro momento. ¿Por qué hacer volar un puente? ¿Qué necesidad había? Ninguna, en términos materiales, pero no era sólo el puente, sino la fibra óptica de Entel, éste era el objetivo que no se concretó.
¿Por qué anunciar muertes inexistentes y al mismo tiempo demandar acciones de solidaridad a los bloqueadores de otras regiones?, esto sólo se explica porque necesitan elevar la movilización como levadura de pan, para tener condiciones de presencia mediática favorables.
Este tipo de acciones sólo provienen de gente que tiene formación político-militar (volar puentes, derribar torres de energía eléctrica, cerrar centros de comunicación, etc.), y que evidencia el horizonte político de la COB: aventurismo de izquierda.