Voces

Sunday 8 Dec 2024 | Actualizado a 01:20 AM

¡Oh linda La Paz!

No por casualidad confluye en la hermosa ciudad de La Paz la bolivianidad toda

/ 16 de julio de 2013 / 04:04

Hoy la ciudad de La Paz festeja un nuevo aniversario, en honor de aquel histórico levantamiento del 16 de julio de 1809, protagonizado por valientes ciudadanos que dieron pie a la primera proclama de independencia en esta parte del continente americano. Proclama que logró plasmar el espíritu de valentía, liderazgo e integración que caracteriza a esta hermosa urbe.

En efecto, si bien tuvieron que pasar 15 años para que la libertad recién se consolide, en enero de 1825 (cuando el guerrillero don José Miguel Lanza tomó La Paz luego de que el ejército realista del general Olañeta la desocupó), la revolución de julio propició un cabildo que bien podría ser considerado como el primer parlamento latinoamericano.

Dicha asamblea, que adoptó el nombre de Junta Tuitiva, culminó con la redacción del Acta de la Independencia, en la que los revolucionarios “declaran y juran defender con su sangre y fortuna la independencia de la Patria”. 

Este histórico documento, fundamentado por un plan de gobierno de diez puntos denominado Estatuto Constitucional, en su parte final —no por casualidad, sino por vocación— reza: “Valerósos habitantes de La Paz y de todo el Imperio del Perú, revelad vuestros proyectos para la ejecución, aprovechaos de las circunstancias en que estamos, no miréis con desdén la felicidad dé nuestro suelo, ni perdáis jamás de vista lá unión que debe reinar entre todos, para ser en adelante tan felices como desgraciados hasta el presente” (sic).

Y es que como bien manifiesta la proclama, La Paz nació para ser una ciudad líder no sólo dentro del territorio nacional, sino también más allá de nuestras fronteras; así como también para constituirse en una referencia política, social y económica global, bajo una visón inclusiva de hermandad entre pueblos y culturas.

No por casualidad confluye en esta hermosa ciudad la bolivianidad toda, edificada por hombres y mujeres cuyas generaciones pasadas se remontan hace siglos, pero también por aquellos que llegaron a la sede de gobierno con un cúmulo de ilusiones, para quedarse en ella y hacerla grande, siempre protegidos por el paraguas de la diversidad de oportunidades y la nobleza de esta tierra.

¡Cuán generosa ha sido La Paz en estos 204 años!, que ha recibido, con los brazos abiertos, no sólo a cientos de miles de bolivianos nacidos en otras regiones, sino también a extranjeros. Una ciudad que día a día crece, bajo el amparo del Illimani, gracias a la herencia de su historia, cuyos frutos recolectamos con orgullo y responsabilidad; gracias a las bondades de su entorno, mágico y abundante; y al esfuerzo de miles de personas que, sin distinción de clases ni de color de piel, trabaja desde temprano hasta la noche, para sacar adelante a su familia y, por ende, a todo el país y a la sociedad boliviana.

Temas Relacionados

Comparte y opina:

El límite de un Estado en quiebre

Las declaraciones del ministro nos recuerdan una antigua frase de Cornelio Tácito: “Cuanto más corrupto es el Estado, más leyes tiene”.

Sergio J. Pérez Paredes

/ 7 de diciembre de 2024 / 04:55

Hace pocos días, el ministro de Economía boliviano, Marcelo Montenegro, pronunció palabras que resonaron con un eco de incertidumbre. En su criterio, ciertos sectores, como militares, policías y otros beneficiarios de rentas provenientes de la Gestora Pública, deberían dejar de recibir el bono adulto mayor o Renta Dignidad. Este planteamiento no solo es revelador, sino también alarmante: desnuda la fragilidad económica de un Estado que tambalea sobre una delgada línea entre el colapso y la sobrevivencia.

Las declaraciones del ministro nos recuerdan una antigua frase de Cornelio Tácito: “Cuanto más corrupto es el Estado, más leyes tiene”. En Bolivia, no solo proliferan las leyes, sino también los impuestos, reflejando la necesidad desesperada de un aparato estatal que intenta sostenerse a cualquier costo. Este aumento de cargas no es más que un intento de tapar las grietas de un modelo económico que se desploma, dejando a su paso un profundo malestar social y una desconfianza generalizada.

Estamos ante un momento crítico en la historia reciente de Bolivia. La economía nacional no solo enfrenta un vacío estructural, sino también un vacío de confianza. Cuando un gobierno llega al extremo de cuestionar la continuidad de ayudas esenciales como la Renta Dignidad, queda en evidencia que el modelo social y económico que lo sostiene está al borde del agotamiento. Este bono, que simboliza un mínimo gesto de justicia hacia los más vulnerables, está siendo replanteado no desde la solidaridad, sino desde la carencia.

La situación actual no solo es económica, también es moral. Un país que incrementa impuestos mientras reduce beneficios sociales parece olvidar su compromiso con la dignidad humana. En su lugar, abraza una política de parcheo continuo, desprovista de una visión transformadora. Este modelo tambaleante refleja un sistema que ya no responde a las necesidades reales de su pueblo, sino a su propia urgencia de sobrevivir.

Bolivia atraviesa una crisis que va más allá de lo económico. Es un momento de quiebre, donde la falta de rumbo político y social exacerba las desigualdades y condena a las generaciones futuras a una incertidumbre devastadora. Lo que presenciamos es más que una crisis pasajera: es el agotamiento de un ciclo, una transición hacia lo desconocido que exige reflexión y acción inmediata.

El quiebre del modelo actual no solo se mide en cifras económicas o estadísticas, sino en la pérdida de esperanza de millones de bolivianos. Este modelo, que alguna vez prometió inclusión y prosperidad, hoy parece reducirse a un sistema que beneficia a pocos mientras sacrifica a muchos. En este contexto, las palabras del ministro son una advertencia: hemos llegado al límite.

Hoy, más que nunca, es necesario repensar el papel del Estado. ¿Es éste un momento de reforma estructural o de perpetuar los errores del pasado? ¿Puede Bolivia levantarse de este abismo con justicia social y sostenibilidad o continuará en esta espiral descendente? Las palabras del ministro, aunque alarmantes, deben servir como un llamado a la acción. Si no enfrentamos esta crisis con valentía y visión, corremos el riesgo de perpetuar un modelo que solo profundiza las fracturas de nuestra sociedad.

En la intersección de la filosofía, la economía y la historia, Bolivia se encuentra ante su momento más delicado. Ya no podemos seguir ignorando el límite al que hemos llegado. Éste es un tiempo para decidir: o continuamos cargando el peso de un modelo fallido o asumimos el desafío de construir un futuro digno para todos.

Comparte y opina:

Obras sin rumbo en la Ciudad Maravilla

Tommy Pérez Alcoreza

/ 5 de diciembre de 2024 / 06:00

En los últimos años, los habitantes de la ciudad de La Paz han sido testigos de una serie de proyectos y obras urbanas que, lejos de mejorar la calidad de vida y el orden urbano, reflejan una preocupante falta de planificación y visión a largo plazo por parte del gobierno local. En lugar de facilitar el tránsito y el desarrollo, algunas decisiones han causado interrupciones innecesarias, congestionamiento y una visible falta de armonía en el diseño urbano de nuestra Ciudad Maravilla.

Uno de los ejemplos más notables es el cambio de aceras en varias zonas, donde las obras se ejecutan simultáneamente en ambos lados de la calle o avenida, bloqueando el paso tanto de vehículos como de peatones. Estas intervenciones, que podrían haberse organizado en fases para minimizar el impacto, han generado un caos que afecta a quienes se desplazan a pie y a los conductores que dependen de la fluidez del tráfico diario. Esta falta de previsión termina complicando la movilidad y obliga a los transeúntes a sortear obstáculos y a circular por la calzada, poniendo en riesgo su seguridad.

A esto se suman autorizaciones de construcción en propiedades catalogadas como patrimoniales, una práctica que pone en riesgo la identidad arquitectónica y cultural de La Paz. Las decisiones de aprobar proyectos en inmuebles patrimoniales, sin considerar el impacto cultural y estético, reflejan una falta de compromiso con el legado paceño y muestran la necesidad de una regulación más estricta para proteger el patrimonio arquitectónico.

Por otro lado, la colocación de conos fijos de señalización para el tráfico vehicular, que aparecieron como una medida de control y organización, duró apenas unos meses; actualmente, muchos de estos conos están doblados, dañados o han desaparecido. Es claro que las soluciones temporales no pueden sustituir una planificación responsable y duradera en la señalización vial.

Las ciclovías improvisadas son otra preocupación. La falta de estudios previos y de infraestructura adecuada convierten a estas ciclovías en espacios peligrosos para ciclistas y peatones. Aunque fomentar el uso de bicicletas es un paso positivo hacia una ciudad más saludable, la improvisación solo añade más problemas a un sistema de movilidad que ya está sobrecargado.

Estos ejemplos son un llamado de atención a las autoridades y a la ciudadanía. La improvisación y la falta de planificación no solo afectan la calidad de vida de los paceños, sino que también comprometen recursos públicos.

Temas Relacionados

Comparte y opina:

Solidaridad con el Pueblo Palestino

/ 29 de noviembre de 2024 / 06:04

Cada año, desde 1977, la Asamblea General de las Naciones Unidas celebra el 29 de noviembre como el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino. ¿Por qué este día del calendario fue elegido por la ONU? Simplemente porque 30 años antes, ese mismo día, las NNUU aprobaron la resolución 181 para dividir el territorio palestino en dos estados: el Estado Palestino y el Estado de Israel. Lamentablemente, las NNUU reconocieron al Estado de Israel en el acto y, hasta el día de hoy, no reconoce al Estado de Palestina como un estado con plenos derechos como cualquier estado del mundo. El pueblo palestino desde entonces sigue sufriendo injusticias y genocidio a manos del ejército israelí y gracias a la protección de los países coloniales que le otorgan todo tipo de armas, financiación y protección legal. 

En caso de que la nacionalidad, o color del pueblo palestino sea algo extraño para algunos, mal que les pese, somos seres humanos y el mundo debe tratarnos como tales ¿Acaso hay normas y leyes internacionales para Israel y otras normas distintas para los palestinos? ¿Acaso Israel tiene la licencia y el derecho a asesinar y los palestinos el único derecho que tienen es a morir? ¿Qué más tiene que hacer Israel para que la Comunidad Internacional actúe y se ponga fin al genocidio contra el pueblo palestino? ¿Qué hace falta hacer para saber quiénes son realmente los que amenazan la paz y la seguridad en el Oriente Medio? Cuando las cosas están muy claras y nadie puede negarlas, cuando todos somos testigos del genocidio y de la destrucción del pueblo palestino, cuando ya no es un secreto sino que ocurre ante los ojos de todo el mundo, cuando se practica este genocidio desde hace más de 14 meses sin que el Consejo de Seguridad de la ONU exija un alto al fuego debido al veto de la primera potencia mundial que alimenta con más de 86 mil toneladas de bombas (ocho veces más que las bombas atómicas lanzadas contra Japón, o cuatro veces más que las bombas lanzadas contra Londres en la segunda guerra mundial) a Israel para asesinar a niños y mujeres palestinas. ¿Acaso las vidas de los palestinos no merecen ser salvadas? ¿Israel tiene la obligación de asesinar a los palestinos?

Si el alto al fuego se hubiera producido hace un año, se habrían salvado muchas vidas de inocentes. El cese del fuego no resuelve todo, pero es el primer paso para buscar una solución a un problema. Más de un año de genocidio y el Consejo de Seguridad sigue discutiendo lo que debe hacer para frenarlo. No existe ninguna justificación para usar el derecho de veto que impide poner fin a estas tragedias.

Lea también: El odio de Israel hacia NNUU y sus organizaciones

En el futuro, algún historiador contará lo que hoy día estamos reclamando a voces con la intención de salvar vidas inocentes de este genocidio; las futuras generaciones juzgarán a los dirigentes de países que participaron en este genocidio directa o indirectamente y a las instituciones internacionales que no han cumplido con su papel para poner fin a las matanzas. Las futuras generaciones preguntarán ¿Cómo un genocidio fue transmitido en directo a través de las pantallas durante más de un año y ante los ojos de todo el mundo incluido presidentes de gobiernos y organizaciones internacionales y no se pudo frenar?

Palestina fue y sigue siendo la verdadera prueba de la eficacia y sostenibilidad del sistema internacional basado en el derecho. Ninguna afirmación, ninguna mentira equiparando a la víctima con el verdugo y a la ocupación con los ocupados puede eludir la realidad. El hecho de no comprometerse o de ignorar el sistema del que nació la cuestión palestina es un fracaso de este sistema y de su continuidad. Los pueblos y las voces libres y solidarias que se alzaron por millones en las capitales del mundo respaldan el derecho palestino y la legendaria firmeza de nuestro pueblo, y respetan los principios del derecho internacional, así como la necesidad de aplicarlos sin dobleces, con objetividad.

El pueblo palestino, junto con todos los países solidarios del mundo, no aceptará la opresión y la injusticia, y no aceptará nada que no sea vivir libre y dignamente en su Estado, con el derecho a defenderse a sí mismo, derecho a su existencia y a sus derechos nacionales. Los pueblos libres del mundo tienen el derecho de ayudarnos a alcanzar nuestra libertad e independencia para a vivir con seguridad, dignidad y paz, como el resto de los pueblos. Ninguna fuerza en la tierra lo impedirá.

Mahmoud Elalwani es embajador del Estado de Palestina en Bolivia.

Comparte y opina:

La IA y los creadores musicales

/ 28 de noviembre de 2024 / 06:03

“Inteligencia artificial, ¿realmente la necesito?”, canta el francés Lulu Gainsbourg en su tema “Elle”, que evoca la ansiedad de los creadores musicales ante el auge de esta nueva tecnología.

Hijo del icono de la música francesa Serge Gainsbourg, Lulu creó esa canción después de que un amigo le enseñara un tema escrito totalmente por la inteligencia artificial que lo dejó “verdaderamente impactado”.

“IA, cásate conmigo. IA, cómprame. IA, domíname”, entona el cantante con humor.

Otros artistas han abrazado ya esta nueva tecnología, capaz de generar todo tipo de contenidos simplemente con solo pedirlo.

Es el caso de la cantante británica Imogen Heap, conocida por el tema “Hide and seek” (2005). Creó su propio modelo de IA a partir de su voz y lo usa en su último proyecto musical.

En la Web Summit, una importante feria tecnológica que se celebró a mediados de noviembre en Lisboa, presentó un filtro que permite a cualquiera genera un sonido a partir de sus obras gracias a una alianza con la empresa estadounidense Jen.

La compositora e intérprete canadiense Grimes también concibió el año pasado un clon vocal e invitó a los internautas a usarlo para generar nuevos sonidos y la cantante estadounidense Taryn Southern o el grupo YACHT lanzaron álbumes enteros compuestos y producidos con ayuda de la IA.

Esta nueva herramienta “permite hacer cosas sorprendentes en las que no habríamos pensado”, señala a la AFP François Pachet, investigador de inteligencia artificial que trabajó en Spotify y Sony.

En 2018 produjo el álbum “Hello world”, donde el belga Stromae y la canadiense Kiesza colaboran con la IA.

Han visto la luz numerosas plataformas de creación musical con inteligencia artificial como Aiva, Suno o Udio y gigantes del sector como Meta y Google proponen también este tipo de servicios.

“Gente que no sea música puede de repente hacer canciones enteras”, celebra Pachet.

Lea también: Huracán Ida: esta vez los diques de Nueva Orleans aguantaron

Por ejemplo, en el escenario de la Web Summit, el cofundador de la plataforma Moises, Eddie Hsu, enseñó en cuestión de segundos que la IA podía añadir una batería bajo algunas palabras y transformarlas en un sonido de bossa nova.

Pero en la industria emergen voces críticas contra la forma en que se han entrenado algunos de estos modelos.

En Estados Unidos, la Recording Industry Association, que aúna a las principales discográficas, demandó en junio a las empresas emergentes Suno y Udio, acusándolas “de copiar el trabajo de un artista y de explotarlo en su provecho sin consentimiento ni remuneración”.

Más de 35.000 artistas, entre ellos Thom Yorke de Radiohead, Björn Ulvaeus de ABBA o Robert Smith de The Cure, firmaron a finales de octubre una petición que denunciaba el uso sin autorización de sus creaciones para alimentar los algoritmos.

Con la IA generativa, “hay segmentos enteros de la creación musical que pueden ser reemplazadas, como la sonorización en algunas tiendas”, dice a la AFP Cécile Rap-Veber, directora general en Francia de la SACEM (Sociedad de Autores, Compositores y Editores de Música), que también firmó la petición.

“Desgraciadamente, es toda una franja media de creadores que hasta ahora viven de su arte y que están en riesgo mañana de no poder hacerlo”, agrega.

Los profesionales del sector reclaman más transparencia de parte de las empresas tecnológicas, una remuneración por el uso de sus obras para la IA y la creación de nuevos contenidos siempre que sirvan para sustituir a producciones humanas, afirma Rap-Veber.

Para François Pachet, este avance tecnológico obligará a los creadores a “hacer cosas más originales” porque “las cosas convencionales podrán hacerse, en efecto, de manera más o menos automática”.

Pero no cree que el ser humano vaya a ser remplazado por la máquina. “No hay todavía una canción compuesta por una inteligencia artificial que sea tan buena que todo el mundo quiera versionarla”.

Daxia Rojas es periodista de AFP

Comparte y opina:

El plástico: una historia de la sociedad de consumo

Isabel Malsang

/ 26 de noviembre de 2024 / 06:02

Antes de amenazar la biodiversidad, los océanos y la cadena alimentaria mundial, el plástico salvó numerosas vidas y favoreció el desarrollo, en pleno auge de la sociedad del consumo de masas tras la Segunda Guerra Mundial.

Resistente, ligero y económico, el plástico contó a partir de los años 1950 y en las dos décadas siguientes con una imagen positiva «en todos los aspectos de la vida», afirma el Atlas del Plástico, publicado por la Fundación Heinroch Böll Stiftung.

Vea: 77 años de lucha y lágrimas

En el campo sanitario, los catéteres, bolsas, jeringuillas y otros dispositivos médicos de plástico de un solo uso han mejorado la higiene y la salud y han contribuido al incremento de la esperanza de vida.

En el embalaje, los plásticos conservaron mejor los productos, redujeron el desperdicio de alimentos y, en la práctica, ayudaron a luchar contra el hambre, señalan los defensores de este material.

A principios de los años 1990, la epidemia de sida causaba estragos. El grupo de rock francés Elmer Food Beat cantaba «El plástico, es fantástico» para promover el uso de preservativos frente a esta enfermedad: el látex, y por extensión el plástico, podía salvar vidas.

Pero veinte años después, los valores asociados a este material han cambiado. Esa misma banda musical modificó la letra de su canción para alertar de la contaminación: «El plástico, es dramático», cantan ahora.

En el siglo XXI, «el plástico se ha vuelto inteligente, al servicio a la gente», dice Mickaël Pruvost, un ingeniero de investigación en el grupo químico Arkema.

Este fabricante de polímeros piezoeléctricos, llenos de electrones o de sensores, apuesta por los plásticos que registran el movimiento, las vibraciones o el ritmo cardíaco e incluso pueden enviar señales en caso de caída de personas ancianas o bebés.

Hace dos siglos, los primeros plásticos se producían a partir de materias primas naturales y renovables, como el caucho de Charles Goodyear. En 1862 se creó la parkesina a través de celulosa vegetal moldeada con calor.

Eso permitió siete años después la invención del celuloide en Estados Unidos, que consiste en parkesina caliente mezclada con alcanfor y alcohol. Pronto aparecen sus primeras aplicaciones industriales: reemplaza el marfil de las bolas de billar o el carey de los peines y se usa en las primeras películas cinematográficas.

En 1884, el químico francés Hilaire de Chardonnet patenta una fibra sintética, la primera tela artificial, bajo el nombre «seda Chardonnet» que luego se convertirá en el nailon y el tergal.

El primer plástico completamente sintético, sin ninguna molécula presente en la naturaleza, lo inventa en 1907 en Estados Unidos el químico belga Léo Baekeland: la baquelita, formada por una reacción entre el fenol y el formaldehído. Sirve para fabricar carcasas de teléfonos, enchufes eléctricos o ceniceros.

En 1912, el pionero de los polímeros, el químico alemán Friz Klatte patenta el policloruro de vinilo, más conocido después con las siglas PVC. En los años 1950 su uso se dispara al descubrirse que puede fabricarse a partir de un subproducto muy barato de la industria química, el cloro.

La producción industrial se desarrolla en los años 1950, a partir de fracciones refinadas de petróleo, con tres productos clave: la poliamida que demostró su eficacia como tejido de los paracaídas estadounidenses durante el desembarco de Normandía en 1944; el teflón, un material de guerra usado por su resistencia que luego pasó a recubrir las sartenes del mundo entero, y la silicona.

El plástico está ahora presente en todos los rincones de la vida cotidiana.

(*) Isabel Malsang es periodista de AFP

Temas Relacionados

Comparte y opina:

Últimas Noticias