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La Asamblea Plurinacional y lógica colonial

Tuve la oportunidad de leer la investigación ¿De la colorida minoría a una mayoría gris? Presencia indígena en el legislativo, de Patricia Chávez, publicada por la Fundación Friedrich Ebert Stiftung y Gente común, 2013. Los datos presentados en la investigación son muy interesantes y a la vez preocupantes; pero me quedo con los varios testimonios recogidos por la autora a los y las diputados indígenas de la gestión de Evo Morales, como quechuas, aymaras, uruchipaya, yuracaré, guarayo, weenhayek, tacana, moxeño, afroboliviano, entre otros.

Todos ellos reconocidos en el mundo de las organizaciones sociales indígenas y campesinas de nuestro país. Las experiencias y reflexiones de los diputados indígenas (y algunos no indígenas) invitan a hacer varias preguntas, como, ¿cuánto se respeta su sabiduría, su experiencia y la otra forma de hacer gestión y administración legislativa, distinta a la occidental?, ¿cuánto está transformando la lógica india a la nueva Asamblea Plurinacional?, en fin.

Esperaba que los indígenas se expresen en sus propios idiomas, independiente de que no podamos entenderlo; no obstante la autora hace la aclaración necesaria de que no se pudo lograr ese cometido, porque la “lengua franca” en la Asamblea es el castellano. Incluso los propios entrevistados optaron por hablar sólo en ese idioma. Pero, ¿por qué esa decisión india de sólo hablar en castellano? Algunas respuestas están en el libro, sobre todo es por la extrema burla y mofa de que son objeto los diputados indígenas. Esto es un claro indicador de que el colonialismo lingüístico continúa vigente. Esta imposición de la lógica dominante del castellano en la Asamblea plurinacional es sumamente preocupante, pues las lenguas ancestrales, a pesar de estar reconocidas en la CPE como idiomas nacionales, en la práctica siguen siendo clandestinidades y discriminadas del debate nacional, plural e intercultural, de manera oral y escrita. Entonces, ¿qué sentido tiene seguir reivindicando lo plurinacional cuando  se sigue apostando por el monolingüismo cultural? Otro tema que devela la investigación es la ruptura comunicacional entre indios y no indios. Que los diputados indígenas no puedan comunicarse con los no indígenas es dramático. No porque no quieran usar o no sepan castellano ambos sectores, sino porque la lógica de funcionamiento de la Asamblea aún tiene una base colonial, que no permite recoger lo nuestro, de adentro; por lo tanto, sigue siendo foránea y excluyente.

También es preocupante saber que la experiencia, la práctica, la sabiduría ancestral de los diputados indígenas, herederos del sistema del thakhi, ñan o la democracia comunal no tiene ningún peso en la Asamblea Plurinacional; es decir que no se está indianizando el Órgano Legislativo. Entonces, ¿qué sentido tiene seguir apostando por una Asamblea que excluye en la práctica la lógica comunal, razón de ser,  en teoría, del Estado Plurinacional? El orden simbólico colonial está muy presente en la Asamblea, a pesar de las milluchadas u otros actos rituales que se realizan periódicamente; pero la forma de escuchar, de debatir y de proponer (sólo en castellano), e incluso la forma de sentarse (sólo en sillas y mesas), etc. responden a la lógica colonial y no recoge la gran sabiduría india.

Ya empezó la contienda electoral para los comicios de 2014, y creo que sería bueno hacer un balance sobre cuánto se ha avanzado en la transformación del Estado republicano colonial al Estado Plurinacional. Los datos frescos de la investigación nos enseñan un panorama nada interesante, pero es bueno saberlo.

Ukayatxatawixa wali kusawa, wali amuykipañatakiwa. Uka Asamblea Plurinacional utaxa, sarnaqawipaxa, amtawipaxa janiwa akch’aswaliki, q’ara amuyun kaskakiwa, ukawjanwaliki, ukhamsi wauka yatxatawixa.