Vladímir Putin
El hombre amante de los deportes extremos logró poner de vuelta a Rusia en el plano internacional
Vladímir Putin se convirtió en el hombre más poderoso del mundo según la lista que elabora la revista Forbes cada año. Su intervención en el conflicto sirio, que evitó un ataque de EEUU y culminó con una resolución de la ONU para la eliminación del armamento químico de ese país, fue determinante para alcanzar tal posición.
¿Pero quién es el actual presidente de la Federación Rusa? Vladímir Vladímirovich Putin nació en San Petersburgo en 1952. Tras graduarse de Derecho con honores en la Universidad de Leningrado entró al servicio secreto ruso (KGB). Su habilidad para las labores de Inteligencia le valió un vertiginoso ascenso en su carrera, llegando a trabajar de manera directa con Boris Yeltsin, el primer presidente de la Rusia post URSS. En 1998, Yeltsin lo puso al mando del Servicio Federal de Seguridad, luego lo nombró su Primer Ministro.
Su participación en la guerra contra guerrilleros separatistas que se apoderaron de Chechenia, logrando recuperar el control de esa capital, lo convirtió en el político ruso más popular. Esto le permitió ganar las elecciones presidenciales de 2000 con el 53% de los votos. Entonces recibió una Rusia destruida económicamente, en la que el 60% de la población sobrevivía con apenas dos dólares diarios, con una inflación del 84%, tasa de desempleo del 11% y crecimiento negativo del PIB.
Durante su primer mandato Putin promovió un cambio total del sistema constitucional y legal, al eliminar leyes locales que contradecían leyes federales. Separó del Gobierno a todos los gobernadores regionales que estaban en contra de las transformaciones, y empezó un gigantesco plan de expropiación contra los magnates y oligarcas poderosos de la industria, de las finanzas y las comunicaciones, quienes en el pasado gozaban de beneficios estatales. Muchas de estas medidas fueron criticadas por sus opositores, para quienes constituían un retroceso en las conquistas democráticas.
En su segundo mandato (2004-2008) impulsó profundas reformas en educación, vivienda y salud, mejorando los salarios de los trabajadores y las rentas; promocionó la inversión interna, alentó las inversiones extranjeras y logró convertir a Rusia en una superpotencia energética gracias al aumento de los precios del crudo y del gas entre 2000 y 2008. El crecimiento económico promedio de ese periodo fue de 7%.
Para 2012, año en el que ganó por tercera vez las elecciones presidenciales con el 64% de los votos, Rusia se convirtió en la cuarta economía de Europa y la novena en el ámbito mundial, con un producto interno bruto de 2 billones de dólares. El hombre amante de los deportes extremos, de la vida sana, logró poner de vuelta en el plano internacional a su país. Hoy en día no se concibe la idea de una Rusia sin Putin.