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El hombre que inspiró a millones

Nelson Rolihlahla Mandela, el primer presidente negro de Sudáfrica, cuya vida se caracterizó por una lucha incansable contra el racismo, fue uno de los estadistas más influyentes de la Historia. 

Mandela nació en 1918 en el pueblo de Mvezo en Transkei, en un hogar sumido en la pobreza. Ingresó en la universidad de Fort Hare para estudiar Derecho, la única institución educativa superior para negros. Ahí se convertiría en miembro del Congreso Nacional Africano (CNA); tiempo después fue expulsado de dicha universidad por sus actividades políticas. Sin embargo, continuó estudiando por correspondencia, completando su licenciatura en 1942.

En los siguientes años, trabajó en el CNA. Su principal tarea era la concientización de sus seguidores a ejercer una resistencia no violenta contra el apartheid. Una resistencia pacífica inspirada en la lucha de Mahatma Gandhi. Para 1960 su lucha por la liberación negra tuvo su primer punto de inflexión, cuando organizó, ya como presidente del CNA, una marcha por leyes a favor de los negros, la cual terminó con una represión policial que dejó más de 60 fallecidos. 

Dos años más tarde, Mandela fue arrestado, acusado y declarado culpable de conspiración y sabotaje. Delito que acarreaba la pena de muerte; sin embargo, le cambiaron la condena por cadena perpetua. Pasó 18 de sus 27 años de prisión en la cárcel de Robben Island, realizando trabajos forzados en la cantera del penal. Durante los años en los que estuvo preso, su imagen creció hasta ser venerada en Sudáfrica y muchos otros países del mundo. Una fuerte campaña internacional logró su traslado en 1982 a la prisión de Pollsmoor, cerca de Ciudad del Cabo, y posteriormente su libertad, en 1990.

Después de décadas de lucha contra el régimen de segregación racial instaurado en su nación por los gobernantes blancos de origen británico, en 1994 Mandela se convirtió en el primer presidente negro de Sudáfrica. Un año atrás había sido nombrado Premio Nobel de la Paz. El día del juramento a la presidencia dijo: “Nunca, nunca, nunca más deberá volver a sufrir esta hermosa tierra la opresión de un hombre sobre otro”.

Uno de sus logros más importantes como mandatario fue la aprobación de una nueva Constitución, en la que se garantiza los derechos de todas las personas sin importar su color y origen racial, y se establece la abolición de la pena de muerte.

Nelson Mandela era más que un líder, sus acciones y sus palabras inspiraron a millones de personas en todo el mundo. En su último mensaje dijo: “La muerte es algo inevitable. Cuando  un hombre ha hecho lo que él considera como su deber para su pueblo y su país, puede descansar en paz. Creo que he hecho ese esfuerzo y que, por lo tanto, dormiré por toda la eternidad”.