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Cuellos de botella

Cuando la demanda interna de una economía crece, quiere decir que la población está demandando una mayor cantidad de bienes y servicios, por lo tanto, la oferta de los mismos debería también crecer en similar o mayor magnitud, porque de lo contrario se generarían presiones inflacionarias o un incremento en las importaciones. Cuando las empresas tienen capacidad ociosa, tenderán a utilizarla para cubrir la mayor demanda por los bienes y servicios, pero cuando están cerca de alcanzar la plena capacidad y la demanda continúa creciendo, deberían ampliar su capacidad, lo que implica realizar nuevas inversiones.

Para ampliar la capacidad productiva o de prestación de servicios, las empresas deben considerar diversos factores, como la seguridad jurídica existente, la forma de financiar la inversión requerida y el acceso y disponibilidad de diversos insumos necesarios para poner en funcionamiento las nuevas plantas y equipos (electricidad, gas, agua, etc.), entre otros.

La implementación de varios proyectos en el país que implican inversiones importantes se encuentra parada, ante la incertidumbre de contar con gas para ponerlos en funcionamiento, un cuello de botella. Por otra parte, la Ley de Servicios Financieros promulgada el año pasado desincentiva la capitalización de las instituciones financieras, lo que en un futuro podría limitar la oferta de financiamiento, otro posible cuello de botella. Vale decir que la existencia de un mercado creciente no es razón suficiente para que las empresas incrementen la oferta de bienes y servicios. Para que ello suceda, deben simultáneamente darse otras condiciones favorables.

En momentos en los que el Gobierno viene elaborando una nueva ley de inversiones,  y en el entendido de que el principal objetivo de dicha norma debería ser generar condiciones para que las empresas incrementen la oferta de bienes y servicios, sería conveniente que sus diseñadores tomen en cuenta la necesidad que hay en el país de que se realicen inversiones en varios sectores, a fin de que no se generen otros cuellos de botella que pudieran limitar alcanzar dicho objetivo.