El ideólogo del Plan Nacional de Desarrollo
El tema central del PND fue el cambio en el modo de uso y generación del excedente económico
Los economistas bolivianos no resaltan porque, a diferencia de los vecinos, no nos valoramos entre nosotros, tampoco nos hacemos autopropaganda ni nos alaban los organismos internacionales.
Bolivia ha tenido una larga tradición en planes de desarrollo. Entre los más conocidos tenemos el Plan Decenal (1962-1971), elaborado con la colaboración de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL); la Estrategia Socio-Económica del Desarrollo 1971-1991; el Plan Quinquenal de Hugo Banzer Suárez (1976-1980); el Plan de Desarrollo 1984-1987 de Hernán Siles Suazo, que terminó un poco antes de renunciar; el Plan de Todos, de Gonzalo Sánchez de Lozada; y el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2006-2011.
Fue en la gestión y bajo la dirección de Carlos Villegas que se elaboró el Plan del Vivir Bien, en junio de 2006, que puso énfasis en el “cambio del actual modelo de desarrollo primario exportador, que se caracteriza por la explotación y exportación de los recursos naturales sin valor agregado y de la constitución de un nuevo patrón de desarrollo integral y diversificado, consistente en la industrialización de los recursos naturales renovables y no renovables”.
El tema central que plasma Villegas en el PND fue el cambio en el modo de uso y generación del excedente económico, en la acumulación frente al modelo anterior que “transfiere excedentes al exterior”, en un nuevo patrón que controla y distribuye los excedentes producidos por los recursos naturales para la “acumulación interna que alimente en el largo plazo el desarrollo nacional”, y en “la transformación de la matriz productiva nacional”.
Para tal efecto se requería la intervención del Estado como “promotor y protagonista del desarrollo nacional”, siendo “indispensable su participación en la producción y su actividad comercial de los sectores estratégicos que garanticen la acumulación interna, al mismo tiempo que proteja y aliente la innovación y la expansión de la producción en el resto de los sectores productivos”. El fin último del cambio del patrón primario exportador, lo dice en su introducción al PND, es: “revertir la desigualdad y la exclusión de la población indígena, urbana y rural: erradicar la pobreza”.
En el PND, Carlos Villegas concreta su pensamiento y trayectoria como investigador del Centro de Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), que en esa época se caracterizaba por su crítica al modelo neoliberal en plena ejecución, especialmente de las políticas de ajuste estructural que jibarizaban el papel del Estado y se entregaba a la inversión extranjera directa. Entonces Villegas criticó a la privatización y la capitalización, la médula del modelo, y lo expuso en el libro La Privatización de la Industria Petrolera en Bolivia, publicado en 2002.
Como director del Centro de Posgrado de la UMSA (CIDE), continuó en sus investigaciones en busca de un modelo de desarrollo alternativo al modelo neoliberal, y dirigió el programa económico del Movimiento Al Socialismo (MAS) para las elecciones de 2005.
Carlos Villegas, como pocos economistas, pone en práctica lo que como teórico e investigador buscaba, un modelo alternativo como ministro de Planificación del Desarrollo; y como crítico de la privatización impulsó el sector estratégico en hidrocarburos, primero como ministro y ahora como presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).