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Órgano Electoral

El tiempo de estos vocales parece que se va acercando al final”. La cita pertenece al presidente del Senado, y resume el ánimo generalizado de la clase política respecto a las autoridades que conforman el Tribunal Supremo Electoral (TSE), máxima instancia del Órgano Electoral que atraviesa una crisis tal que pone en riesgo la legitimidad de los recientes comicios.

En efecto, en una larga sucesión de desaciertos, los siete vocales del TSE han echado por los suelos la imagen del que debiera ser el más respetable de los cuatro poderes del Estado, debido a que su función es esencial para la legitimidad de los otros tres, habida cuenta que es el que administra la elección de tribunos y magistrados en el Judicial, de diputados y senadores en el Legislativo, y presidente y vicepresidente en el Ejecutivo.

Las críticas a la actuación de los miembros del TSE se remontan a la época cuando se promulgó la Ley del Régimen Electoral. Posteriormente las pugnas entre vocales por hacerse con la presidencia del Órgano mostraron su peor faceta; pero ha sido en las dos últimas elecciones, en octubre de 2014 y en marzo de 2015, cuando más errores e inconsistencias tuvo su desempeño. La gota que parece haber colmado el vaso es un video en el que se observa al vocal Ramiro Paredes disfrutando de una amena fiesta de cumpleaños con militantes del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS).

Este caso ha motivado al resto de la Sala Plena del Tribunal a tomar la decisión de procesar a su colega por presuntas “faltas graves”, cuya sanción puede llegar a la destitución, en el marco de un proceso que será sustanciado públicamente. Sin embargo, parece que no será suficiente para acabar con la crisis institucional, y ha sido el presidente del Senado quien anunció, sin dar detalles, que las alternativas son o la renuncia de los vocales, cuyo mandato acaba entre mediados de 2016 y principios de 2017, o el acortamiento de este mandato. El Vicepresidente del Estado se ha pronunciado en el mismo sentido, afirmando que “hay que tomar decisiones fuertes”, aunque también ha dicho que el tema todavía no es parte de la discusión en la Asamblea Legislativa.

A su vez, la presidenta del TSE ha manifestado que ese Órgano está abocado a los trabajos de organización de los referendos autonómicos en cinco departamentos, por lo que nadie ha considerado la posibilidad de renunciar.

Al margen de cuál sea el resultado del proceso al vocal Paredes, es previsible que en las próximas semanas cristalice el consenso entre las fuerzas políticas con representación parlamentaria para tomar alguna determinación. Será entonces que se pensará seriamente en qué perfil deben tener los miembros del cuarto poder del Estado y asegurar que sean electos solo quienes cumplan con esos requisitos. La afinidad o simpatía política ya no debe ser un criterio de selección.