El domingo concluyó la XXXI versión de los Juegos Olímpicos. Como las anteriores, esta Olimpiada deja varios nombres para el recuerdo, como el de Michael Phelps, nadador estadounidense que consiguió cinco medallas de oro y una de plata, constituyéndose así en el atleta que más medallas olímpicas (28) ha logrado en la historia de las Olimpiadas. Por otro lado, Simone Biles, de 19 años, se consagró como la revelación del certamen, por la espectacularidad de sus piruetas, que le valieron cuatro preseas de oro. Y lo propio ocurrió con Usain Bolt, el ahora eterno rey de atletismo en los 100, 200 y 4×100 metros planos. En cuanto a Bolivia, cabe destacar la participación de la marchista Ángela Castro, quien concluyó la prueba de 20 km en el puesto 18 de un total de 74 competidoras, la mejor posición alcanzada hasta ahora por un atleta boliviano.
La próxima cita con el mayor evento deportivo del planeta será dentro de cuatro años, en Tokio. Hasta entonces, cabe esperar que en el país se promueva con más fervor el deporte en sus diferentes disciplinas; pues además de saludable es una de las mejores opciones para canalizar el tiempo y la energía que siempre les sobra a los niños, jóvenes y adolescentes, impidiendo su incursión en el mundo de las drogas y la violencia.