En una reciente declaración pública sobre su eventual repostulación como candidato en las elecciones generales de 2019, el presidente Evo Morales señaló que deja el asunto “en manos del Congreso” del MAS, a realizarse del 15 al 17 del presente mes. Hasta ahora la versión oficial sostenía de modo persistente que el polémico tema sería tratado el 2018.
Tras conocerse los resultados del referéndum constitucional del 21 de febrero, en el que una apretada mayoría votó por rechazar la reforma que habilitaba la posibilidad de una nueva postulación del actual binomio presidencial, el tema de la reelección, lejos de darse por saldado, siguió presente en el debate público-político. Diferentes voces, en especial desde las organizaciones sociales que respaldan al Gobierno, persistieron en proclamar la candidatura de Morales para el periodo 2020-2025.
El asunto, que genera disputa y polarización (sobre todo en redes sociales), tiene aristas normativas y posicionamientos políticos. La oposición, y en general quienes votaron por la opción No, sostienen que no hay reelección posible para Morales el 2019, toda vez que fue negada, de manera definitiva, en las urnas. El oficialismo, por su parte, en particular autoridades y dirigentes, plantean que en el referéndum primó la mentira (por el “caso Zapata”) y, en consecuencia, debe haber una nueva consulta.
¿Se puede realizar un segundo referéndum sobre el mismo tema (la reforma del artículo 168 de la Constitución Política) ya sometido a votación? Quienes rechazan la posibilidad, consideran que la decisión de febrero es vinculante para el actual binomio presidencial y, está claro, no queda otro camino que cumplirla. Los que alientan un “segundo tiempo” aseguran que ni el texto constitucional ni la legislación electoral prohíben una nueva consulta en el mismo período y, por tanto, está permitida.
A reserva de este debate, abonado con diferentes argumentos desde cada vereda, lo evidente es que el gobernante MAS se ocupará del tema en su congreso en Montero. Y lo más probable, dada la centena de resoluciones de organizaciones sociales que ya se pronunciaron, es que “orgánicamente” se decida avalar e impulsar la repostulación de Evo Morales. Corresponderá a la dirigencia masista, en especial a su máximo líder, evaluar si este mandato es constitucionalmente viable y electoralmente sostenible.
La señal novedosa es que quienes plantean el camino de la reelección de Evo en lugar de promover una nueva candidatura en el partido oficialista han dejado de hablar explícitamente de otro referéndum. ¿Cuál será la “ruta constitucional y legal” que podría avalar la interpretación o prescindencia del artículo 168? ¿Existe? ¿Se puede replantear en democracia un rumbo definido democráticamente? ¿Con qué consecuencias? Es indudable que el congreso del MAS fijará posición al respecto. Hay debate para rato.
(05-12-2016)