Las lluvias y la Anata
Después de Todos Santos, se empieza la preparación de la Anata (o tiempo de jugar), que se instala junto al Carnaval occidental. En el hemisferio Sur es verano y en el Norte, invierno. En el mundo andino, una vez terminado Todos Santos, la música del Carnaval empieza a sonar en las comunidades. Por ejemplo, el 2 de noviembre los jalk’as se despojan de sus ropas de luto, que son arrojadas o quemadas a la orilla de un río; y los músicos que acompañan la ceremonia vuelven tocando en sus charangos música de Carnaval. En esa región el erqe y el thurumi son los instrumentos que definen el tiempo del Carnaval o Pujllay y del Supay.
Un momento importante y poco difundido es la fiesta de Santa Bárbara (4 de diciembre), momento que surge la danza de las warrimachus/q’ewas. Los warrimachus, hombres vestidos de mujeres, llevando el axsu, pieza de traje indígena y los segundos de pollera, establecen un combate a hondazos; al parecer disputando un tinku. Si bien su significado tiene muchas versiones, es probable que tenga que ver con la época de las sementeras florecidas y la necesidad de la complementariedad entre hembra y macho en la naturaleza y macho hembra, trasladado a los seres humanos, o según Gabriel Martínez: “Si el Carnaval (…) es la afirmación del poder genésico masculino, el baile Warrimachuis/q’ewas ( hombres disfrazados de mujeres) sugiere de alguna manera la construcción y afirmación del significado del saxra (espíritu maligno)… Mientras que el Carnaval es ‘hombre y mujer’ (aunque con mayor acento masculino); podemos especular, pensando que el hecho de que se trate de ‘hombres disfrazados de mujeres’ sería una evidenciación del carácter sexual ambiguo del saxra / Pachamama, pero no estoy seguro de ello. También se podrá sugerir que es una manifestación del desorden (‘mundo al revés’)…”.
En la región del Titicaca, los aymaras definen el tiempo como época cálida-húmeda, jallu pacha, que representa a la mujer; mientras que el tiempo frío-seco al hombre. Este tiempo improductivo significa violencia: la quina quina y su chicote. En cambio el tiempo femenino hembra es productivo, amor, belleza, tiempo de paz… en sus danzas se usa el chicote solo como adorno.
El conocimiento de la música y los instrumentos como bienhechores en el florecimiento de los cultivos es un saber que se remonta hace miles de años; y ahora, con la tecnología, se ha comprobado su beneficio. Por caso, en el mundo aymara los músicos dicen que los instrumentos de la familia de las quinas y los sikus no contribuyen al florecimiento de las plantas, y por esa razón solo se tocan durante la época seca. Y los que sí favorecen a las plantas son las familias de los pinkullus, la tarqa y la salla.
En algunas regiones del altiplano afirman que la quina y el siku llaman al frío y al granizo, razón para que estos instrumentos sean prohibidos en época húmeda y cálida. En cambio, los instrumentos de la época hembra tienen efectos contrarios. Así resulta que los tiempos hembras y machos están regulados por los equinoccios y los solsticios, que generan la cuatripartición que organiza toda la vida de los aymaras, con pocas variantes entre grupos dispersos por el Titicaca y sus alrededores. Cuatripartición que tiene resonancia e influencia en las áreas urbanas de La Paz, Oruro, Potosí y otras regiones pobladas por núcleos importantes de emigrantes.
Una particularidad es que debe existir siempre una simetría entre hembra y macho y el par. Nadie debe estar ch’ulla o impar porque la lógica binaria se rompería, ocasionando desorden en todo sentido y la época de las lluvias son especialmente esperadas por la fecundidad que ésta genera.
Ese mismo criterio sucede con los instrumentos de la época húmeda, y siendo la Anata yuxtapuesta al Carnaval occidental, esta imbricación genera una riqueza de contenidos extraordinaria. Donde la mayor parte de las personas solo ven borracheras, peleas y suciedad, hay un mundo profundo de significaciones religiosas indígenas, sincretismos y yuxtaposiciones que hacen de esta festividad ritual una de las expresiones más potentes de la diversidad cultural de Bolivia.