Trágica suma de negligencias
Si bien el chofer huyó tras el accidente, por lo que aún no se determinó si estaba en estado de ebriedad, todo indica que fallas mecánicas en el bus habrían provocado este “accidente”, que se sumó a otro despropósito, el concebir una avenida como una pista de baile, y para colmo de males, en un día laboral.
Como bien se sabe, la mayoría de las tragedias suelen ocurrir cuando diferentes negligencias confluyen. Este fue el caso, por ejemplo, del fatal “accidente” desatado el miércoles en la noche por un micro que perdió el control en la avenida Virrey Toledo de Villa Victoria, justo cuando un grupo de vecinos practicaba una danza folklórica en plena vía pública, causando la muerte de siete personas.
Si bien el chofer huyó tras el accidente, por lo que aún no se determinó si estaba en estado de ebriedad, todo indica que fallas mecánicas en el bus habrían provocado este “accidente”, que se sumó a otro despropósito, el concebir una avenida como una pista de baile, y para colmo de males, en un día laboral.
De esta manera, la irresponsabilidad de un chofer que manejaba un vehículo en mal estado, sumada a la negligencia de las autoridades responsables de garantizar el buen funcionamiento de los vehículos, y a la imprudencia y desconsideración de vecinos aficionados a la danza dio lugar a una tragedia lamentable, que podría haberse evitado con sencillas medidas de seguridad.
Tomando en cuenta que en pocos días se inicia una nueva inspección técnica vehicular, es de esperar que este hecho sirva al menos para que las autoridades se propongan impulsar, de una buena vez, una revisión realmente efectiva, que no sea un mero trámite para recaudar dinero, como ocurre hoy en día, sino más bien que cumpla a cabalidad su función; es decir, garantizar que los vehículos que circulan en el país lo hagan en condiciones óptimas, emitiendo la menor cantidad de gases contaminantes posible.