Los ‘parotanis’
Sé que estoy hablando de parónimos contrarios a los sinónimos y ajenos a los antónimos.

A los devotos del paro podríamos llamarlos “paristas”, como en México, pero así se presentan también los del Pari, histórico pueblo cruceño. Tal vez una chapa cabal para los aficionados al paro de protesta podría ser los “parotanis”, patronímico de la gente de Parotani, pueblito cochabambés que enrumba a Oruro y a quienes ofrezco disculpas por rebajarlos con esta comparación.
Los parotanis son quienes creen que con paros y paros van a parar sin reparo el proceso de cambios que desde hace 12 años saca al país del marasmo republicano; y sin un disparo. Los parotanis de la parodia golpista; parodistas en estado de paroxismo, que es el otro nombre de la irritación de pasiones. Ya sé que estoy hablando de parónimos contrarios a los sinónimos y ajenos a los antónimos. ¡Cultura chafa que me gasto, caray!
Los parónimos (afines) de los parotanis son, por lo visto y oído el pasado jueves 6 de diciembre, los peluches, monsters, transformers, muñecas barbies, buslaiyers y otros militantes opositores que bloquean esquinas y calles gritando lemas donados por Charles Table, Tuto el Quico, Victarugo Kardns, Albaracing Bomboloco y otros ideólogos de la excitante serie Toy Story.
¡Luche, luche, luche /con garra de peluche! // ¡Fuerza compañero/ en carro basurero! // ¡Botellas y sillón / por la Constitución! // ¡Dictadura de botas / con veinte barbies rotas! y otras tonterías disparadas al infinito… ¡y más allá!
Los papelones opositorios (sic) son organizados por gente pudiente que dispone de medios y de los medios. Se dicen pudientes porque creen que pueden apropiarse así nomás de lo bueno ajeno sin gastar nada en creatividad. Uno topa con ellos en ciertas plazas propalando a todo volumen cantos de la izquierda antiimperialista, que ellos revuelven con proclamas reaccionarias sin chispa ni sostén político.
Difunden, por ejemplo, una canción de Benjo Cruz, y sobre esa amada voz rebelde echan la llajhua de su bronca derechista “para derribar a la dictadura de izquierda que sufrimos…”. En Quillacollo hay unos activistas (por el “activo” que manejan) que con altoparlantes ensordecen a los peatones con la canción Oh bella ciao ciao ciao, himno de los partisanos en guerra contra el fascista Mussolini. ¿Por qué ponen esa canción? Se atarantan y farfullan: “Eh… ah… porque es un disco que nos prestó una señora Dequer chévere diciendo nos ha dicho” (sic).
* es periodista.
Ah, con los parotanis de historieta; ojalá pusieran frente al país propuestas de avance revolucionario, soberanía y bonanza. Lo que nos ponen son carros basureros, sillas desvencijadas, botellas vacías y otras expresiones de su pensamiento. Ojalá se nos pusiera a gente capaz de exponer coyunturas contra la dependencia capitalista, alternativas libertadoras como hacemos los izquierdistas de todos los tiempos.
Lo que manipula la derecha son gañanes que insultan y manotean provocaciones para justificar el dinerito que por cada evento reciben de plata-formas y partidos repartidos entre el oportunismo electoral y la venganza neoliberal. Los parotanis.