Un asunto pendiente
Las mujeres y las niñas han enfrentado barreras sociales y económicas en cada etapa.

Un asunto pendiente: la defensa de los derechos y la libertad de decidir de todas las personas es el título del informe del Estado de la Población Mundial 2019, presentado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) el 10 de abril, a nivel mundial. Este documento hace una revisión del ejercicio de los derechos sexuales y derechos reproductivos en los últimos 50 años, destacando los avances, pero evidenciando también los grandes obstáculos económicos, sociales, culturales e institucionales que aún siguen enfrentando las mujeres y las niñas para decidir sobre su maternidad y para tener acceso a una educación sexual integral.
Hace 50 años, a nivel global, las mujeres tenían entre cuatro a cinco hijos, y solo tres de cada 10 mujeres casadas utilizaban algún método anticonceptivo para retrasar o prevenir un embarazo. En América Latina, la situación era más dramática: las mujeres tenían entre seis a siete hijos y solo el 2% utilizaba algún método anticonceptivo. Hoy, las mujeres tienen más acceso a métodos modernos y deciden en mejores condiciones sobre cuándo y cuántos hijos tener, pero aún existen 200 millones de mujeres que no pueden ejercer este derecho. El informe incluye, por primera vez, datos sobre la capacidad de las mujeres para tomar decisiones en tres áreas claves de sus vidas: relaciones sexuales con su pareja, uso de anticonceptivos y atención en salud sexual y reproductiva. En los 51 países donde se dispone de esta información, solo el 57% de las mujeres casadas o en una unión estable pueden tomar sus propias decisiones sobre estas tres áreas.
Los gobiernos, la sociedad civil y organizaciones internacionales, como el UNFPA, pueden contribuir al logro de los tres ceros: cero necesidades insatisfechas en materia de anticoncepción, cero muertes maternas evitables y cero mujeres y niñas víctimas de violencia o prácticas nocivas.
El informe destaca como uno de los hitos importantes en el ejercicio de los derechos sexuales y derechos reproductivos en el mundo la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo de 1994, cuando 179 gobiernos se reunieron en El Cairo para acordar un plan de desarrollo basado en los derechos y la libertad de decisión de las personas y en el logro de la salud sexual y reproductiva para todos. Un compromiso que se renovó hace unas semanas en New York en la 52ª sesión de la Comisión de Población y Desarrollo de las Naciones Unidas, que se espera que se ratifique en la Cumbre de Nairobi, en noviembre, cuando los gobiernos, activistas y otros actores clave se unirán para proteger los logros alcanzados hasta el momento y cumplir con la promesa de la agenda para que nadie se quede atrás.
En el camino hacia el ejercicio de los derechos y el poder de decidir sobre sus cuerpos, las mujeres y las niñas han enfrentado barreras sociales y económicas en cada etapa. Romper y enfrentar las barreras ha sido siempre resultado de luchas incansables de las organizaciones de mujeres, de la sociedad civil y activistas. Como señala la directora ejecutiva de UNFPA, Natalia Kanem, las limitaciones en el poder de decidir de las mujeres, que influye en muchas otras facetas de su vida, desde la educación hasta los ingresos económicos y su seguridad, restringe la capacidad de las mujeres de moldear su propio futuro, más aún cuando en la actualidad hay fuerzas que, en diversas partes del mundo, están intentando hacernos volver a la época en que las mujeres apenas tenían derecho a tomar decisiones sobre sus derechos sexuales y reproductivos. En 2019, por tanto, la lucha por el ejercicio de los derechos y la libertad de decidir debe continuar como parte del compromiso mundial con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030, hasta convertirse en una realidad para todas y todos.
Es representante en Bolivia del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).