Football is coming home!”… Este es el estribillo que cantan en los estadios los fanáticos del fútbol inglés. Y lo hacen aún con más entusiasmo en este mes, por la hazaña de tener cuatro equipos de fútbol británicos en la final de las dos competencias europeas más importantes. Un hito histórico sin duda, más aún sin pensamos en cómo lo lograron. Seamos o no fanáticos del Liverpool o del Tottenham, no podemos dejar de maravillarnos por su notable determinación y habilidad para recuperarse, en ambos casos, de tres goles en contra desde el principio. Todo el país está atrapado por la fiebre del fútbol. ¡Como si no lo hubiera estado ya! También está el hecho de que el Manchester City, posiblemente el mejor equipo inglés de la temporada, ni siquiera está entre los cuatro equipos que llegan a la final.  

Es debatible si la Liga española tiene más talento, o si la Liga italiana tiene más estilo, pero la fuerza en profundidad de la Premier League inglesa es sin duda la más grande del mundo. ¿Quién hubiera pensado que un club como Wolverhampton Wanders podría vencer a todos los finalistas europeos esta temporada?

La belleza de la Premier League es que no hay certezas. Incluso, el club que está más bajo en la tabla de posiciones tiene una oportunidad contra los seis mejores equipos de la Liga. Esta temporada es una muestra de cuán competitivo se ha vuelto el campeonato de la Liga. Es también una prueba fehaciente que el Liverpool haya perdido solo una vez este año y aún sigue segundo. La resiliencia que se necesita para ganar es formidable, y la pasión del aficionado al fútbol británico, el ruido, el anhelo de ganar y la historia es lo que hace de ésta una de las exportaciones más exitosas del Reino Unido en todo el mundo. En esta temporada, el 98% de los partidos de la Premier League estuvieron disponibles para televidentes fuera de Inglaterra. Corea del Norte y Albania son los únicos dos países que no tienen un convenio para los derechos de transmisión de los partidos.

¿Qué es lo que esto nos dice acerca de mi país y qué lecciones podemos aprender de ello? En mi opinión, uno de los puntos es cuán internacional es esta Liga. Los cuatro clubes que competirán por los principales premios de Europa son gestionados por entrenadores extranjeros. Una metáfora sobre el Reino Unido en su conjunto.

Nuestra fortaleza como nación proviene de nuestra aceptación del multiculturalismo y la diversidad. Hasta el gobernador del Banco de Inglaterra es un canadiense. ¿Qué otro país del mundo puede presumir de ser tan abierto con respecto a las nacionalidades? En el Reino Unido valoramos la capacidad para realizar un buen trabajo en lugar de fijarnos en el pasaporte o en el color de la piel. Se dice que la capital inglesa es la más diversa e internacional de las principales ciudades del mundo.

En Londres se habla cerca de 300 idiomas diferentes y se practica al menos 14 religiones diferentes. Hay aproximadamente 103.000 estudiantes internacionales que viven y se educan en la ciudad. Es la sexta ciudad con más habitantes franceses en el mundo, más que en Burdeos. Esta es nuestra mayor fortaleza: Londres es una ciudad donde las empresas prosperan; aproximadamente el 40% de los capitales extranjeros del mundo se negocian allí, inclusive más que en Nueva York.

La economía es también un factor clave para el éxito. La Premier League es rica pero también justa. En Inglaterra, el fútbol se describe como rápido y fanático, y se juega en estadios atmosféricos, a menudo llenos. Los juegos también se ven como más competitivos que en las ligas rivales. Esto se da, en parte, porque el dinero proveniente de los derechos de transmisión se distribuye más equitativamente. Toda la Liga negocia acuerdos colectivamente y el dinero se reparte de manera relativamente uniforme entre todos los clubes. En España, donde los clubes negocian ofertas individuales de transmisión televisiva, el Barcelona y el Real Madrid obtendrán más que los Campeones de la EPL, que se estiman en 150 millones de euros cada uno ($us 168 millones). Esto es cuatro veces más que el tercer convenio más alto, y más de 10 veces de lo que recibirá la mitad de los equipos en la división.

El dinero de la transmisión televisiva en el extranjero se distribuye de manera equitativa entre los 20 clubes de la Premier League inglesa, lo que da a cada uno cerca de £32 millones ($us 40,5 millones) por temporada. Los clubes más grandes se beneficiarían más si se les permitiera negociar acuerdos individuales para los derechos de televisión en el extranjero. Pero incluso los propietarios del Manchester United, que son quienes llevan las de ganar, prefieren el acuerdo colectivo, ya que fortalece la competencia y hace que la liga sea más interesante.

Entonces, la lección aquí es que buscar el máximo beneficio a corto plazo puede perjudicar a una empresa a largo plazo. La competencia es saludable y buena para uno (como argumentó Adam Smith). Un monopolio puede parecer atractivo, pero un mercado vibrante y saludable nos hace a todos más fuertes y también beneficia al consumidor.

Una sana competencia probablemente significa que pasarán muchos años, si no décadas, antes de que veamos a cuatro equipos del mismo país competir de nuevo en los mejores torneos de Europa. Así que, por ahora, mis compatriotas y yo celebraremos este logro, felices de saber que, en el fútbol, cualquier cosa puede suceder. Como nos ha demostrado el Liverpool, siempre deberíamos esperar sorpresas.

* Embajador del Reino Unido en Bolivia. Twitter: @JeffGlekin