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Puerto de Ilo

Hace más de dos décadas, cuando los entonces presidentes de Bolivia y Perú, Jaime Paz y Alberto Fujimori, firmaron los primeros acuerdos para la cesión del puerto de Ilo a favor de Bolivia, era difícil imaginar que el proceso tardaría tanto en hacerse realidad. Sin embargo, desde 2018 la terminal portuaria es ya una realidad para importadores y exportadores bolivianos.

De acuerdo con un reciente reporte de la Administradora de Servicios Portuarios–Bolivia (ASP-B), solo en los primeros seis meses de 2019 se ha movido por aquel puerto peruano más carga que en todo 2018. Así, si el año pasado se importó un total de 22.096,6 toneladas de bienes a través de Ilo, en el primer semestre de 2019 ingresaron al país 37.878,64 toneladas, 71,4% más.

El presidente del Directorio de la Empresa Nacional de Puertos (Enapu) de Perú en Ilo explica que hasta hace muy poco no había movimiento de carga a través del embarcadero ubicado en el sur peruano, y que “ahora sí está creciendo el movimiento, pero necesitamos que traigan más contenedores”. Se refiere de esta manera al hecho de que la infraestructura del puerto alcanza para movilizar hasta 2 millones de toneladas de carga.  

Mientras tanto, el Gerente Ejecutivo de la ASP-B tiene la esperanza de llegar este año a las 100.000 toneladas de carga que entran y salen por ese puerto; por donde, se ha informado, se mueven aproximadamente 400.000 toneladas anuales. Tal cifra podría ser el resultado de un lento pero constante cambio de puertos por parte de importadores y exportadores bolivianos, que han comenzado a buscar alternativas a los puertos chilenos de Arica y Antofagasta, por donde todavía circula más del 90% de la carga boliviana.

El reporte de la ASP-B muestra que si en 2017 los puertos chilenos fueron el destino de 1,76 millones de toneladas de carga para Bolivia, el siguiente año fueron 1,69 millones; es decir, casi 4% menos. El jefe de la ASP-B explica que Antofagasta es el puerto más usado para la exportación de mineral, por ser el más cercano a Potosí; Arica es usado para carga en general; y Matarani, para importar granos.

Se espera que con el tiempo Ilo adquiera una vocación similar a estos tres puertos. “En principio puede ser cemento, cloruro de sodio, algunos minerales y algo de granos”, dice el gerente de la ASP-B. Y agrega que también puede convertirse en un “puerto para cargas proyecto”; es decir, equipos de gran volumen y peso que sirven para proyectos como las centrales hidroeléctricas.

La prosperidad del puerto de Ilo debería servir, según explicó el Presidente del Estado, para que Chile reconozca cuánto necesita del comercio exterior boliviano y se avenga a discutir la mediterraneidad del país y las alternativas para solucionarla. Cosa que por ahora no sucede, en parte por una visión excesivamente conservadora y soberbia de la diplomacia chilena. (08/07/19)