Para ‘vivir bien’
¡Lo logramos¡ En un esfuerzo maravilloso de las mujeres y los hombres del pueblo boliviano, logramos recuperar la posibilidad de elegir y decidir sobre nuestro futuro. Bolivia es un ejemplo para el mundo, por la organización para recuperar las esperanzas. Dejamos nuestras broncas por un momento, hasta encontrar el camino para poder construir juntas y juntos la victoria electoral del 18 de octubre.
Hoy nos enfrentamos a la tarea de ejercer el Gobierno y ahí es muy importante la reflexión, evaluación y autocrítica de los 14 años del proceso de cambios. Los errores y los aciertos corresponden a todas y todos, no se vale solo ponerse del lado de los aciertos y dejar los errores a los otros. Tenemos que ser responsables de lo que sucede en nuestro proceso de cambios revolucionarios. Por acción u omisión, también somos responsables. Por cometer errores o por no evitarlos, por quedarnos calladas o callados también somos responsables. Es saludable la actitud de no cerrar la boca, hoy es el tiempo de hablar lo que no nos parece, basta de callarnos por temor a que los fascistas se aprovechen de las críticas públicas. Lo que vimos es que los golpistas juraban que solo ellos y ellas sabían criticar los errores nuestros y que nosotras y nosotros solo obedecíamos. Nunca fue así, pero esa idea se hizo el grupo de fachos, racistas.
Construir el “vivir bien” de la humanidad y de la madre y hermana naturaleza en equilibrio y reciprocidad, es la tarea. Las tareas administrativas del Gobierno, con medidas inmediatas para resolver la crisis económica en favor de la vida del pueblo, deben estar concatenadas con la construcción del “vivir bien”. Necesitamos darle contenido a este “vivir bien”, qué significa en cada uno de los territorios, es entender el código de la unidad de la wiphala, entender la armonía de los colores manteniendo la identidad, es entender cómo construir la unidad en la multiversidad de existencias.
Las mujeres del proceso de cambios revolucionarios, estuvimos presentes en cada momento de estas luchas, para las miradas machistas de nuestros compañeros ya será imposible negar nuestra presencia. Pero lo que además hay que visibilizar es que las mujeres de nuestro pueblo fueron determinantes en diferentes momentos clave, como asumir responsabilidades.
No vemos muchas mujeres en el ejecutivo ministerial, esperemos que en los otros cargos las mujeres puedan ejercer su derecho de construir y decidir cómo seguir construyendo este proceso político, que además de esperanzador, desafía profundamente la creatividad. Las mujeres, desde las organizaciones sociales reunidas en la Alianza —a la cabeza de las hermanas Bartolinas—, ya plantearon uno de los pilares de esta nueva etapa del proceso político, la despatriarcalizacion, que no se reduce a la lucha contra el machismo y la violencia hacia las mujeres. La despatriarcalizacion es una concepción de la política pública, es una forma de administrar el Gobierno de manera que nos conduzca a caminos que tienen como objetivo acabar con todo tipo de opresiones y no solamente tratar las opresiones que nos atacan a las mujeres. Esa es la diferencia.
En buen tiempo esta recuperación de los sueños y toda la energía para nuestro gobierno. Jallalla.
es feminista comunitaria.