Asegurar la navegación aérea es prioridad
Como “caballo cochero”, cuando estamos encaminados a un solo destino, así estamos los bolivianos encauzando los pasos a días mejores y salir de la paralización que ocasionaron la pandemia y el golpismo.
Con la llegada de la pandemia se afectó a grandes economías del mundo y Bolivia no estuvo exenta; se suma la pésima administración que protagonizó la gestión de Jeanine Áñez, más los actos de corrupción que, en su momento, denuncié y ahora se confirman.
Pero la idea de este espacio no es ser “quejumbroso”, o como quieran llamarlo, ¡no!, al contrario, quiero aprovechar estas líneas para darles buenas noticias e información concreta.
Como conocen, o ahora se enterarán, nuestro gobierno que dirigen Luis Arce y David Choquehuanca, más quienes acompañamos este proceso, estamos enfocados en sacar adelante al país. Esto con acciones que muestren gestión y, por supuesto, resultados.
Bajo esa dinámica, quiero ofrecer un resumen de lo que estamos haciendo en el Ministerio de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, cartera estatal que ahora me toca dirigir.
Son distintas áreas de trabajo, pero me enfocaré en lo que se desarrolla en materia aeroportuaria: infraestructura, navegación aérea, desarrollo y servicios aeroportuarios, componentes del Programa de Desarrollo Aeroportuario que ejecuta el ministerio.
Antes, hacer una revisión a indicadores del área. De acuerdo con la Asociación Internacional para el Transporte Aéreo, el sector aeronáutico comercial atraviesa una situación delicada. Sus reportes dan cuenta de cifras preocupantes, el número total de pasajeros aéreos en 2021 será 52% menor a 2019, debido a las restricciones de viajes por la pandemia.
Si bien los datos no son alentadores, estamos —inicialmente— enfocados en asegurar el desarrollo aeroportuario en Bolivia. En esa línea, trabajamos en la reapertura del aeropuerto de Potosí, que reanuda operaciones este lunes. Es necesario destacar la coordinación con autoridades locales que pusieron su grano de arena para hacer posible el anhelo de los hermanos de la Villa Imperial.
Entretanto, en Cobija finalizó el mejoramiento y la ampliación del aeropuerto Cap. Aníbal Arab Fadul.
En la obra se invirtió más de Bs 195 millones. Esta terminal aérea tiene un interesante movimiento, por lo que nuestra empresa nacional BoA habilitó 14 vuelos por semana y transportará más de 2.500 pasajeros; con operaciones directas a Cobija desde Santa Cruz y Cochabamba.
Mientras que el aeropuerto de San Ignacio de Velasco en Santa Cruz, con un costo de más de $us 30 millones, será habilitado en las siguientes semanas; pretendemos promocionar el turismo y desarrollo económico y social de la región.
En el aeropuerto de El Alto, luego de registrarse una construcción fuera de norma que perjudicó a BoA, el edificio fue demolido tras una demanda judicial. Ello permitió que se levante la restricción impuesta por AASANA.
También estamos previendo la reapertura del aeropuerto de Chimoré, en el trópico de Cochabamba; la última inspección da cuenta de más del 90% de avance de obras.
En Trinidad se realizan obras civiles para una importante ampliación. Y en Yacuiba, para dar respuesta a algún incidente, se entregó dos carros bomberos a AASANA.
El aeropuerto de Guayaramerín, en Beni, se encuentra concluido; sin embargo, el pago de la contraparte, por cuenta de la Gobernación a la empresa constructora aún no fue realizado y estamos a la espera para oficializar la habilitación.
Como notaron, estamos trabajando poniendo el esfuerzo, pero esta voluntad y compromiso no son solo de nuestro Gobierno central, este trabajo debe ser mancomunado.
Por eso, quiero resaltar estas líneas y dar énfasis en la corresponsabilidad de varias instancias, municipios y gobernaciones que tienen que orientar su voluntad, encaminar su trabajo en hacer gestión. El beneficio es para sus regiones, su población, gente del lugar que exige resultados, que espera obras concretas.
En esta etapa ya no cuentan los colores políticos, ya pasó el tiempo de elecciones, ahora cuenta la gestión que realicemos, logros que cosechemos y estar verdaderamente como “caballo cochero”, en un solo norte: sacar adelante a nuestro país.
Édgar Montaño Rojas es ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda.