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Conversando con Boaventura

SAUDADE

La semana pasada tuvimos un lindo encuentro virtual con el maestro portugués Boaventura de Sousa Santos. El título del evento era por demás elocuente: La demodiversidad como democracia intercultural. Fue organizado por el TSE en el ámbito de los diplomados sobre democracia que se están realizando con diferentes universidades públicas. En su exposición, Boaventura planteó algunas ideas fuertes, de gran relevancia para nuestro debate en Bolivia. Comento un aspecto.

Situando el análisis en un complejo contexto internacional (pandemia intermitente, tránsito hacia un nuevo período con dos globalizaciones en disputa, crisis ecológica, crecimiento global de la extrema derecha), Boaventura dio cuenta de un escenario de alta turbulencia para la democracia y para los demócratas. Y lanzó una sentencia/advertencia radical: “No piensen que la democracia es un bien irreversible. Se puede perder de un día a otro”. Tiempo de luchas defensivas.

¿Qué hacer ante los ataques contra la democracia, el creciente desencanto, los riesgos de regresión? Lo esencial es asumir la necesidad de una vigilancia democrática grande para defender la democracia. Para esto no bastan las elecciones, que pueden producir gobiernos autoritarios (ahí están Trump, Bolsonaro, Orbán, entre otros) o generar coyunturas críticas cuando no se aceptan los resultados. La constatación es clara: “la democracia representativa no se defiende de los antidemócratas”.

¿Cómo, entonces, cuidar la democracia? Para Boaventura la esencia está en alentar el reconocimiento-ejercicio de diferentes formas de democracia, más allá de la sola representación política, con mayor inclusión intercultural. En otras palabras: la vigilancia democrática se construye desde la demodiversidad, con alta participación ciudadana, deliberación pública, espacios de autogobierno. La democracia se defiende con más democracias (en plural) y alta intensidad.

Tal es el horizonte, aunque no la realidad (todavía), de la democracia intercultural en Bolivia. Claro que no es suficiente reconocer la diversidad democrática y declararla. “No hay democracia intercultural sin traducción intercultural”, sostiene bien el amigo portugués. Esa traducción entre las diferentes concepciones, saberes y prácticas democráticas implica respeto a su identidad y también complementariedad. Mejor todavía: “Supone crear híbridos democráticos”.

El porvenir global, según Boaventura, es oscuro: “La democracia está en riesgo, habrá violencia”. Los odios raciales y viscerales andan sueltos. Es imprescindible defender la democracia. Y hay que distribuir mejor la esperanza y el miedo.

FadoCracia armada

1. Al día siguiente de cumplir 18 años, Salvador Ramos compró un rifle de asalto AR-15 en una tienda local de Texas. Luego adquirió 375 cartuchos y un segundo rifle. 2. Cuatro días después, abrió fuego en una escuela matando a 19 niños y dos profesoras. 3. En la última década se produjeron nueve de las matanzas más mortíferas en territorio estadounidense. En todas ellas la estrella fue el AR-15, un fusil semiautomático de gran poder. 4. El AR-15 es el arma más popular en Estados Unidos, donde circulan libremente entre civiles más de 20 millones de unidades. 5. Obtener este fusil de alta letalidad es muy sencillo. Basta acreditar mayoría de edad, repasar antecedentes y decir segunda enmienda o patriota o autodefensa. 6. Después de los lamentos tras cada matanza, se exhibe la impotencia para establecer medidas de control de armas. 7. Según la poderosa Asociación Nacional del Rifle, el AR-15 es un arma “perfecta para defender el hogar” (sic). También para masacrar fuera del hogar. “Es un objeto de caza, deportes o esparcimiento”, dicen los fabricantes. Salir de cacería de niños, por ejemplo.

José Luis Exeni Rodríguez es politólogo.