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Los ‘agujeros blancos’ del fútbol boliviano

DE FRENTE EN EL PACHAKUTI

La reciente acción del narcotraficante uruguayo Sebastián Enrique Marset Cabrera, que se escondió o aún se oculta en Bolivia como dirigente, futbolista, colocan nuevamente el tema sobre cómo el mundo futbolístico puede ser penetrado y usado para actos delictivos de gran envergadura. Según información pública, Marset conformó el club Los Leones de El Torno, con el que participaba de torneos de la Asociación Cruceña de Fútbol (ACF), en Bolivia.

La ACF tuvo que salir al frente de la noticia, declarando que “ante una posible participación del principal investigado en nuestro torneo, estamos dispuestos a cooperar con las investigaciones”. En delincuentes como Marset es posible pensar su relación con clubes profesionales del país, ¿algunas de Santa Cruz u otros departamentos? El tema no es nuevo en el mundo del fútbol. Casos de esta naturaleza se dieron activamente en Colombia y México, aunque no descartamos que haya otros malhechores como Marset en otros países.

Hoy el futbol, ahora con el empuje activo de las mujeres, mueve millones de dinero en el mundo y es muy difícil saber si ese dinero o parte de esos recursos sean malhabidos o no.

Hace años se decía que los ingresos económicos provenían del aporte de los socios de los clubes, pero se esperaban mayores ingresos de las recaudaciones en los estadios. La televisación de los partidos de fútbol en directo ha cambiado esta figura, ¿pero será que la televisión genera tanto ingreso para pagar a los clubes? O alguien, como Marset, ¿financia muy camufladamente a estos auspiciadores?

Parece que a la FIFA no le llama la atención la danza de millones de dólares, euros, etc., ¿provenientes del narcotráfico? ¿la FIFA combatiría dineros o apoyos financieros de narcotraficantes? La FIFA ha institucionalizado el reconocimiento a una élite futbolera bien remunerada, que disfruta no solo del prestigio social, sino también de trivialidades, como ser referentes de anti-valores deportivos o potenciales de estos. El fútbol de hoy es como un espejo societal que ha generado anti-valores, aunque se diga que han sido forjados con el sacrificio y el trabajo, cuando en realidad son acciones de la sociedad del espectáculo de la modernidad occidental.

Otro caso llamativo en el ámbito nacional son los escándalos de Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol). El exsecretario general David Paniagua fue enviado a la cárcel, con detención preventiva. El dirigente de los futbolistas es acusado por los delitos de estafa con agravantes de víctimas múltiples. La denuncia se realizó por el hijo del exentrenador Marcos Ferrufino, ya finado, quien no recibió el monto de dinero de los clubes Sport Boys y San José. Además, se sumaron otras denuncias en contra de Paniagua.

La Fabol declaró persona no grata a Fernando Costa, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), quien respondió diciendo que estaba “contento por ser declarado persona no grata por mafiosos” de la organización citada. Costa hizo referencia, con documentos en mano, que el directivo de la Fabol, Paniagua, recibió en su cuenta diversos depósitos bancarios de los procesos de los jugadores.

Para no perder mayor credibilidad, la directiva de Fabol pidió de manera pública disculpas al presidente de la FBF, Costa, por los improperios citados. Lo más extraño es que Fabol esté representado por exfutbolistas, ¿no es posible que el profesional futbolista se represente a sí mismo? ¿Por qué tienen que recurrir a otro sector, en este caso a futbolistas jubilados? ¿son tan incapaces de que el futbolista en ejercicio se represente a sí mismo mediante sus sindicatos? Esta supuesta incapacidad del futbolista en ejercicio ha generado que los ex no solo les representen, sino que terminan usufructuando dinero y hasta corrompiéndose solapadamente.

Sabemos que el Estado no puede entrometerse en asuntos de la FBF, porque así está estipulado en la FIFA. ¿Qué hacer frente a organizaciones que manejan tanto dinero, quizás malhabido? ¿será que pagan los impuestos de la gran cantidad de dinero con el que se realizan transferencias de jugadores e incluso los sueldos tan exorbitantes de los futbolistas y directores técnicos? Uka jach’a mat’aqir jaqinakaxa, janjamakiwa suma qhana irnaqapkiti. Jach’a lunthat jaqinakampiwa mayachasitapxi.

Esteban Ticona Alejo es aymara boliviano, sociólogo y antropólogo.