Industrialización y dinamización de la economía

Horacio Valle
En pasados días se descubrió un yacimiento de litio en Estados Unidos que podría contener una reserva cercana a los 40 millones de toneladas métricas, lo que podría desplazar a Bolivia a un segundo lugar respecto al volumen de reservas de este mineral. Sin embargo, es necesario comprender que el litio de ambos reservorios ya cuenta con sus mercados potenciales, por lo cual la competencia radica en la eficiencia en su explotación, planteando así un interesante tema de reflexión en cuanto a la producción y el proceso de industrialización se refiere.
En Bolivia, la explotación del litio ha comenzado a generar una sinergia en términos económicos, surgiendo una oportunidad atractiva para el aprovechamiento óptimo de estos recursos. Por un lado, la estatal YLB actualmente almacena volúmenes importantes de sales residuales, procedentes del proceso de extracción de litio; estas sales, junto a elementos como la calcita y el azufre que se encuentran en la región, constituyen la materia prima para el desarrollo de una industria de igual o mayor magnitud: la química básica.
Para este fin, el Estado creó la Empresa Pública Productiva Industria Boliviana Química (IBQ), que se encuentra encargada de la producción y comercialización de productos químicos relacionados con el desarrollo de la industria química y generación de materias primas químicas que son utilizadas como insumos en una amplia variedad de sectores productivos, constituyendo el eslabón previo esencial en una extensa diversidad de sectores económicos.
IBQ, aprovechando la sal tratada del proceso del litio, producirá ácido sulfúrico, hidróxido de sodio, ácido clorhídrico, hidróxido de calcio y carbonato de sodio, sustancias importantes para la generación de productos farmacéuticos, fertilizantes, realización de procesos de metalurgia en metales como el cobre, plata, oro, tratamiento del acero, procesos textiles, madereros y de papel, elaboración de ácidos de frutas, fabricación de baterías eléctricas, saponificación de grasas y cebos para la obtención de jabones y glicerina para productos cosméticos, fabricación de limpiadores, solventes y desinfectantes de uso general, así como el tratamiento de aguas residuales, entre la amplia gama y diversidad de usos que poseen estos insumos químicos.
Para comprender la relevancia de esta industria, el volumen de producción de ácido sulfúrico de un país constituye un indicador de desarrollo industrial, toda vez que esta sustancia es uno de los productos químicos más importantes y versátiles, indicando el grado de madurez y diversificación de una economía industrializada y Bolivia comenzará a producir a niveles significativos este producto.
Por tanto, la incursión en la industria de química básica de las plantas de IBQ genera efectos relacionados a la satisfacción de la demanda de estos insumos en el mercado local y extranjero, mejora de la oferta exportable de bienes industrializados, generación de empleo productivo, fomento al emprendimiento, contribución al desarrollo de regiones deprimidas económicamente, crecimiento del PIB manufacturero e incentivos a la inversión extranjera, y mejoramiento de la rentabilidad de diferentes proyectos; siendo importante que estas mejoras en las condiciones materiales se acompañen de medidas relacionadas a mejorar los procesos para la inversión y apertura de empresas nacionales y extranjeras, así como mejorar las condiciones para la exportación, entre otro conjunto de medidas posibles, aspectos que contribuirán a un cambio definitivo sin precedentes y un salto al desarrollo industrial en Bolivia.
Horacio Valle es economista.