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Minerales críticos, geopolítica y oportunidades (III)

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Dionisio J. Garzón M

El níquel es un metal más común, se asocia con cobre en yacimientos de sulfuros con pirrotina Fe (1-X) S, pentlandita (FeNi)9 S8, calcopirita (CuFe) S2 y en rocas metamórficas con los silicatos (minerales petrogénicos), garnierita, talco y antigorita. Por el bajo contenido del metal en los yacimientos primarios, se lo explota en suelos residuales, coluviales y lateríticos. Las mayores reservas están en Indonesia (21 millones de toneladas), Australia 20 millones, Brasil 16 millones y en cantidades menores en Rusia, Cuba y Filipinas (World Energy Trade, NS Media Group, 13/02/21). Se anuncia un importante aumento de la oferta del metal en Indonesia después de una fuerte inversión de capitales chinos en exploración y en mejoras tecnológicas que ha generado inquietud en otros productores como BHP en Australia. (From green hype to bailouts, the nickel industry has imploded. Bloomberg News, febrero 3, 2024. Mining.com). Esto elimina a productores menores y aumenta el oligopolio de los productores de Indonesia.

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Más del 70% del cobalto proviene de la RDC y es refinado en China, que tiene el monopolio de producción del metal para uso industrial. RDC produce anualmente 130.000 toneladas (ton), Indonesia 10.000 ton y Rusia 8.900 ton, entre los productores importantes; hay otros países que lo producen pero en escalas menores. Los minerales primarios de cobalto son: cobaltina (CoAs) S, skuterudita (Co Ni Fe) As3, heterogenita Co (OH)2, siegenita (Co Mg)2 S4, linneita Co3 As4 y Asbolana (óxido secundario de magnesio y cobalto). Generalmente ocurre en filones orogénicos (antes yacimientos mesotermales) con Co-Ni-Ag-Bi-U, asociados a intrusiones graníticas, rara vez a intrusiones básicas. Las minas más importantes de cobalto están en Katanga RDC, sus menas son de baja ley y tienen un límite de explotabilidad de 3% de cobalto. Se conocen antiguas minas en Europa, Bohemia y Sajonia relacionadas al batolito (intrusión mayor de rocas ígneas) de Carlsbad y en Noruega, en filones de rocas metamórficas de la edad Carbonífera Superior. Por estas características, se explotan zonas superiores de yacimientos con enriquecimiento supergénico de menas oxidadas. En RDC se explota la asociación níquel-cobalto-uranio y otros metales, y se acude al uso (indebido) de mano de obra infantil para armar esquemas adecuados que obtienen leyes más elevadas de las menas explotadas. Es muy difícil competir en estas condiciones. Canadá, por ejemplo, a través de Fortune Minerals, opera la mina Nico en los territorios nororientales, tiene una facilidad en Saskatchewan (Cobalt Chemicals) y se unió a Tesla como suministrador directo para no depender del monopolio chino (Infomine.com). Tesla construye una Giga Factory de baterías de litio en el sudoeste de EEUU con una inversión de $us 5 billones.

Esa es la dimensión de proyectos que se necesita para entrar en el negocio global de estos metales. Podemos seguir analizando particularidades de otros minerales críticos (v.g. bismuto, indio, selenio, columbita-tantalita, etc.) que escapan al alcance del presente análisis, cuyo fin es proponer una estrategia de selección de objetivos para aprovechar el boom actual del mercado. En ese contexto podemos concluir:

1) Es prioritaria la puesta en marcha de nuevas minas de cobre en el menor tiempo posible y establecer una estrategia de mercado a través de alianzas con empresas productoras de baterías y autos eléctricos.

2) Establecer parámetros de competitividad y elegir los objetivos de cada país, no caben consideraciones de políticas endógenas para un problema global.

3) Determinar objetivos de mediano y largo plazo para TTRR y políticas de apertura al capital privado y a convenios intergubernamentales, para fortalecer los Servicios Geológicos y los de investigación en cada caso, que son claves para desarrollar estos potenciales.

4) En el caso boliviano no debemos olvidar que el metal más crítico es el oro, aquel que estamos dilapidando salvajemente en las llanuras aluviales del norte, mirando de reojo la creciente informalidad e ilegalidad que vienen aparejadas a la depredación medioambiental del bosque y los ríos.

(*) Dionisio J. Garzón es ingeniero geólogo, exministro de Minería y Metalurgia