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Juan y el Fondo Solidario de Pensiones

TRIBUNA

Hace unos meses, Juan cumplió los 35 años de aportes para poder jubilarse con el límite máximo de la Pensión Solidaria de Vejez, pagada con recursos del Fondo Solidario. Tuvo la fortuna de trabajar en un sector que le brindó estabilidad laboral en mucho tiempo: el magisterio. Juan comenzó a trabajar desde sus 25 años y ahora, a los 60, alcanzó el límite máximo.

Asistió a jubilarse y se enteró que, con su actual ingreso salarial de Bs 7.400, tendría que jubilarse casi con Bs 5.200, que representa casi el 70% del promedio de los últimos dos años de salario. Sin embargo, hasta que se apruebe el proyecto de ley de mejora de los límites solidarios solamente recibirá Bs 4.200. Veamos qué hizo Juan.

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Al enterarse de esa limitación, Juan acudió a la Gestora para averiguar cuánto debía recibir y cómo podía acceder al 70% del promedio de sus últimos 24 salarios. También intentó averiguar cuánto sería su jubilación si no dependiera de los llamados límites solidarios.

En la Gestora, le explicaron que con los aportes que ha realizado, sin la ayuda del Fondo Solidario, recibiría alrededor de Bs 1.800 al jubilarse. Juan reaccionó indignado y preguntó cómo es posible esto. Le explicaron que se debe a varios factores, como los aportes que realizó mensualmente en su vida laboral (que solo es del 10%); el reducido nivel salarial que tuvo al inicio, que si bien fue mejorando en sus 35 años de trabajo, incidió en el monto acumulado; y su expectativa de vida que podría llegar a 25 años porque no cuenta con familia, aunque podría nombrar un derechohabiente.

Cuando calcularon los montos, le dijeron que, recibiendo una pensión mensual de Bs 1.800 (incluido el aguinaldo), el monto que recibiría por año es de Bs 23.400. En los 25 años de jubilación, llegaría aproximadamente a los Bs 600.000, empero, sus aportes no llegan a pasar los 300.000. A esto último, él reclamó y preguntó cómo era posible si lleva 35 años de aportes y que ahora gana Bs 7.400.

Le explicaron que de los 35 años de aportes que ha realizado desde 1988 hasta 2023, casi 18 años corresponden a salarios muy bajos entre 1988 y 2005. Fue recién desde 2006 que los salarios aumentaron de manera considerable. En promedio, en estos últimos 17 años y algunos meses, había ganado en promedio Bs 4.500, mientras que en los 18 años previos su salario promedio apenas llegaba a Bs 900. Considerando que el aporte en Bolivia es solo de 10% del salario, sus aportes en esa época fueron en promedio de Bs 90 al mes. Fue recién en el periodo posterior a 2006 que sus aportes mensuales aumentaron a un promedio de Bs 450.

Ante esto, Juan reflexionó y comprendió que los incrementos salariales desde 2006 habían hecho que olvidara los ingresos bajos que tenía entre 1988 y 2005. Preguntó si había alguna forma de cambiar esa situación.

Le respondieron que precisamente en 2010 se creó el Fondo Solidario para reducir ese impacto negativo y mejorar las pensiones de la mayoría de los trabajadores. Eso le ayudaría a lograr los Bs 4.200, lo que significa que, en esos 25 años de expectativa de vida, podía recibir más de Bs 1 millón. Al escuchar esta explicación, Juan quedó con otro estado de ánimo y preguntó si la aprobación del proyecto de ley de mejora de los límites solidarios podía mejorar aún más su jubilación.

La respuesta fue afirmativa, ya que con esa ley su jubilación podía llegar hasta los Bs 5.200, lo que significa un aumento mensual de Bs 1.000. Esto se traduciría en Bs 1.690.000 en los 25 años de expectativa de vida. Al ver estas cifras, Juan quedó sorprendido, especialmente cuando le dijeron que el pago de su pensión sería hasta el día de su fallecimiento y que, por eso, supera fácilmente los montos que ha aportado, comprendiendo con esto que la mayoría de los trabajadores reciben más de lo que aportan gracias al Fondo Solidario.

Juan ahora no comprende por qué algunos cuestionan algo tan importante como el Fondo Solidario de Pensiones, que permite mejorar a este nivel la jubilación de muchas personas que todavía tienen que lidiar con lo que son las consecuencias de la política salarial y el sistema de pensiones neoliberal que duró hasta 2005. Ahora espera que los trabajadores de hoy sepan cuidar el futuro de este sistema integral de pensiones con su fondo solidario para las futuras generaciones.

(*) Edmundo Nogales Arancibia es abogado y analista político