Las exportaciones de Bolivia hacia el Mercosur

Rolando Kempff Bacigalupo
Bolivia es miembro asociado del Mercado Común del Sur (Mercosur), un bloque económico regional que comprende a Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. La incorporación de Bolivia al Mercosur como miembro pleno este año, fortalece la integración económica e intercambio comercial con los países de la región a nivel económico y político.
Este bloque recibe aproximadamente un cuarto de las exportaciones nacionales, pero como lo reconoció Huáscar Ajata, viceministro de Comercio Exterior e Integración, la balanza comercial históricamente ha sido desfavorable para Bolivia debido a su dependencia de la exportación de gas y la importación de productos manufacturados y maquinaria.
El presidente Luis Arce, que participó por primera vez, el 6 de diciembre, como representante de un país miembro pleno, en la 65ª Cumbre de presidentes del Mercado Común del Sur, fue claro al señalar que el ingreso del país a este bloque económico marcó un hito para la historia del país y significó un logro diplomático trascendental que abre un abanico de oportunidades económicas, sociales y estratégicas para el país.
El 5 de noviembre del año pasado, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó sobre la firma de dos Protocolos Adicionales al Acuerdo de Complementación Económica N° 36 (ACE 36), que mejoran las condiciones de acceso de los productos bolivianos a los países del Mercosur, otorgando mayores oportunidades de exportación.
“El ACE 36 entre Bolivia y el Mercosur, firmado en diciembre de 1996, creó una zona de libre comercio para estimular el crecimiento y desarrollo económico en la región. Mediante este convenio, Bolivia fortalece sus lazos comerciales con el bloque, permitiendo que alimentos, textiles y manufacturas tengan un acceso más amplio en estos mercados, mejorando la competitividad de sus productos en el Mercosur”, explicó la Cancillería.
Con la firma de estos Protocolos Adicionales se busca potenciar más los beneficios, actualizando las condiciones de acceso a los mercados del bloque para responder a las necesidades actuales, beneficiando así a diversos sectores productivos en Bolivia.
Pero, debemos tomar en cuenta las afirmaciones de Gary Rodríguez, gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, que lamentó que la situación comercial de Bolivia con el Mercosur “ha empeorado con el tiempo”, pues el país exporta menos a este bloque. “Incluso considerando la exportación de gas, el año pasado tuvimos un déficit por 815 millones de dólares y hasta septiembre del presente año, el déficit, incluida la venta de gas, es de más de 426 millones”, recordó Rodríguez.
Hace algunos años, a través de las ventas de gas a los mercados de Argentina y Brasil teníamos un superávit comercial con Mercosur. Si quitamos este valor, el 2023 nuestro déficit comercial con este mercado ampliado llegó a 2.865 millones de dólares y entre enero y septiembre de este año alcanzó a 1.700 millones de dólares.
El papel boliviano de nexo entre Mercosur y la Comunidad Andina da mayor relieve al Corredor Ferroviario Bioceánico como proyecto destinado a fortalecer el eje de integración entre los océanos Pacífico y Atlántico, conectando los puertos del Pacífico, como Chancay del Perú con el puerto brasileño de Santos en el Atlántico.
La importancia de este proyecto la ilustró el viceministro Ajata al afirmar: “El tren bioceánico no solo es un proyecto comercial, sino también un esfuerzo de integración regional. Es fundamental que se mantenga como una política de Estado, más allá de los gobiernos de turno”.
(*) Rolando Kempff Bacigalupo es licenciado en economía de la UMSA y presidente de la Federación de Empresarios Privados de La Paz (FEPLP)