Devaluación del sol peruano ‘incentiva’ el contrabando
Efectos. Resta mercado a la producción boliviana, desincentiva la inversión y genera desempleo, aseguran los industriales.
ECONOMÍA
La periódica devaluación del sol peruano, con relación al dólar estadounidense, hace temblar a la industria boliviana. La nueva cotización de la moneda de Perú “incentiva” a un mayor contrabando de productos de la nación vecina hacia Bolivia.
Conforme a un análisis efectuado por la Cámara Nacional de Industrias (CNI), el 19 de agosto de 2021, la cotización de la divisa peruana se situó en 4,09 soles por dólar, cuando en similar fecha del año pasado se cotizaba en 3,57 soles por dólar. Y que a la fecha, la tendencia se acentúa hacia una mayor devaluación.
Al respecto, el presidente de los empresarios industriales de Bolivia, Ibo Blazicevic, precisó que en los últimos 12 meses esta devaluación del sol peruano en relación al dólar asciende al 15%, una situación que “incentiva” a un mayor contrabando de productos peruanos hacia Bolivia con el consiguiente “impacto negativo” sobre la producción nacional.
Citó que las estadísticas del comercio exterior del país señalan que los productos industriales manufactureros de mayor importación procedentes del Perú son alimentos, condimentos y sazonadores, leche evaporada, pastas, preparaciones para sopas, galletas y chocolates, entre otros. “Esos son los productos importados formalmente que, a su vez, son también los productos que ingresan vía contrabando”, argumentó Blazicevic.
El contrabando de productos hacia territorio nacional no solo es un resultado de los efectos económicos ocasionados por la pandemia del COVID-19, sino también por la devaluación de monedas en los países vecinos, una actividad ilícita que superó los $us 3.000 millones en 2020.
“El contrabando daña a Bolivia al competir en forma desigual con la producción nacional, resta mercado a la producción boliviana, desincentiva la inversión, genera desempleo productivo, afecta al comercio formal, disminuye la recaudación tributaria y empobrece a la población en general”, aseguró el líder de los industriales.
ESTRATEGIA. Frente al creciente contrabando de productos industriales del Perú, Argentina, Chile, Brasil y China, la CNI junto a sus cámaras departamentales lleva adelante una campaña nacional de lucha contra el contrabando.
Se trata de una estrategia nacional planteada por el gremio industrial, la misma que contempla cuatro pilares: ingreso a las tareas de interdicción en fronteras por parte del Ejército, una intensa campaña de comunicación y concientización a la población sobre la valoración de la industria nacional, así como también la municipalización de la lucha contra el contrabando y el proyecto de Ley de modificación del Artículo 181 del Código Tributario para cambiar el monto del impuesto omitido de 200.000 UFV por 10.000 UFV para productos de contrabando.
Para dar cumplimiento a esta estrategia, la CNI suscribió un convenio con el Viceministerio de Lucha al Contrabando, con la finalidad de intensificar las acciones de interdicción contra el ilícito en las fronteras con el Perú.
“Las Fuerzas Armadas en pleno debieran ingresar a intensificar la lucha contra el contrabando”, reclamó Blazicevic al solicitar a la presidenta de la Aduana Nacional de Bolivia, Karina Serrudo, la intensificación de las labores aduaneras de interdicción y lucha contra el contrabando, que “hoy son una prioridad nacional para preservar los empleos”, concluyó.