Se usará fibra óptica para mejorar control en venta de combustibles
El Sistema B-Sisa usará la fibra óptica de Entel para mejorar el flujo de información y la conectividad de las estaciones de servicio con el Centro de Procesamiento de Datos de la ANH respecto a la venta de carburantes. El enlace será desde 2015.
El Sistema B-Sisa usará la fibra óptica de Entel para mejorar el flujo de información y la conectividad de las estaciones de servicio con el Centro de Procesamiento de Datos de la ANH respecto a la venta de carburantes. El enlace será desde 2015.
La información fue proporcionada a La Razón por el director de Tecnologías de Información y Comunicación de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Einard Joffré Rojas, quien además explicó que para mejorar la conectividad no solo utilizarán la fibra óptica, sino otros enlaces.
“Se ha firmado un convenio por el cual Entel (Empresa Nacional de Telecomunicaciones) va a hacer un importante despliegue técnico y obviamente una inversión para poder llegar a las estaciones de servicio a través de lo que viene a ser una red privada para la ANH, para que pueda operar el B-Sisa”, indicó Joffré.
La fecha tentativa en que puede ser utilizada esta fibra es desde el 1 de enero de 2015, añadió.
El B-Sisa (Boliviana de Sistemas de Autoidentificación) es administrado por la ANH y tiene la finalidad de regular, supervisar, controlar y fiscalizar la comercialización de carburantes subvencionados por el Estado a fin de frenar el contrabando y fortalecer la seguridad ciudadana.
Composición. La fibra óptica es un medio de transmisión, empleado por lo general en redes de datos, consistente en un hilo muy fino de material transparente, vidrio o materiales plásticos, por el que se mandan pulsos de luz que representan los datos a enviar.
Las fibras ópticas se utilizan ampliamente en telecomunicaciones, ya que permiten enviar bastante cantidad de datos a una gran distancia, con velocidades similares a las de la radio y superiores a las del cable convencional.
Con el uso de la fibra podrán estar conectados con el 100% de las estaciones de servicio que existen en el país, agregó Joffré.
El artículo 49 de la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana “Para una vida segura” del 31 de julio de 2012, faculta a la ANH a implementar en las estaciones de servicio del país el B-Sisa para reforzar el sistema de control respecto a la venta de carburantes en todo el territorio.
La gerente general de la Asociación de Surtidores (Asosur), Susy Dorado, dijo que aplauden el uso de la fibra óptica porque así podrán estar conectados en tiempo real con el Centro de Procesamiento de Datos de la ANH para enviarle información sobre la comercialización de carburantes.
“Creo que mirándolo como un beneficio, no hay mejor cosa que saber que uno está trabajando correctamente en línea y de forma transparente, y el que más se va a beneficiar es la ANH porque va a tener la información al segundo”, complementó Dorado.
La representante del sector recordó que en muchos surtidores, en particular los que están alejados, la internet es “deficiente” y no tiene mucha velocidad, por lo que requieren de una banda ancha que les permita enviar la información de la venta de carburantes “en tiempo real”.
Con base en las declaraciones del director ejecutivo de la ANH, Gary Medrano, La Razón publicó el 26 de noviembre de 2012 que este ente regulador estará en condiciones de controlar cerca de medio millón de transacciones de combustible al día, una vez que su proyecto B-Sisa opere.
El consumo mensual detectado de combustible
Datos de las estaciones de servicio conectadas en línea con el B-Sisa dan cuenta de que el consumo “promedio mensual” de gasolina especial es de 103 millones de litros; de diésel oil, 125 millones de litros, y de Gas Natural Vehicular (GNV), 52,5 millones de metros cúbicos.
El director de Tecnologías de Información y Comunicación de la ANH, Einard Joffré Rojas, explicó a este medio que los volúmenes del consumo corresponden a la cantidad de vehículos que tienen el Tag (etiqueta de autoidentificación) y que luego son identificados por el Sistema B-Sisa.
“Los volúmenes reportados corresponden a un 77% del consumo mensual de combustibles a nivel nacional con información en línea (con el B-Sisa)”, dijo Joffré.
En el Tag están anotados los datos básicos del motorizado que se registró, como la placa del auto, la marca, el color, el tipo, modelo, el uso que se le da para ver si es de uso particular o de servicio público, complementó.
Según datos del Registro Único para la Administración Tributaria Municipal (RUAT), el parque automotor en Bolivia llegó en 2013 a 1.326.833 unidades, pero de esta cantidad la ANH logró etiquetar con el Tag a 1.206.093 coches, es decir a un 90,9% del total.
De los 1.206.093 motorizados que cuentan con el Tag en el país, 982.002 (81,4%) son vehículos públicos, privados o estatales; 219.942 (18,24%) motocicletas, cuadratracks y autos similares. En tanto que 4.149 (0,44%) es maquinaria agrícola o de construcción, explicó Joffré.
40 estaciones de servicio tienen enlaces satelitales
Al momento, 40 surtidores en el país tienen enlaces a través del satélite Túpac Katari y están vinculados con el Centro de Procesamiento de Datos de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), según el director de Tecnologías de Información y Comunicación de este ente regulador, Einard Joffré. “Entel lo está haciendo con el satélite Túpac Katari para tener la conectividad”, explicó.
El sistema interactúa con el SUIC del programa de GNV
En la actualidad, el B-Sisa interactúa con el Sistema Único de Información y Comercialización (SUIC) que administra la Entidad Ejecutora de Conversión a Gas Natural Vehicular (EEC-GNV). Este sistema permite que durante la compra de GNV se retenga unos centavos a los propietarios de vehículos que usaban diésel y que ahora tienen un motor a GNV, señaló Einard Joffré, de la ANH.
La ANH identificó 10.595 autos con placas clonadas
El 19 de julio, la presidenta de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB), Marlene Ardaya, informó en rueda de prensa que la ANH, a través del B-Sisa, identificó 10.595 motorizados que circulan en el país con placas clonadas. Incluso se registró nueve motorizados que transitan con el mismo número de placa y pidió al ente regulador que se suspenda la venta de combustibles a los mismos.
Se sancionará a surtidores si no se adecuan al B-Sisa
El director de Tecnologías de Información y Comunicación de la ANH, Einard Joffré, dio a conocer que se encuentran realizando algunas normativas para que los propietarios de las estaciones de servicio se adecuen para estar conectados al B-Sisa en el menor plazo posible. “Si es que no cumplen, se tomará la medida administrativa más fuerte para que en su momento se cumpla esto”, aseguró.
El 77% de surtidores envía datos en línea
El 77% de los surtidores está integrado al B-Sisa para reportar en línea a la ANH la venta de combustibles, el resto está en proceso de integración del software de facturación para mejorar la conectividad y otras están realizando adecuaciones físicas necesarias.
El director de Tecnologías de Información y Comunicación de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Einard Joffré, explicó que en el país existen 568 estaciones, pero el universo del proyecto es llegar a 560, y que de esta cantidad, 435 están integradas al sistema B-Sisa (Boliviana de Sistemas de Autoidentificación).
“Las otras (estaciones) necesitan adecuaciones a los software, que es algo que lo estamos trabajando, y también lo que significa la conectividad en las condiciones adecuadas para poder centralizar los datos hacia lo que es el Centro de Procesamiento de Datos que tenemos en la ANH”, indicó.
Sin embargo, aclaró que si bien al momento el 77% de los surtidores están integrados al B-Sisa, esto no significa que el resto no tenga un control respecto a la venta de carburantes. Añadió que las que no están conectadas en línea entregan su reporte de comercialización después y se les hace un seguimiento diario.
La gerente general nacional de la Asociación de Surtidores (Asosur), Susy Dorado, aseguró a La Razón que hasta antes de fin de año todas las estaciones estarán adecuadas, pues si aún hay algunas que no lo están, no es porque los propietarios de las mismas no quieran, sino porque “no hay internet para estar conectadas al sistema B-Sisa”.