La Goss Universal 45, el monstruo que imprime La Razón
Es la mimada de nuestra casa periodística. Se podría decir que hace el trabajo más duro de la producción del diario después del procesamiento de noticias por parte del equipo integral de Redacción.
Siempre suele resultar una curiosidad saber cómo, finalmente, se procesa la noticia para llegar al papel periódico, que todos los días disfrutan nuestros lectores o suscriptores. Si bien el proceso es complejo, las tareas se han hecho simples gracias a nuestra rotativa, la más grande y moderna del país.
En sus 30 años, La Razón imprimió sus ediciones en al menos tres rotativas: una alquilada a un diario local, otra en sus instalaciones de la calle Jorge Sáenz, en Miraflores, y la última, en las colinas de San Rita, Auquisamaña. Aquí construimos un galpón especial, un complejo de maquinarias, oficinas y la sala de Redacción.
La Goss Universal 45, de fabricación estadounidense y francesa, es un monstruo de rotativa de tres torres. Su instalación tardó un año, con un previo trabajo de capacitación de nuestro personal en Estados Unidos y la asistencia de ingenieros de la fábrica.
Ángel Miranda, gerente de Producción, conoció todo el proceso de asentamiento de este equipo, desde cómo instalarlo, cómo utilizarlo y hasta cómo resolver los desperfectos que pudieran ocurrir. Fue uno de los privilegiados no solo por su capacitación en Estados Unidos y el conocimiento de las bondades y caprichos del complejo, sino también por ser uno de los fundadores de La Razón en 1990. Sus compañeros suelen considerarlo un “activo fijo” de nuestra casa periodística. Y parece serlo así.
Había llegado como “el último de la lista” del otrora diario Última Hora, con solo 21 años de edad. “Fue una experiencia de día a día, de muchas horas de trabajo (hasta 14 horas) y sin descansos; todo el sistema era muy lento. Recuerdo las horas de espera de cierre de suplementos (TV guía) y otros donde dormíamos donde podíamos esperando el material”, recuerda ahora con sus nacientes canas y nacidos unos nietos suyos.
La Goss Universal 45 fue el salto de La Razón a un mercado que exigía mayor calidad de nuestras ediciones, más allá de la calidad de nuestros contenidos.
Comprarla “fue una decisión por la demanda y la necesidad de aumentar las páginas en color, poder imprimir nuestras propias revistas como Cosas, Escape, Marcas, entre otras. Se optó por una nueva rotativa por sobre todo por el aumento de calidad en nuestras impresiones, el aumento de la capacidad y la velocidad”, dice Miranda.
Y también por “la inquietud de diversificar el negocio en impresiones, para así poder ofrecer otros servicios, como la impresión y acabado en libros, guías telefónicas, entre otros, a nivel industrial”.
Y así fue. Con la nueva rotativa, La Razón creció, hasta convertirse en referente respecto de los medios impresos en el país. “Esta rotativa es la más grande, moderna y única montada nueva en Bolivia”, dice con orgullo Miranda.
No solo La Razón, sino también Extra, el diario menor.
Esa compleja estructura de fierros, cables y tinta vio pasar millones de páginas que en parte de estos 30 años del diario más influyente del país contó la historia del país y del mundo, y las preocupaciones más sencillas de la sociedad.
A diferencia de la Goss Comunnity, la maquinaria de este diario en la Jorge Sáenz, la Goss Universal 45 es poderosa en todo sentido: estructura, integral, completa, veloz, óptima en impresión y color de calidad incomparable.
“El sistema de impresión es en rotativa offset, imprime en bobinas (papel periódico) a una velocidad de 45.000 pliegos (CS) por hora, en dos bandas (16 páginas tabloide), anverso y reverso, full color y compaginado, directo para su distribución”, resume Miranda.
Garantiza una impresión de 48 páginas en formato tabloide, 16 páginas full color y 32 blanco y negro. Además, puede imprimir en dos sistemas: cold set (impresión sin horno) de papel periódico y bond (papel no satinado) heat set (impresión con horno) para papel couché, LWC e high brite (papeles satinados) hasta 120 gramos.
Y para conocerla mejor, esta mimada de la tecnología del periodismo escrito en nuestro galpón tiene un sistema de impresión automático en los diferentes procesos: registro automático (sistema QTI “V”), “entintado” automático desde la consola, empalmadoras automáticas en marcha (Enkel), horno vertical torre 2 (4Hi) y mando de consola, control de mojadores (agua) y registro, rotovisión (controlador de eventos de la rotativa).
La gestión de la rotativa está a cargo de un equipo profesional grande: gráficos, ingenieros mecánicos, eléctricos y de sistemas; diseñadores gráficos y técnicos en electrónica y mecánica.
Su formación es equivalente al del equipo que procesa noticias, garantiza las ventas del diario o genera publicidad. Tienen el trabajo más duro; son el alma de La Razón.
*Éste es un espacio institucional de La Razón en el que compartiremos con nuestro público un detallado repaso a las tres décadas recorridas por este diario, mostrando los grandes hitos, los logros más importantes, los galardones, pero también los tropiezos y los momentos duros, como el que ahora nos ha tocado vivir. A partir de ahora, tanto en su versión impresa como en la digital, comenzamos a contar nuestra historia, pero con la mirada puesta en el porvenir. Acompáñennos.