El Salón de París marca la continua reinvención del automóvil
Feria. Las novedades son los híbridos del tipo enchufable que permiten reducir las emisiones
La reinvención continua del automóvil con nueva tecnología y una firme apuesta por el híbrido enchufable, sin renunciar al eléctrico puro, y todo bajo el denominador común de la reducción de emisiones, es la apuesta del Salón del Automóvil de París.
Al margen de las grandes estrategias de mercado, en esa edición del Salón de París se puede observar la deriva de las tendencias. Las marcas, al contrario de lo que ocurría en las últimas décadas, distancian sus estilos, de modo que el diseño y la personalización adquieren fuerza, al menos en un mercado “maduro” como el europeo, cuyos compradores buscan automóviles diferentes.
En propulsiones, la tendencia está directamente relacionada con la reducción de emisiones, haciendo acto de presencia masiva la arquitectura híbrida enchufable, los carburantes alternativos y una reducción (downsizing) de motores en cilindros y cubicajes.
Honda y BMW son los destacados en este apartado, especialmente el fabricante japonés, con un nuevo motor diesel de 1,6 litros y 160 caballos de potencia, asociado a una transmisión automática de 9 velocidades.
En híbridos, ha sorprendido la nueva línea de negocio abierta por Renault, al presentar su primer híbrido enchufable, el “eolab”, una tecnología que va a implantar en algunos modelos de la marca sin dejar de lado su apuesta por los vehículos 100×100 eléctricos.
Más sorprendente aún es el cambio exhibido por Lamborghini, al presentar un deportivo híbrido enchufable, el Asterion, movido por un motor V10 y tres eléctricos, que suman en conjunto 910 caballos de potencia.
Asterion es una figura de la mitología griega, mitad hombre y mitad toro, de forma que la marca italiana mantiene su relación con el mundo taurino, su símbolo de marca. Este Lamborghini responde a la estrategia top down, de arriba hacia abajo, en la electrificación del automóvil tradicional.
De la misma forma lo están haciendo Porsche, que en París presentó su tercer híbrido enchufable Cayenne e-Hybrid, o BMW, que después de su avanzado i8, baja a un terreno más convencional haciendo la hibridación del modelo X5.
En la avalancha híbrida plug in es destacado el papel del grupo PSA Peugeot Citroen y su apuesta por una hibridación a base de aire comprimido. Peugeot presenta el sistema a bordo de un 208 y Citroen, el C4 Cactus Airflow 2l, prototipo derivado del Cactus, ambos con un consumo por debajo de 2 litros.