Retiran polémico cuadro de Mujica y su esposa desnudos tras denuncia
"Es una chantada (tontería, estupidez, tomadura de pelo)", dijo Topolansky, quien aseguró que habló con un abogado y dejó el tema en sus manos, no queriendo ocuparse más de ello ni dar más declaraciones.
Un cuadro que retrata desnudos al expresidente uruguayo José Mujica y su esposa fue retirado de la galería de arte donde se exhibía en Montevideo tras una denuncia interpuesta por el exmandatario a las autoridades, confirmó este jueves a Efe la propietaria del lugar, Diana Saravia La pintura, obra del artista Julio de Sosa y titulada «Génesis Uruguay», muestra a Mujica y Topolansky como figuras centrales y desnudos en un jardín, a semejanza de las figuras bíblicas de Adán y Eva.
«Es una chantada (tontería, estupidez, tomadura de pelo)», dijo Topolansky a Efe, quien aseguró que habló con un abogado y dejó el tema en sus manos, no queriendo ocuparse más de ello ni dar más declaraciones.
Fuentes del Poder Judicial confirmaron a Efe que hubo una denuncia vía policial de una persona de la que no se quiso concretar su identidad y que fue remitida a la jueza Blanca Rieiro.
A raíz de ello, unos agentes de policía se presentaron en la galería de arte y expresaron a Saravia el malestar generado por la obra, pidiendo que la pintura fuera «bajada» y que no se exhibiera al público, detalló a Efe la galerista, quien accedió al reclamo de los agentes.
«Los personajes están desnudos porque son austeros y él (De Sosa) también vive de esa manera, él realmente los adora, cree que son importantes y, de alguna forma, quiso homenajearlos», explicó Saravia sobre las intenciones del pintor.
Por su parte, Mujica manifestó al medio local Telenoche que el artista y la galería «tienen derecho a ganarse unos pesos» pero que «las cosas tienen un límite».
En tanto, Saravia aseguró que la obra le pareció «linda» y que decidió darle un espacio como una forma de «difundir el arte nacional».
«Le doy la oportunidad a quien puedo y, en este caso, se la di a la obra de Julio, que es un artista joven y que viene normalmente», señaló en ese sentido.
En un principio, a la obra se le fijó un precio base de 400 dólares pero Saravia reconoció que a raíz de la polémica que se generó, la difusión en redes sociales y medios de comunicación, ese número se incrementó y ahora no sabe qué puede pasar.
«Somos artistas todos, queremos vivir de lo que hacemos. El artista ama lo que hace, entonces es complicado que te saquen una obra o que no te dejen libre con lo que haces… No está bueno», concluyó la galerista. (21/10/2016)