El Senado argentino convirtió en ley ayer, por abrumadora mayoría (55 votos a favor, una abstención), el proyecto de identidad de género, que autoriza a los ciudadanos a elegir si  colocar “hombre” o “mujer”  como sexo al momento de registrar sus datos en el documento de identidad. Las comunidades travestis y transexuales recibieron la noticia con júbilo.

La ley tenía media sanción: había sido votada ya por la Cámara de Diputados en noviembre. En la misma jornada, el Senado sancionó la ley de “muerte digna” en casos de enfermedades terminales e irreversibles, como el de una niña de tres años en estado vegetativo, cuya madre bregó sin tregua en los despachos del Congreso para que dejen morir dignamente a la pequeña.