El muftí de la república norcaucásica rusa de Kabardino-Balkaria, Anas Pshijachov, fue asesinado ayer frente a su domicilio, informó un portavoz de la Administración Espiritual de los Musulmanes (AEM) de la región.

«Dos desconocidos llamaron a la vivienda del jefe de la AEM (Pshijachov) para que saliera. En la calle le dispararon no menos de cuatro veces. Pshijachov murió en el acto», señaló a la Interfax. La víspera el muftí participó en una mesa redonda en la capital de la república, Nálchik, en la que criticó el creciente nacionalismo en Moscú y otras partes de Rusia.

El asesinato coincide con la tensión interétnica que ha estallado entre ultranacionalistas rusos y caucasianos musulmanes en Moscú tras el asesinato hace 10 días de un aficionado del Spartak Moscú a manos de un hombre oriundo de Kabardino-Balkaria.

La Policía detuvo ayer en Moscú a casi un millar de ultranacionalistas y caucasianos, algunos armados con pistolas y cuchillos, para prevenir enfrentamientos. El presidente Dmitri Medvédev ha enfatizado que de las 182 etnias existentes, 57 profesan el islam, credo que es observado por unos 20 millones de rusos.