Los chilenos agredidos por sus esposas, novias o parejas aumentaron un 17% entre 2010 y 2012, al incrementarse las denuncias de ese tipo de 17.530 a 20.558, según la Policía.

En el mismo periodo, las detenciones de mujeres agresoras aumentaron de 1.173 a 1.720. Si bien las cifras aún están lejos de la violencia en sentido inverso, de los hombres contra sus parejas (una de cada dos chilenas dice haber sufrido algún tipo de violencia), en ambos casos el perfil de la víctima es similar: una baja autoestima e indefensión.

El 38,24% de los casos de maltrato hacia un hombre consiste en daño verbal y psicológico; 22,23% a golpes de manos y pies; 4,40% a golpes con objetos contundentes y 1,95% a ataques con armas cortantes.