El Reglamento de la Ley de Extranjería de España entra en vigor el 30 de junio e incorpora requisitos para solicitar la regulación por arraigo, estimula el retorno voluntario y mejora la protección de víctimas de violencia de género.

Con la nueva regulación, las víctimas extranjeras de violencia de género y de trata podrán obtener un permiso de trabajo y residencia, además de suspenderse el procedimiento de expulsión si se hubiera abierto por su irregularidad.

El reglamento de la ley, aprobada el 2009, también fija los requisitos para la reagrupación familiar o para la regulación por arraigo y concreta «elementos mínimos» que deben incluir las administraciones en sus informes de integración y que deberán ser resueltos por el Gobierno.

Los inmigrantes que tengan un hijo de nacionalidad española a su cargo podrán regularizar su situación en España gracias al nuevo «arraigo familiar», que se plantea en los casos en que los progenitores proceden de un país que no concede automáticamente la nacionalidad al recién nacido.

La nueva regulación, que incluye 266 artículos, recoge los requisitos para conseguir la regularización por «arraigo laboral» y «arraigo social», que se podrá conceder a extranjeros que acrediten su permanencia y trabajo durante más de dos años, o quienes hayan vivido en España al menos tres años.

En ambos casos, deberán contar con un contrato de trabajo, establece la norma.