El gobierno de Raúl Castro permitirá a los cubanos a partir de octubre abrir pequeños negocios en 178 actividades y alquilar viviendas, como parte de su plan de eliminar 500.000 empleos estatales en los próximos seis meses, según un artículo publicado en Granma.

«La medida de flexibilizar el trabajo por cuenta propia es una de las decisiones que el país toma en el rediseño de su política económica, para incrementar niveles de productividad y eficiencia», anunció la publicación del órgano del gobernante Partido Comunista.

La viceministra de Trabajo y Seguridad Social, Admi Valhuerdi, explicó que en 83 de las 178 actividades de «trabajo por cuenta propia» —siete nuevas y 29 reactivadas tras años congeladas—, ya se podrá contratar libremente fuerza de trabajo, no sólo familiares.

El Gobierno pretende eliminar en los próximos años más de un millón de trabajos —500.000 entre octubre y marzo del 2011— que sobran en el Estado, un 20% de la fuerza laboral de 5 millones.

En Cuba hay 143.000 pequeños negocios autorizados en los años 90 para encarar la crisis económica por la caída del bloque soviético, pero por documentos a los que la prensa tuvo acceso, el Gobierno prevé que 465.000 de los cesantes sean absorbidos por pequeños negocios y cooperativas. El Gobierno permitirá, además, a los cubanos alquilar sus casas en pesos convertibles (CUC, equivalente al dólar), incluso si salen legalmente del país.