Más de 5.000 policías de toda España marcharon ayer vestidos de civil en la capital, Madrid, y protestaron por los ajustes, los recortes salariales y la inseguridad laboral.

Los efectivos se congregaron para denunciar las reducciones de salarios y de personal en la Policía, tres días después de la huelga general implementada contra el plan de austeridad del gobierno de Mariano Rajoy.

Los agentes caminaron bajo la lluvia, convocados por el Sindicato Unificado de Policía (SUP), mayoritario en el cuerpo, para trasladar al Ministerio del Interior su malestar por los recortes salariales a sus afiliados. A la manifestación se sumaron otros colectivos de la Guardia Civil y de las policías autonómicas catalana y vasca.

La protesta estuvo encabezada por una pancarta con el lema “Trabaja según te pagan, trabaja según te tratan. Por nuestros derechos. Policías de España en conflicto”. La medida de presión comenzó en la plaza de Rubén Darío, amenizada con música española y con los sonidos de silbatos, sirenas y petardos.

“Ciudadanos, os pedimos perdón por no poder detener a los auténticos responsables de esta crisis: banqueros y políticos”, proclamaba otro cartel que resaltó en la movilización.

“Cada año se van entre 1.500 y 2.000 policías y entran 125, por lo que en tres o cuatro años habrá más inseguridad y más delitos en España”, advirtió José María Sánchez Fornet, secretario general del SUP, en un discurso pronunciado ante la sede del Ministerio del Interior.

“Con los días que nos han quitado, más la paga extra, más los recortes en el salario, hemos perdido unos 300 euros mensuales”, afirmó Anxos Lores Tomé, una agente de 36 años que vino de la localidad gallega de El Ferrol (noroeste). Esta funcionaria que ingresó a las filas policiales hace diez años con un sueldo de 1.500 euros (poco más de $us 1.900), manifestó que ahora gana 1.450.

Reivindicaciones. Las principales reivindicaciones de los policías son que no se suprima la paga extra, que se les mantenga los días libres y que no se descuente a los agentes en segunda actividad (prejubilación), a los que se les está quitando una media de 70 euros (casi $us 90) al mes de su nómina.

“Como no tenemos derecho a hacer huelga, como nos habría gustado el pasado miércoles durante la huelga general, nos manifestaremos porque en el colectivo hay muchas ganas de conflicto por el maltrato que estamos sufriendo”, señaló Sánchez Fornet.

En la última movilización convocada por esta formación hace tres años, se congregaron unas 6.000 personas.