El presidente de EEUU, Barack Obama, denunció los planes de los líderes republicanos en el Congreso de derogar la reforma financiera que promulgó en julio, al afirmar que sería un «terrible error» que haría retroceder.

En su tradicional alocución radial de los sábados, Obama recordó ayer a los republicanos que la mayor reforma financiera desde la Gran Depresión protegerá a los estadounidenses de prácticas injustas en las transacciones hipotecarias y de embargos hipotecarios.

La reforma de Wall Street establece nuevas reglas para que los contribuyentes nunca más tengan que volver a rescatar a una gran entidad financiera, ayuda a frenar los acuerdos secretos y apuestas imprudentes que casi hundieron el sistema financiero, y crea las medidas más firmes de protección al consumidor en la historia, dijo.

El Mandatario destacó que en los últimos dos años, EEUU ha ganado numerosas batallas para defender los intereses de la clase media y una de las más importantes fue aprobar la reforma financiera. La reforma incluyó medidas de protección severas para poner fin a muchas de las tarifas ocultas, hipotecas engañosas y prácticas abusivas.