El presidente de EEUU, Barack Obama, promulgó la ley aprobada el martes por el Congreso sobre rebajas impositivas que saca al país, al menos parcial y temporalmente, del “precipicio fiscal”.

Obama viajó a Hawai para reunirse con su familia en las vacaciones navideñas que interrumpió el 27 de diciembre, le puso su firma, según la Casa Blanca, el mismo día 2 a la llamada ley “De Alivio para los Contribuyentes”.

Esta ley convierte en permanentes los beneficios fiscales otorgados hace una década y las amplía para individuos con ingresos por debajo de $us 400 mil anuales o parejas con ingresos de hasta $us 450 mil anuales que hacen una declaración impositiva conjunta. Esas rebajas, que antes se aplicaban a familias con ingresos de menos de $us 250 mil anuales, debían haber expirado el 31 de diciembre.

La ley tiene efecto retroactivo al 1 de enero de 2013, y prevé, entre otras cosas, el fin de una rebaja de dos puntos porcentuales en el impuesto sobre los sueldos.

La medida también prorrogó el subsidio por desempleo que debía expirar el 31 de diciembre y que beneficia a unos 2,3 millones de personas en Estados Unidos que han estado sin trabajo remunerado durante más de 26 semanas. El acuerdo evita también la reducción de los reembolsos a los médicos que proveen servicios bajo el programa Medicare de subsidio para los ancianos.