Campbell vuelve ‘loco’ a Uruguay
El delantero de Costa Rica generó permanente peligro
El delantero del Olympiakos griego Joel Campbell fue una auténtica pesadilla para la defensa de Uruguay y con su gol a los 54 minutos lideró la reacción de Costa Rica para llevarse la victoria 3-1 en su debut en el Grupo D del Mundial de Brasil-2014.
Campbell, a quien la defensa celeste nunca encontró la manera de neutralizar, marcó el tanto del empate a los 54 minutos con un violento zurdazo cruzado en el área mayor que dejó parado al portero Fernando Muslera, tras un centro al punto penal de Gamboa. “Es un hombre desequilibrante, sorpresivo, con cambio de ritmo, que se hizo incontenible para los defensas de Uruguay”, lo elogió tras el partido el técnico de Costa Rica, el colombiano Jorge Luis Pinto. El delantero del Olympiakos, curtido en cuatro ligas europeas pese a tener solo 21 años, hizo un debut en tromba en la máxima cita del fútbol.
El único punta que dispuso Pinto ya había avisado a los 28 minutos con un violento remate desde unos 25 metros que pasó rozando el ángulo derecho del arco de Muslera. También volvió a intentarlo a los 63’ con un remate desde media distancia que pasó muy cerca del palo derecho de Muslera, cuando ya Costa Rica había pasado al frente.
Campbell fue elegido el mejor jugador del partido por la FIFA y el delantero dijo al respecto que “es un honor recibir este premio, pero esto no valdría nada si no fuera por el esfuerzo de mis compañeros”.
“Todo el equipo fue la estrella del partido, todos jugamos bien”, aseguró el delantero, que volverá al Arsenal inglés, dueño de su ficha, en la próxima temporada.
“Desde el inicio sabíamos que podríamos ganar, la mentalidad del equipo estaba muy fuerte y pese a que empezamos perdiendo nadie se vino abajo, sabíamos que debíamos primero empatarlo para después ir por la victoria”, agregó Campbell.
El delantero tico aseguró que la victoria ante Uruguay es “un primer paso, no es todo para el Mundial”.
“Faltan dos partidos, estamos tranquilos y esperamos sacar buenos resultados para poder clasificar a octavos de final”, finalizó Campbell.
Costa Rica logró una resonante victoria por 3-1 sobre Uruguay en la apertura del grupo D del Mundial.
Apuntes
Pinto. “Fueron claves la tranquilidad y la calma”, según el DT de Costa Rica, Jorge Luis Pinto.
Tabárez. “Es un golpe duro, pero tenemos que reponernos”, responde Óscar Tabárez.
¿A qué jugó Uruguay?
Óscar Dorado Vega
es corresponsal en Bolivia de FoxSports.
Ni siquiera sirvió el envión anímico producto de la ventaja que Cavani tradujo desde el punto penal. Uruguay fue ayer, en Fortaleza, una sombra de sí mismo. No tuvo fútbol. Ni alma. No ganó una sola pelota en el juego aéreo que rondó su área y, para colmo, la ofuscación con la que terminó derivó en la tarjeta roja —primera del torneo— a Maximiliano Pereira.
El desenlace hay que argumentarlo no solo, por supuesto, en el fantasmal desenvolvimiento de la celeste. Costa Rica hizo lo suyo. Y muy bien. Equipo sobrio y efectivo el centroamericano. Supo cómo debía jugar —diferencia sustantiva en torno a lo propuesto por los del “Maestro” Tabárez— y desde el arco (Navas), pasando por la zaga (Díaz), continuando en el medio (Bolaños) y rematando en el ataque ( Campbell, el mejor del partido) tuvo puntos altos que le permitieron un segundo tiempo redondo.
Es cierto que penó la ausencia de Suárez, pero acaso más que eso a los charrúas les pasó factura la carencia de renovación. Parece ser, a la luz de lo visto, una estructura desgastada, deteriorada luego de tantas batallas. Y uno lo escribe porque tampoco emergió el espíritu que lo caracteriza históricamente. Lento de piernas y de mente. Asumió que el uno a cero parcial implicaba tarea hecha y descreyó de la reacción, del carácter, del oponente. Acabó pagándolo muy caro.
Los “ticos” encontraron revancha luego de aquel repechaje que los dejó sin ir a Sudáfrica, hace cuatro años. Y ganaron en buena ley. Sin que nada ni nadie deba discutir su histórico éxito. Mostraron no solo individualidades interesantes. También un andar armónico, simple, que combinó velocidad y pausa. Aparte, un notable empleo de la pelota parada. El crédito les queda abierto frente a otros dos campeones del mundo.