Para hoy se tiene programada una reunión entre el presidente de la región de Cajamarca, Gregorio Santos (quien lidera las protestas contra un proyecto de la empresa estadounidense Newmont), con una misión de la Iglesia Católica que busca facilitar el diálogo con el Gobierno.

El encuentro será la primera señal en nueve meses de un intento por acercar posiciones entre comunarios de la región y el Gobierno central por el proyecto Conga. Un inicio auspicioso podría derivar en más reuniones de cara a lo que hasta ahora parece un acuerdo imposible, debido a las posiciones irreductibles.

El proyecto Conga, que impulsa la minera Yanacocha, es rechazado por buena parte de la población de Cajamarca, porque teme que afecte al medio ambiente de la región, incluidas las fuentes de agua; por cuanto prevé el secado de cuatro lagunas altoandinas y su reemplazo por reservorios de agua artificiales. Los cajamarquinos que se oponen a la iniciativa compararon la codicia de los españoles con la de las mineras extranjeras que los despojan de sus riquezas, contaminan sus tierras y ríos, y los hacen más pobres al incrementar la brecha de desigualdad.

Sin embargo, cuenta con la bendición de vastos sectores que no quieren que la región pierda esta inversión de $us 4.800 millones. El gobierno de Humala apoya el proyecto Conga como parte de su política de fomentar una minería responsable y cuidadosa del medio ambiente.