El régimen de Bachar al Asad perdió ayer el control del mayor campo de petróleo de Siria, el yacimiento de Al Omar, en el noreste del país, tras intensos combates contra los rebeldes islamistas.

Milicianos del Estado Islámico de Irak y del Levante (Siria) y del Frente al Nusra, ambos vinculados a Al Qaeda, y miembros de otros grupos afines tomaron el campo, situado en la provincia de Deir Zur, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Los choques en la zona entre los combatientes y los efectivos gubernamentales comenzaron anoche y se prolongaron hasta esta mañana.

El yacimiento de Al Omar es el más importante de Siria con una capacidad de producción de 75.000 barriles al día.