El naufragio del navío Sewol dejó historias de héroes y de ‘villanos’
Un alumno se ahogó por ayudar a su amigo; 11 tripulantes son acusados
El miércoles 16 Jung Chawong se quitó el chaleco salvavidas y se lo puso a un compañero. Luego el agua lo absorbió. Aquello sucedió justo un día antes de cumplir 17 años. Su historia naufragó en la tragedia del buque surcoreano junto a más de 300 pasajeros.
El portal electrónico lainformacion.com cuenta que “Chawong murió aunque antes demostró la nobleza de su corazón. No lo dudó ni un segundo. Cuando vio que sus compañeros y amigos estaban atrapados, decidió dar su vida por ellos y prefirió que ellos se salvasen”.
El día de su cumpleaños, tras la recuperación del cuerpo sin vida de Chawong, sus compañeros del instituto Danwon de Ansan recordaron al presidente de curso como un héroe. Le dedicaron mensajes en Twitter como: “¡Un gran héroe en su cumpleaños, se ganó el pase directo al cielo! QEPD (sic)”.
No fue el único héroe en el ferry Sewol que viajaba con 477 personas —325 estudiantes de Danwon de entre 16 y 17 años— antes de que sea absorbido por el océano. Hasta el sábado solo 174 personas fueron rescatadas y se reportaron 187 fallecidas y 115 desaparecidas.
Según el mismo portal, Park Jinyoung tenía 22 años y llevaba seis meses en la tripulación del navío. La mujer de origen humilde trabajaba para ayudar a su familia. “Park fue toda una heroína durante los momentos más tensos del accidente. Cuando la embarcación empezó a hundirse, a diferencia del capitán, permaneció a bordo ayudando a la gente”. Cuando el buque empezó a ladearse, encontró chalecos salvavidas en el cuarto piso del transbordador y fue corriendo hacia los estudiantes encerrados en el tercer nivel.
Algunos le preguntaron por qué no vestía el chaleco salvavidas y contestó que “la tripulación es la última en abandonar el barco”. También les dijo que prefería salvarlos primero y que luego se ocuparía de su vida. Los ayudó hasta que el agua le llegaba al pecho. Empujó a los alumnos hacia las afueras de la embarcación, hasta que le encontró la muerte. Es otra de las historias de valor en una de las mayores catástrofes navales de Corea del Sur en los últimos 20 años.
La otra cara de la medalla la dieron 11 tripulantes que están acusados de homicidio. Las causas de la tragedia apuntan a la negligencia de éstos o a problemas estructurales del navío. Uno de los más criticados es el capitán Lee Joon-seok. A sus 68 años y catalogado por los medios asiáticos como un “viejo lobo de mar”, tardó 40 minutos en dar la orden de desalojo. Fue detenido por la Policía y declaró que se sentía profundamente avergonzado. No fue capaz de dar la cara y se cubrió el rostro ante las cámaras de televisión. “No sé qué decir”, afirmó. Los tripulantes fueron tachados de cobardes y villanos en las redes sociales y hasta la Presidenta coreana se mostró sorprendida por su falta de compromiso con los pasajeros.
A otros el peso de la tristeza los fue aplastando. Tres días después, el subdirector de la escuela Danwon, Kang Min-Kyu, de 52 años, se ahorcó. “Como encargado de la seguridad de los estudiantes, sufría de graves sentimientos de culpa”, dijo un profesor que no quiso ser identificado. “Las familias de las víctimas expresaron su ira contra él y su corazón quedó destrozado”, reseña milenio.com. Una muestra más de que el desastre del ferry dejó —y aún deja— historias de héroes, de dolor y hasta de cobardía.
‘Era difícil rescatar a los alumnos’
Un pasajero contó a la cadena BBC la difícil decisión de saltar por la borda y salvarse, dejando atrás a alumnos que intentaba ayudar en el ferry Sewol, cuando ocurrió una de las mayores tragedias navales de la historia de Corea del Sur. “Estábamos intentando sacarlos… pero era muy difícil. Fue cuando decidimos abandonar la nave, pero ahora lamento haberlo hecho”, sostuvo Eun-su Choi, un conductor de camiones.
Estaba en la cubierta, había salido a fumar tras el desayuno. “Súbitamente el ferry empezó a ladearse y a hundirse. Los contenedores empezaron a caer al mar. Fue cuando me di cuenta de que se iba a volcar (…). Estaba aferrado al pasamano. Traté de ayudar a algunos de los estudiantes que se encontraban en la cafetería arrodillados cerca de la caja registradora, pero se resbalaban. Intentamos sacarlos con la ayuda de una manguera para combatir incendios, pero era muy difícil rescatarlos”. Uno de sus amigos salvó a una niña de seis años.
Un mensaje, 40 minutos más tarde
Un tripulante y un guía en tierra:
—Si este ferry evacua a los pasajeros, ¿ustedes podrán rescatarlos?
—¡Que se pongan salvavidas y que escapen!
—¿Serán rescatados de inmediato?
—¡No los deje ir descubiertos. Es rescate de vidas humanas!
—No hablo de eso. ¿Serán rescatados?
1945 fue un año de luto en la vida naval
MV Wilhelm Gustloff
31 de enero de 1945
Transatlántico de línea alemana que entró en servicio en 1938. En la Segunda Guerra Mundial fue torpedeado por el submarino soviético S-13. Fallecieron 9.343 personas a bordo.
General von Steuben
10 de febrero de 1945
Fue un barco de lujo. En 1939 fue reconvertido en buque de transporte de tropas acorazado durante la Segunda Guerra Mundial. Fue torpedeado y murieron 4.500 pasajeros.
Yamato
7 de abril de 1945
Acorazado de la Armada Imperial Japonesa en la Segunda Guerra Mundial. Atacado y hundido por aviones y torpederos de Estados Unidos, lo que causó la pérdida de 2.475 vidas.
El Goya
16 de abril de 1945
Fue un barco hospital alemán hecho en 1940 en Oslo. Fue hundido lleno de refugiados por un submarino soviético durante la Segunda Guerra Mundial. Murieron casi 7.000 personas.