Romero: Quienes se oponen al cuartel, apoyan al narcotráfico
Yapacaní. Advierte que ‘agitadores’ buscan que haya muertos
El Gobierno sostiene que las personas que se oponen a la construcción de un cuartel de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) en la localidad cruceña de Yapacaní están vinculadas al narcotráfico. Además, advierte que los “agitadores” mienten y buscan muertos en movilizaciones.
La denuncia la hizo el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en una entrevista que concedió al canal estatal BTV junto al viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez. En ésta remarcó que la zona de Yapacaní fue calificada como zona roja, por las actividades ilícitas que existen en el lugar.
“Quienes se oponen a la construcción del cuartel son aquellos que tienen intereses vinculados al narcotráfico. No queremos que en Yapacaní reine la ley del pichicatero (narcotraficante), no queremos que se convierta en un territorio que se someta a la ley y autoridad de pichicateros, queremos que Yapacaní sea lo que fue históricamente para Santa Cruz y Bolivia, una zona productora”, manifestó Romero.
Proyecto. El miércoles, pobladores de Yapacaní bloquearon el camino Santa Cruz-Cochabamba en rechazo al colocado de la piedra fundamental para la construcción del cuartel antinarcóticos, bajo los argumentos de que querían que el área tenga otra utilidad y que temían abusos de parte de los efectivos en operativos. Pese a la oposición y a un enfrentamiento con gasificación, el Gobierno inauguró la construcción del cuartel.
Ante las protestas, Romero aseveró que es sospechoso el rechazo a la construcción de la repartición que se asentará en el lugar, puesto que en otras regiones del país este tipo de obras son las más solicitadas por la gente, todo para obtener seguridad y control de la delincuencia.
Explicó que existen “agitadores” que están vinculados al narcotráfico y le mienten a la población de Yapacaní e indican que con la llegada de la Policía Boliviana se darán violaciones a sus mujeres o que sus patrulleros provocarán accidentes de tránsito, entre otros, todo con el objetivo de que la población se oponga a la construcción del cuartel y salga a las calles.
“Estamos hablando de delincuentes peligrosos que tienen armas, avionetas con una estructura económica poderosa, y eso queremos controlar y expulsar de Yapacaní; no puede ser que algunos agitadores irresponsablemente colaboren con estos narcotraficantes”, reclamó la autoridad gubernamental.
Romero también advirtió que todas las acciones de rechazo que generan algunas personas son manipuladas por los narcos y, según informes de Inteligencia, estaría dentro de sus planes realizar movilizaciones para generar violencia y provocar a la Policía a que reaccione contra ellos.
“Quiero advertir públicamente a la población que quienes se oponen (a la obra) no se conformarán con redactar votos resolutivos, sino que buscarán muertos, heridos, provocar violencia y echar la culpa a la Policía Boliviana”, denunció Romero y luego instó a los pobladores, ante este hecho, a expulsar de la región a los “agitadores” controlados por los narcos, esto para que haya tranquilidad con los uniformados.
Pese a las movilizaciones, el Gobierno nacional ratificó la construcción del cuartel de Umopar, ya que en los dos últimos años los municipios de San Germán, Kilómetro 7 y Buena Vista pasaron a ser considerados como “el epicentro de producción de cocaína”. Ahora el objetivo es tomar el control de la zona.
Romero recordó que hace dos años se instaló un cuartel provisional para confirmar o desechar la producción de cocaína, aspecto que fue corroborado por efectivos antinarcóticos, ya que hasta la fecha lograron decomisar 15 toneladas de droga y destruir 6.021 fábricas móviles, 39 laboratorios de cristalización de clorhidrato de cocaína y otro tanto de pistas clandestinas de aterrizaje vinculadas al narcotráfico.
Inversión para la obra
Trabajo
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, afirmó que el cuartel en Yapacaní costará al menos 1 millón de euros ($us 1,37 millones), con apoyo de la Unión Europea. Esta obra permitirá que policías puedan desplazarse en la zona, donde operan unos 100 efectivos.
UNODC apoya la construcción del centro
El delegado de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en Bolivia, Antonino de Leo, expresó su apoyo al Gobierno para la construcción del cuartel de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar) en la localidad de Yapacaní, departamento de Santa Cruz. El representante del organismo internacional hizo referencia al conflicto que existe en Yapacaní, ante las consultas de los periodistas en un acto realizado por el Ministerio de Gobierno.
“Quisiera expresar mi respeto y solidaridad a los planes del Ministerio de Gobierno y del Viceministerio de Defensa Social, de establecer un cuartel importante en la zona de Yapacaní que, en este tiempo, se calificó como una zona roja de producción ilícita de cocaína y del narcotráfico”, sostuvo el delegado de la UNODC.
También indicó que las autoridades nacionales deben dialogar con los pobladores de la región, pero también ellos tienen que entender que se trata de establecer la legalidad y control en la zona, además que este aspecto está dentro de los objetivos de la estrategia nacional de lucha contra el narcotráfico en Bolivia. El miércoles, un grupo de pobladores de Yapacaní realizó protestas contra la construcción del cuartel de Umopar en la región.