Audios y videos con mensajes polémicos sacuden al MAS
Autoridades y candidatos del partido de gobierno aseguran que fue un ‘montaje’ y anticiparon acciones legales para hallar a los responsables
Registros audiovisuales, protagonizados por una autoridad de Estado y varios postulantes del Movimiento Al Socialismo (MAS) saltaron esta semana a las redes sociales con mensajes polémicos. En uno de ellos, se escucha al viceministro de Gobierno, Jorge Pérez, amenazando con “fusilar” a los “traidores” al MAS. Otro material audiovisual, muestra a la candidata a la Alcaldía de Oruro, Rossío Pimentel, llamando “perro” al presidente Evo Morales. Ayer, la aspirante aseguró que se trata de un montaje, por lo que hizo la denuncia ante el Ministerio Público y afirmó que tras este incidente recibió el respaldo de Morales. “Me declaro víctima de la gente que no quiere dejar a las mujeres ser parte de la contienda electoral”, afirmó Pimentel.
Registros. Además, un tercer video devela la molestia de Reymi Ferreira, postulante a la silla edil cruceña, contra sus militantes cuando éstos le piden gorras durante un acto público, en el marco de la campaña proselitista que debe concluir el 25 de marzo, según el calendario electoral vigente. Ferreira se limitó a decir que gracias al incidente, un militante le donó 1.000 gorras, de tal manera de llegar a los barrios alejados donde serán repartidas en lo que queda de la campaña.
En el caso del registro de audio, se oye al viceministro Pérez reclamar el haber encontrado material de campaña destruido del candidato a la Alcaldía de Tarija, Rodrigo Ibáñez (MAS). Además, advierte con echar de la Gobernación a quienes no hagan campaña por ese candidato. “A los traidores se los debe fusilar, qué pena que aquí no se los pueda fusilar, pero todo el peso nuestro de censura y de marginamiento de cinco años les vamos a hacer sentir a esos compañeros”. señaló la autoridad según este registro que se hizo viral en las redes sociales.
La oposición en la Asamblea Legislativa afirmó que el viceministro cometió el delito de coacción, tipificado en el artículo 238 de la Ley 026 de Régimen Electoral, por lo que anunciaron una denuncia en el Órgano Electoral y ante la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA ) que está en el país. “Ésta es una manera de ejercer presión electoral”, afirmó el senador tarijeño Fernando Campero Paz, de la alianza opositora UD.
En respuesta, ayer el aludido afirmó que se trata de una grabación montada y acusó al exgobernador de esa región Mario Cossío de gestionar la difusión de una reunión privada de la militancia. “Estábamos haciendo una reflexión interna con los compañeros (…). Rechazo enfáticamente el sentido distorsionado que le han pretendido dar a una sobreposición de declaraciones”, manifestó.
Respecto a Pimentel, en un video grabado con un teléfono celular que dura casi tres minutos, habla sobre un acto oficial del 6 de agosto en el que participó con Morales. En el material se escucha: “mi mano me ha besado ese cojudo” y “estaba refeliz el perro este”, dando a entender que el evento fue exitoso junto al Mandatario. Pimentel insistió que fue montaje.
El MAS y Sol.bo cruzan denuncias
En la recta final de la campaña electoral por la Alcaldía de La Paz, la agrupación Soberanía y Libertad (Sol.bo) y el Movimiento Al Socialismo (MAS), favoritos en las encuestas, intercambiaron denuncias. Por una parte, el aspirante a concejal por Sol.bo Pedro Susz denunció que el coordinador político de la campaña del MAS, Milton Jaime Cruz fue designado por el Tribunal Electoral Departamental (TED) de La Paz como encargado de capacitación de jurados electorales en la Circunscripción 9. “Por decir lo menos, es incorrecto y cuestionable”, afirmó Susz.
Luego, el candidato a concejal por el Movimiento Al Socialismo (MAS) Jorge Silva denunció que Nicol Balderrama, postulante a concejal por Sol.bo aún trabaja en la Alcaldía de La Paz, cuando debía renunciar tres meses antes de los comicios. El candidato afirmó que la citada funcionaria tiene una asignación salarial que supera los Bs 12.000. Tras el intercambio de acusaciones, ninguna de las partes entregó descargos. Las denuncias aún no llegaron al Tribunal Electoral Departamental.