El estudio y becas atraen más a los jóvenes para servir a la patria
La afluencia de jóvenes a los servicios militar regular y premilitar es destacada por las FFAA y el Gobierno. Ambas modalidades obtienen gran respuesta de los estudiantes
La coexistencia del servicio militar regular y el premilitar (desde 1997) no tiene influencia negativa de uno sobre el otro, pues las Fuerzas Armadas consideran que la respuesta de jóvenes crece porque éstos pueden estudiar paralelamente y por la oferta de becas.
Ya se cumplieron 18 años de vigencia continua del servicio premilitar para estudiantes de 5° de secundaria en guarniciones de grandes y pequeñas unidades del Ejército boliviano, Brigadas y Grupos Aéreos, y Distritos y Batallones de la Armada. Esta modalidad se instauró en 1997, mediante el Decreto Supremo Nº 24527 firmado por el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada. Según el artículo 108, numeral 12, y el artículo 249 de la Constitución Política del Estado (CPE) el servicio militar es obligatorio para todos los jóvenes de entre 17 y 20 años.
Enlistar. El general Jorge Reque Lora, jefe de la Dirección Territorial Militar, informó a La Razón que por año se licencian un promedio de 18.000 premilitares en el país, hecho que demuestra que existe gran afluencia de jóvenes a las unidades, pero que éste no afectó al servicio regular obligatorio en sus dos escalones.
“Podría decirse que (el premilitar) sí afectó hace tres años, pero los números ahora indican lo contrario. Hay largas colas para el primer y segundo escalón. Entonces, el servicio premilitar ya no tiene incidencia. Una muestra es que el año pasado, en el primer escalón (enero) se llegó al 100% en cuatro semanas y en el segundo (a medio año), al 95%”, afirmó Reque.
La autoridad castrense aseguró que hay jóvenes que optan por el servicio militar porque desde la vigencia del Decreto Supremo Nº 1875, se autoriza la continuidad de estudios del conscripto. Es decir que si un estudiante ingresa al cuartel, puede salir a clases en el colegio o instituto, mientras recibe la instrucción respectiva.
“La expectativa por el servicio militar ha crecido mucho por los cambios desde el Estado, con la continuidad de estudios, la asignación de becas a los mejores soldados a institutos militares como el Colegio Militar y convenios con centros de estudios. Además, los jóvenes salen de los cuarteles con un nivel de instrucción de técnico medio. Ahora, el servicio militar ya es considerado una universidad”, sostuvo el oficial superior.
Destacó también que entre otros beneficios que reciben los conscriptos están la alimentación y el estipendio que se les da mensualmente, que llega a Bs 80. En el caso del servicio premilitar este año se completó los cupos habilitados, pero por la gran demanda se amplió 170 plazas para las unidades militares de La Paz y 350 para las de Cochabamba.
El ministro de Defensa, Reymi Ferreira, sostuvo que la concurrencia de jóvenes a los cuarteles se da porque se logró compatibilizar el servicio a la patria con el estudio y también por el crecimiento vegetativo de la población. Añadió que otro factor para el premilitar es la reducción del monto de inscripción de Bs 1.600 a 1.000.
Recordó que para los premilitares se hicieron cambios en los requisitos porque la conducta disciplinaria y la salud son prioridad, para evitar cualquier conflicto, ya que quienes no tengan exámenes de sangre o sufran de problemas respiratorios no podrán ser habilitados para la modalidad.
“Respecto al servicio regular, el crecimiento se dio debido a que los jóvenes con mejor desempeño acceden a becas para institutos militares, además de que reciben la formación técnica. Hoy en más del 70% de las unidades militares los conscriptos pueden salir con una carrera. Son facilidades que se fueron profundizando y que hacen atractivo el servicio militar”, manifestó Ferreira.
La autoridad gubernamental aseguró que existe un cambio profundo en la institución castrense impulsado por el presidente Evo Morales. Admitió que actualmente hay “algunas prácticas de abusos a los derechos humanos”, pero señaló que a comparación de hace ocho años hay un cambio porque las FFAA ahora tienen más asociación con el desarrollo, la sociedad y la protección de las fronteras.
Carlos Santander, un padre de familia de un premilitar que esperaba junto a su hijo ser enlistado en la Escuela de Policía Militar, en el Estado Mayor, dijo que el servicio le ayuda a su hijo para seguir estudiando sin perder un año en el cuartel, ya que con ello podrá postular a la universidad.