Pese a los choferes infractores, Cochabamba votó sin contratiempos
La Policía destinó 2.500 uniformados para el control en 488 recintos, 137 ubicados en el municipio de Cercado y 351 en las provincias.
Con 112 vehículos retenidos por circular sin autorización (una de las ciudades con más infractores) y 36 personas detenidas por ingerir bebidas alcohólicas, comenzó la jornada de referéndum constitucional en el valle. La Policía también detectó motorizados con autorización que trasladaban pasajeros.
“Alto, su licencia por favor”, dijo el suboficial Mercado, que detuvo a cuanto motorizado circulaba por la avenida Ecológica, camino a Tiquipaya. “Estamos controlando porque hay autos con autorización que trasladan pasajeros, esto no puede ser”, agregó el agente de tránsito.
El control fue visto en la ruta Cercado-Tiquipaya, donde varios taxis recogían pasajeros. Un conductor del radiotaxi La Rosa, que transitaba por la avenida Melchor Pérez y Dorbigni, recogió a una familia que solicitó su servicio, otros con el letrero de taxi realizaron la misma tarea.
Decenas de personas buscaban transporte para evitar la larga caminata y el intenso sol, y así llegar a sus recintos electorales, especialmente a uno de los tres habilitados en el área citadina del municipio de Tiquipaya.
“Yo vivo por la avenida Reducto y Cuatro Esquinas, he tenido que venir a pie a votar”, contó José Rojas, quien llegó al colegio Simón Bolívar con su niña en brazos. Pasó lo mismo con Rosario, que salió temprano de su casa “para evitar el sol, me vine caminando y ahora retorno a casa”, dijo.
En el recinto electoral se instalaron 29 mesas de sufragio, algunas registraron largas filas, otras no tenían ni un elector. “Están viniendo, aquí votan 223 personas y en estas dos horas unas 90 han llegado”, manifestó Zenón, jurado electoral de la mesa 13.
CONFUSIÓN. Hubo gran movilización de gente en los recintos electorales, la mayoría buscaba su mesa. Margarita Flores no encontró su mesa en el colegio Bolívar. “Me dicen que no hay mi nombre pero aquí debo votar según mi boleta de inscripción”, se lamentó. Era la primera vez que sufragaba. Aledaña a ese recinto, la Unidad Educativa San Miguel fue habilitada para sufragar, allí halló su mesa.
Lourdes Alarcón, notaria electoral, explicó que “han cambiado mesas y recintos y ni nosotros sabemos por qué, hubo mucha confusión”. La gente se movilizó en familia; bicicletas y carritos de bebé abarrotaron las calles de Tiquipaya, donde también se vio gran cantidad de comerciantes de comida, fruta, refresco y helado. “Solo en estas fechas tenemos venta loca”, contó Marina Cáceres, comerciante.
Hasta el mediodía, autoridades departamentales y municipales emitieron su voto, al igual que la población, que se volcó a las calles como si fuera el Día del Peatón.
Delegados y encuestadores
Angélica Melgarejo – Cochabamba
Además de los votantes, delegados por las opciones Sí y No y encuestadores se dieron cita en los recintos electorales de Tiquipaya. La propaganda no faltó, incumpliendo la normativa electoral.
En la Unidad Educativa San Miguel, al menos 25 personas identificadas con cintillos que decían “delegado” se ubicaron en las diferentes mesas electorales.
“Estamos realizando el control, primero vimos cómo votan y, sobre todo, controlamos el conteo”, explicó Luis Gutiérrez, delegado por la opción Sí. Agregó que en todos los recintos habilitaron delegados.
En el lugar no se vio a ningún delegado por la opción No. Según José María Leyes, alcalde de Cercado y miembro de Demócratas, son 6.000 delegados en su municipio y 40.000 en todo el país, además de un centro de cómputo para el control. Sin embargo, denunció que en algunas mesas no dejaban acreditarse a los delegados por el No.
Además del control, en los recintos fueron desplegados encuestadores, algunos tímidamente preguntaban la opción elegida, otros realizaban su tarea rápidamente porque “tenemos cupos y turnos que cumplir, somos de Ipsos”, manifestó Israel, encuestador.